¿Te has acostado con un desconocido? ...
Yo sí y fue la experiencia más exquisita de mi vida, más que nada porque el hombre resultó ser todo un experto en el sexo. Pero todo cambia al día siguiente... cuando te levantas y comienzas a hablar con esa...
Conducía a velocidad media hacia la mansión, Jimin se había quedado dormido y estaba bien ya que el lugar se encontraba fuera de la ciudad. Comencé a ver la arboleda, al atravesar una gran reja se lograba divisar la majestuosidad del lugar. La mansión era un lugar de fiestas permanentes, los invitados y auto-invitados se acumulaban por montones en la parte delantera haciendo una larga fila para entrar, nosotros los "empleados" entrabamos por la parte trasera.
Presioné el botón en mi llavero para abrir la puerta de la gran cochera, estacioné mi auto en el lugar que llevaba escrito mi apodo y salí del auto encontrándome con SeokJin.
-Buena noche Yoongi -Masculló con mirada filosa, tenía puesto un pantalón de cuero muy ajustado y una camisa holgada elegante color vino- ¿dónde tienes a mi nuevo cachorro?
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-En el bolsillo lo traigo -Amagué la acción de sacar algo de mi bolsillo y luego le enseñé el dedo medio ganándome una mirada de furia- Vamos Jin, estoy tan enojado como tú o más... no te convienen las bromas estúpidas. Jimin se durmió en el camino...
-Quiero verlo. -Dijo con firmeza, le extendí mi brazo para llevarlo y él lo aceptó con elegancia-
-Sé que escuchaste lo que dijo... -Mencioné intentando no subir la voz, caminamos rodeando mi auto-
-Lo hice, pero eso no quiere decir nada... pudo haber escuchado algo o no sé -Dijo restándole importancia-
-No lo creo y sé que te asusta que el te haya analizado sólo con oírte -Me observó con tristeza- pero más te duele que tenga razón en su suposición sin conocerte...
-Cállate Yoongi, él no me da confianza; ha llegado a tu vida de una manera muy...
Interrumpí su hablar abriendo la puerta del copiloto y dejando ver a Jimin profundamente dormido, tenía sus labios abultados y sus manos que a penas se podían ver gracias a que las mangas eran muy largas, se encontraban formando un puño. SeokJin lo observó embelesado, lo tomó en brazos y caminó hacia su oficina, lo seguí.
Dejó a Jimin en su costoso sofá aún con los zapatos puestos, un gesto bastante extraño ya que él cuidaba en demasía todas sus cosas... sirvió dos copas de vino tinto y me extendió una.
-Es muy bello -Confesó tomando un sorbo- parece un..
-Ángel -Completé, él asintió- sé que puedes sentirlo, tiene una energía hermosa que te cautiva sólo con su presencia.
-Así es, quizá... -Guardó silencio al no encontrar una excusa- ¿Por qué quieres meter a ese bebé en esta vida de mierda?
-Él... dijo que quería estar conmigo y vivir junto a mí en todo aspecto... -Jin abrió sus ojos-
-¿No crees que todo va muy rápido? -Preguntó con más calma y negué-
-De hecho yo le pedí que se quedara...-Jin me observó inexpresivo-
