Eres lo que necesito

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El techo de la habitación que le fue proporcionada dentro del castillo era a su vista impresionante, con pinturas del cielo del verano, daba una sensación familiar, esta habitación era más clara cálida e iluminada la decoración era más sencilla nada tan fastuosa como la anterior, y el primer problema les llego, Taemin no tenía ningún cambio de ropa, y las que Minho pudo proporcionarle eran pesadas y mucha tela mucha tela, la cuestión era que debía mantener su alas libres así que aquí estaba en espera de que toda aquella ropa fuera terminada de modificar, Las hadas fueran de la estación que fuera llevaban todo el tiempo la espalda descubierta sus alas representaban una parte importante de sus cuerpos y necesitaban de libertad. 



Taemin se dio cuenta de que los guardias que lo custodiaban todo el tiempo, parecían juzgar cada mirada cada palabra cada paso que daba, se sentía incomodo, el siseo que generaban le helaba la piel lo ponían completamente a la defensiva y eso no era seguro para aquellos guardias, porque fuera de la imagen de una hada tradicional, ellas tenían su propio estereotipo. Ellas y Ellos no andaban vestidos con hojas, ni eran débiles y vivían de recolectar semillitas, El pueblo feérico era conocido por ser los gobernantes del mundo mágico comprometidos con el honor y la etiqueta como su contra parte los vampiros. Vanidosos y orgullosos los seres Feéricos portaban sedas y bordados de oro y plata, además de poseer el ejército más letal del mundo mágico, del que Taemin era general en Kingdom Dream.


El Príncipe Taemin no encajaba en la descripción, su belleza delicada y exquisita llegaba a ser sobrenatural aun para las criaturas mágicas, fuera de su rostro bonito él era la pura determinación con una inteligencia y astucia que lo convirtieron en quien era hasta el día de hoy.
Esto significaba que cualquier desdichado que le faltará al respeto o quedara en deuda con el terminaba sin cordura por lo cruel y vengativo que resultaba o tal vez diez metros bajo el suelo. El principal problema con las hadas era su naturaleza rencorosa podían esperar años y años para vengarse por cualquier desdén, debido a su longevidad.


Estaba concentrado en la pintura el techo y un par de golpes le hicieron ponerse en pie, llevaba por el momento una bata que caía por sus hombros permitiendo a sus alas libertad
­­­— ¿podemos pasar?—pregunto con dulce voz un chico con una estética que envidio era muy bonito de piel clara tan característica en muchos vampiros, ojos verdes en su forma relajada, cabello rubio peinado de lado, estéticamente elegante con un traje noble negro y hasta en su manera de caminar— ¿Cómo se encuentra, Alteza? —
­—Bien gracias—
El chico superviso a la servidumbre entrar con variedad de ropa perfectamente doblada ante la atenta de mirada de Taemin —Kibum —dijo a la par que tomo una prenda mientras eran colgadas o guardadas en las cajoneras —Mientras permanezca en NightLanding seré su caballero personal, claro si no dispone de otra manera—
—oh no, no está bien, gracias por tus servicios Kibum—



El rubio solo podía disfrutar de la graciosa situación, aun con la modificación a la vestimenta del Príncipe hada, el chico batallo horrores en que esta cediera por sus alas y Kibum como buen samaritano lucho como pudo hasta que esa camisa entro y se ajustó perfectamente a él. Jamás ni en sus más oscuras pesadillas hubiera imaginado que su estúpido y querido amigo Minho terminaría enlazado a esta preciosidad de criatura, era un bastardo con suerte. Cuando el mojigato de Minho prácticamente secuestro al chico, no se escandalizo de hecho poco le importo, cuando Jonghyun le hablo de que el chico en cuestión era una hada, ahí puso toda su atención. Pero cuando Minho llegó la noche anterior al comedor frustrado y desesperado ofreció su muy humilde ayuda, el chico le planteo enamorarle, no sangre no lazo no Seele, Kibum de inmediato tuvo afinidad por el valor del principito, para el Minho tenía la sensibilidad de una papa y el poder de seducción de una roca.
— enserio eres todo bocadillo, cariño— le dijo mientras el chico aleteaba un poco cerciorándose que estaba cómodo—
— ¿perdona? —
— ¿Vamos tú crees que tu carita angelical me engaña?-le sonrió mientras le guiño un ojo tomando asiento en la cama— no sé cómo lograste que el idiota de Minho, cediera tanto, te alabo por ello— Taemin le sonrió cómplice—
— encanto de hada, ¿tal vez? —
Kibum se regocijó este niño sería un atisbo de felicidad propia en este frio y lúgubre cementerio.

Veneno para las HADASWhere stories live. Discover now