OO3.

1.1K 99 10
                                    

C h a p t h e r  3 ;"We meet again, candyboy"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

C h a p t h e r  3 ;
"We meet again, candyboy"

( Punto de vista de Hayley )

▃ ▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃ ▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃ ▃


Las comisuras de mis labios se elevaron involutariamente, y es que ¿Cómo no hacerlo? Si ver esa sonrisa tan hermosa era contagioso.

No me gustaría llamar nuestros encuentros "casualidad". No, esa palabra no me terminaba de convencer.

¿Debería llamarlo destino?

Si, así suena mejor.

Espero no te moleste, chico de los dulces.

—Nicholas, él es Lee Jeno. Jeno, Hayley Nicholas. —el chico estiró su mano, a lo que yo la miré divertida. Oh, así que tu nombre era Jeno; tus padres habían elegido idealmente, a tu rostro no podría quedarle otro nombre tan bien.

Negué levemente, encontrándome con su mirada. —Ya nos conocemos.

Los otros dos chicos quedaron impresionados por la repentina confesión, aunque me atrevería a decir que Jisung no estaba completamente satisfecho con lo dicho.

"Nos vemos después" Recordé sus palabras, ciertamente ahora tenia sentido. Así que él ya lo sabía, que astuto. Tampoco debió de ser muy difícil de adivinar por el distintivo uniforme.

—Fui a comprar un dulce para mi mamá, solo quedaba uno y en vez de pelearnos por éste, lo dividimos a la mitad. —La forma en que hablabas era serena, me gusta. Suave pero reconfortante. Realmente no te conozco, Jeno, pero hay algo en ti que me hace sentir calma. Tal vez es que tú eres demasiado dulce.

Basta de suposiciones, Hayley. Concéntrate.

—Entonces, ¿Se conocieron por un...dulce? —El castaño parecía un poco sorprendido, aún así mantenía su bonita sonrisa. Porque si, Na podría ser muy juguetón y coqueto, pero no se podía negar que era atractivo.

Asentí tranquilamente. —Por lo menos es más original a que sea mi vecino.

Una tímida risita resonó por la garganta de Jeno, sus ojos desaparecieron por unos momentos. Parecía un tierno gatito.

—Que pequeño es el mundo, o por lo menos Seúl.

Seguimos la conversación con algunos temas triviales simples como que comida preferíamos. Como mucho llevábamos cinco minutos conversando.

—Debo irme, adiós. —El rubio que no había aportado nada a la conversación interrumpió toda charla. Se veía pensativo, pero era algo que realmente no podría decir al cien porciento.

Justamente cuando éste nos dio la espalda dispuesto a irse, tomé su muñeca. —¡Espera!

El mayor bajó su mirada a su muñeca, dónde se encontraba mi mano. Sus ojos se abrieron más de lo normal, pero las demás facciones de su rostro quedaron igual.

-ˋ CHAIN ::Donde viven las historias. Descúbrelo ahora