Capítulo 2
Con el Nico somos amigos desde siempre, somos vecinos en lo espejo por lo que crecimos juntos, al Nico siempre le han gustado todo respecto a lo paranormal, he incluso un día escuchamos gritos en una casa, yo quería correr pero el se acercó, yo como su amigo lo acompañe no lo podía dejar solo, fuimos a ver qué onda, era una casa de dos pisos, una de las pocas en lo espejo, y por una de las ventanas que daban a la entrada la vimos, estaba en el segundo piso mientras que su esposo semidesnudo en el primero con su pierna sangrante y su mirada de terror hablaba con carabineros por el celular, o eso dió a parecer, la tipa dió un salto inimaginable y no pude más, solo quise correr, me aleje unos metros pero el Nico se quedó, me dijo que vio como ella le cortó el cuello mientras repetía con voz endemoniada ¿Quien es Marla? y luego se lo corto ella, me dijo que mientras la sangre salpicaba por todos lados lo miro, lo miro fijamente a los ojos y sonrió antes de morir, las sirenas corrompían el silencio de la población, antes que llegarán los carabineros nos fuimos, el Nico estuvo semanas hablando del tema, yo solo quería olvidar lo que pasó.
Ya ha pasado un año de eso, los viejos del Nico están de vacaciones así que iré a verlo hoy, dijo que tenía algo especial, espero sea copete.
"Nico ya llegué" le escribí al Whatsapp.
Abrió la puerta y me saludo,
-Buena Carlos, te demoraste wn ¿Como estay?
-Bien, con ganas de vacilar
-Pasa, igual hoy no tengo planeado vacilar, no se, están todos en la playa no hay a quien invitar
-Da lo mismo, pidamos una pizza o algo
-Dale
Vimos una película, la nueva de IT, la verdad, esperaba más de la película, y dsps nos fuimos a la sala.
-Oie Carlos- me dijo - ¿tu creí en los fantasmas?, ¿En weas paranormales?
-No se, he visto películas pero nunca me ha pasado nada
-Cacha lo que traje
-¿No eso es la Ouija?
-Si perro, probemos poh
En realidad, igual me da un poco de miedo, siempre digo que no creo, pero tampoco voy a arriesgarme, aunque el Nico me convenció, fácil, rápido. Pregunto varias cosa, al principio me dió risa, pero llegó un momento en que se comenzó a mover, el Nico siguió preguntando cosas pero no pude más del susto, me fui, preferí eso a tener que vivir cosas que me dejen mal. Llegue a mi casa como a las 7:30pm, el Carlos me fue a dejar, me hice un sándwich y me puse a ver tv, al parecer mis viejos no han llegado de la fiesta, entonces pasó, las luces comenzaron a parpadear y entre esos parpadeos de luz aparece en las sombras un tipo, un tipo con máscara negra y un machete en mano
-Mierda, ¡Sal de aquí conchetumare!
Y se abalanzó contra mi, al parecer eso de agarrar a chucha a un fantasma no los espanta, más bien los enfurece, corrí a donde pude, y termine encerrado en el baño, la luz se cortó pero tengo el celular en mano, eran las 8 y algo, por alguna razón solo quise llamar al Nico, pues algo que ver tiene que tener la ouija, y él debe saber cómo ayudarme...
Al cuarto intento, nuevamente el buzón de voz, y solo procedí a enviarle un mensaje de auxilió.
Pasaron los minutos y volvió la luz, los ruidos de golpes cesaron, ninguna marca en la puerta, como si nada hubiera pasado.
Tocan el timbre y en el mismo instante vibra el celular, un mensaje que dice "no lo dejes entrar" al mirar quién está tocando me doy cuenta que es el Nico, me queda mirando y me hace un gesto para que abra, una vez que abro lo dejo pasar.
-Buena Nico, intenté comunicarme contigo pero no contestabas.
-Tenemos que irnos
-¿Que? ¿De qué hablas?
-Que tenemos que irnos wn, ¿Te acuerdas de la ouija?
-Si, ¿que pasa con eso?
-Cuando jugamos abrimos un portal, una vez que volví a casa jugué denuevo y me respondió Sara la niña que mataste hace 16 años
-...
-...
-Corre -susurró una voz
Empuje al Nico y corrí, confundido, sin entender nada, mientras que el Nico me seguía, saco de su bolsillo la pistola, debe ser la de su viejo, me apunto y disparó.
...estoy en mi cama, ¿que abra pasado con el Carlos?, Mi vieja, ¿por qué me habrá pegado? Desorientado sin entender que pasa, caminé medio tambaleante mientras recuperaba las fuerzas, al salir me doy cuenta que el cielo esta rojo, la gente me mirá y forma una línea por la orilla de la calle, mientras que debajo un río de sangre recorrían cayendo en los alcantarillados, y el Carlos al final con una perforación de bala en la cabeza, muerto. Comenzaron a caer las lágrimas poco a poco, y paso, me miró de golpe y susurro - sigues tú.
Todo se volvió negro, no veo nada, ¿donde estoy?
Y ví una luz, logro identificar a una persona
-¿Donde estoy?- pregunte
-Doctor! Doctor! - escucho gritos mientras veo borroso, aún no logro volver en si
-¿Donde estoy?
Escucho que se abre la puerta y siento pasos acercándose, una luz encandila la poca visión que tengo.
-Hola Nico, soy el doctor Mario, ¿sabes dónde estás?
-No lo sé, estaba en mi casa, salí y ví algo que no recuerdo bien, luego de eso desperté acá.
-Estas en el hospital, llevas 2 años en coma.
-...
No lo puedo creer, 2 años en coma, ¿cómo puede ser cierto?
-Se que puede ser duro, pero debes estar tranquilo.
-...
-Esta bien, denle un momento para que se aclare, llamaremos a tu padre.
Mientras mi vista volvía a la normalidad una forma borrosa en la esquina de dicha habitación me observaba, al lado una misma silueta pero más pequeña tomándole la mano, al recuperar la vista las vi, era una niña y su madre, mi madre, pero al pestañear desaparecieron.
Entro el doctor y entro mi padre.
-Hola hijo -Se le caían las lágrimas mientras me hablaba
-Hola papá
-Por fin despiertas -Me abraza y se larga a llorar -Fue duro, muy duro.
-¿Y mi mamá?
-...
-¡Viejo!, ¿¿mi mamá donde está??
-Lo siento hijo, cuando volvimos a casa te encontramos inconsciente y tu madre entro en depresión, hice lo posible por ella, por ayudarla, pero cambio, no dormía, todos los días la encontraba caminando de noche buscándote, hasta que un día la encontré postrada en la mesa con tu foto en mano, ella ya no está con nosotros.
-¡¡¡MI VIEJA!!! ¡¡¡Papá!!!
Comencé a llorar, llore casi toda la mañana, el médico reto a mi viejo por lo que hizo y mi viejo se quedó, consolandome.
Una semana después:
Cada noche soñaba lo mismo, el Carlos recibiendo una bala.
-Papá, necesito llamar al Carlos.
-Esta bien, igual nunca te llamo.
-Papá, porfa.
Me paso el celular y marque.
**Sonando**
Responden y se queda en silencio
-...
-Hola, ¿Carlos? ¿Amigo?
-Hola Nico
-Buena, tanto tiempo ¿Como estas?
-...
-wn, habla poh jajaja
-Estoy con la Sara, tienes que buscar la ouija.
**Corto**
Junto con el silencio tuve una mala sensación. Llamé a la mamá del Carlos y me dijo que murió, lo encontraron en su casa con un disparo directo en la frente. Pálido, frío, inmóvil, muerto, igual que en el sueño.
-Nicolás Hernández, mñn estarás de alta, felicitaciones.
