Harry Styles In Chile (Experiencia Personal)

25.05.18

Las horas se me hacían eternas al estar de pie esperando, la fila era inmensa. Todo el lugar estaba repleto de personas o más bien, de chicas admiradoras. Cada ciertos minutos avanzábamos escasos pasos. De a poco empezaba a ver el letrero que decía "Movistar Arena". Con cada paso que avanzaba, el estómago se me apretaba de los nervios. Cuando llegamos al principio de la fila en donde estaba la abertura, entregué el papel más apreciado e importante que tenía en mis manos. Era la entrada para ver a Harry Styles. ¿Quién se lo hubiese imaginado?
De tanto ver sus conciertos en la televisión, pude ver uno en vivo y en directo. ¿Qué cómo se sintió? Pues, simplemente no hay palabras para explicar toda la emoción y alegría que uno le entrega al artista en pleno concierto. 

La emoción me invadió por completo. Nunca había ido a un concierto, siempre me sentía afortunada de ver a Harry y a los chicos (ya saben...Niall, Louis, Zayn, Liam) en una pantalla en donde disfrutaba de su presencia y de su talento musical...Nunca pensé ir a verlo y de cantar junto a el sus canciones. 
Al estar dentro del Movistar Arena, me percaté de todas las fans que habían venido. Eran muchas. Todas con un mismo sueño y propósito.
El momento de espera fue efímero dentro del lugar, las luces se apagaron, las niñas gritaban a todo pulmón, todas se pusieron de pie al igual que yo. De repente se comenzó a escuchar el ruedo de una guitarra. No lo podía creer. Sabía que aquello significaba que ya estaba arriba del escenario aquel joven con rizos alocados. Se escuchó la batería, las personas gritaban y gritaban. Comencé a sollozar al sentir que faltaban segundos para verlo. Mis ojos miraban por doquier, sin duda alguna mi nerviosismo de un momento a otro se elevó. Las piernas me temblaban, las manos me sudaban, mi voz sollozaba. Escuché como las fans alababan con aplausos y gritos su llegada. La mayoría de ellas estaban llorando. Intenté contenerme, pero cuando comencé a escuchar una voz, si, era la voz de él, de Harry Styles, de mi debilidad, la que oía en mi televisión, esa voz que la conocía muy bien. Lo vi entrar al escenario, estaba a tan solo unos metros cerca de él. Podía ver la margarita que se le formada en su mejilla al sonreír. Al verlo en frente de mi, a una escasa distancia, no pude aguantas las ganas de derramar unas cuentas lágrimas de felicidad. Intentaba cantar junto a él, pero las lágrimas me lo impedían, no quería cerrar los ojos porque no quería dejar de verlo. Mientras cantaba lloraba a viva voz. Mis anteojos se empañaban a cada rato...En aquel preciso momento, se me olvidó todo. No sabía en donde estaba o con quien estaba. Solo podía pensar en él, solo en él. Recuerdo precisamente la cancion con la cual se inició el concierto, fue "Only Angel"

"Vi a un ángel.
De verdad vi a un ángel.
Abre tus ojos,
cierra la boca y ve
que sigo siendo el único
que ha estado enamorado de mí mismo.
Estoy contento de tenerte
pegada entre mis dientes,
y no hay nada que pueda hacer para evitarlo.
Me rompí un dedo
Llamando a la puerta de tu habitación,
tengo ampollas en mis nudillos,
de arrastrarme por los suelos.
No podía llevarte a casa, con mi madre,
con esa falda tan corta.
Pero creo que eso es lo que me gusta.
Ella es un ángel,
el único ángel.
Ella es un ángel,
mi único ángel".

En aquel momento, se me olvidó todo lo que habíamos hecho para llegar hasta ese lugar en el cual lo conocí, sin duda alguna fue un sueño hecho realidad. Aquella vez fue más emocionante cantar sus canciones y gritar a la vez. Comenzaba a quedarme sin voz pero adivinen...exacto, no me importó. Llegaba a quedar afónica, peor que la Ariel cuando la Úrsula le arrebató la voz. Era desesperante gritar y sentir que no lo podías hacer.
Ya no me quedaba voz para gritar pero aun así lo hacía. El estar parada arriba de las sillas por varias horas valió la pena. Todo el esfuerzo que hicimos en ir a verlo, valió la pena.