Teach Me Love » BaekSoo

Teach Me Love

No lo podía creer.

El imponente rojo brillaba como clara sentencia frente a sus ojos. Sintió sus manos temblar ligeramente mientras sostenía el papel en sus manos.

Reprobado

—... aún puedes salvar el año, ¿sabes?

Irritado, Baekhyun giró su rostro bruscamente hacia su compañero y si los ojos pudiesen matar, Chanyeol ya estaría diez metros bajo tierra. Por supuesto el menor no podía comprender su situación; el muy idiota se había eximido de lírica con un perfecto y ostentoso cien.

Aquel pensamiento no hizo más que aumentar su resentimiento.

—¿A costa de mi verano? ¿A eso te refieres? —espetó entre dientes desviando su atención del otro para meter el examen dentro de su bolso con fuerza desmedida— Demonios.

El alto abrió los ojos asustado y levantó ambas manos en señal de rendición negando con la cabeza.

¿Por qué de pronto Baekhyun parecía el villano en esta situación? ¡Él era la víctima!

Soltó un suspiro resignado.

Sabía que no debía desquitarse con el más alto, pero reprobar lírica y perder su maravilloso verano en el proceso no estaba dentro de sus planes.

El profesor Zhang Yixing, sin duda, era... algo. Baekhyun, de cierto modo, lo admiraba, ya que el chino parecía ser un genio en un par de piernas, que a partir de cosas básicas de la vida cotidiana era capaz de crear las más maravillosas letras. Era joven, apuesto y tocaba toda clase de instrumentos. Poseía una sonrisa angelical y una actitud algo volátil que cualquiera que entrara a su clase por primera vez pensaría que era pan comido, mas la verdadera naturaleza del profesor Zhang sólo salía a la luz los días de examen. Despiadado era la palabra que mejor lo definía. Las sonrisas antes afables eran reemplazadas por ojos estrictos y palabras crudamente honestas. Era como si su gemelo malvado fuese y ocupara su lugar, y que no descansara hasta ver lágrimas en sus alumnos.

A veces, a Baekhyun le aterraba más la escalofriante doble personalidad de su maestro que reprobar su asignatura. De todas formas, lo último ya había sucedido y hasta el momento seguía vivo.

—Aún no puedo creer que pasaré todo mi verano con el Sr. Fragmentado esperando por que la bestia salga a la luz.

Chanyeol rompió en estruendosas carcajadas, golpeando el brazo del mayor sin cuidado en un intento por controlarse, mientras caminaban en dirección a la cafetería. El más bajo fingió molestia ante los ataques de su compañero en tanto una pequeña sonrisa escapaba de sus labios. Eso había sido gracioso. Baekhyun se sorprendía de lo ingenioso que podía llegar a ser. Lástima que aquello no se reflejara en lírica.

—¡Eso estuvo bueno! —rió una vez más el menor— Es una buena película.

—No tanto cuando pareciera que puede pasar en la vida real.

Chanyeol volvió a reír de buena gana contagiando a Baekhyun.

—Aunque, hyung, creo haber escuchado por ahí que el profesor Zhang no va a dar las clases recuperativas este verano —informó repentinamente el más alto.

Con el corazón acelerado, Baekhyun volteó a verlo algo desorientado. Eso sí era una buena noticia.

—¿Qué? ¿por qué? ¿dónde escuchaste eso? ¿quién es? ¿es esta mi salvación?

Baekhyun estaba extasiado. Si el profesor Zhang no impartía las clases, quizás tendría una oportunidad.

Si bien el chino era exigente en su asignatura, Baekhyun debía admitir que él mismo era no era el mejor para lírica. De hecho, era pésimo. Las pocas ocasiones donde no fue humillado en sus evaluaciones, fueron sólo cuando Chanyeol le prestó un poco de ayuda. No quiere ni pensar en cómo habría sido si el menor no hubiese estado ahí.