PARTE FINAL

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Taehyung y Jungkook entablaron una nueva relación que era bastante conveniente para ambos partidos. Después de perder la virginidad con el otro y grabar aquel hito histórico accidentalmente, se acurrucaron bien apegaditos y decidieron abordar el actual problema: ¿Qué somos?

Aparte de ser chicos hormonales que se dejaron llevar por la calentura, eran chicos con una amistad quebrantada. La unión entre ellos, esa que conocían y que los había mantenido juntos por tantos años, acababa de romperse al igual que el culo de Taehyung, y no podían hacer nada para remediarlo.

"Amistad" no era la palabra adecuada para definirlos. Sin embargo, tampoco lo era "Amor". Taehyung no amaba a Jungkook, no de una manera romántica al menos. Le veía como... un hermano menor quizás. Aunque claro, no sueles follarte a tu hermano ¿o sí? Dios, eso sería incesto, pensó horrorizado, y maldijo el día en el que Jungkook había decidido hacer ejercicio para construir ese cuerpo. Todo era culpa de ese fascinante, tonificado, brillante, maravilloso y apetitoso cuerpo que le hacía babear. Si se hubiera quedado con su camiseta puesta, nada de esto habría ocurrido y Taehyung estaría cómodamente viendo memes mientras Jungkook disfrutaba de su estúpida cita.

—Entonces— dijo Jungkook iniciando una inminente conversación de la que Taehyung lamentablemente no podría escapar—, ¿qué somos ahora?

Es lo mismo que me pregunto. Millones de posibles opciones cruzaron por su diminuta cabeza. Podía decirle que lo hablaran después, podía decirle que no tenía ni la menor idea de lo que ellos eran. Maldición, hasta podía hacerle una mamada para distraerlo. Estaba seguro de que sería una huida efectiva.

Pero evitar el tema no serviría, porque si no aclaraban las cosas en ese instante, ¿qué sería de ellos entonces? No había cultivado esta amistad para luego tirarla por la borda; le importaba Jungkook y quería estar a su lado por el resto de su vida.

Ok, eso había soñado como una propuesta de matrimonio, lo que en realidad era malo, muy malo. Desechó la idea de confesarle algo así, probablemente acabaría enredando aún más su situación si lo hacía. Por lo tanto, en busca de una respuesta más fácil y racional, se enfocó en hallar una solución para el problema que habían creado y decidió para ello fiarse en su conocimiento cinematográfico. Es decir, había visto trillones de películas en Netflix, alguna de ellas debía ser lo suficientemente útil para resolver tal embrollo.

La mano de Jungkook acariciaba su espalda con cariño, y sus labios dejaban suaves y cortos besos sobre su frente. Era adorable. Taehyung debía admitir que era una lástima el que Jungkook no tuviera novia; la trataría como una princesa. Con lo protector, dulce, atento y divertido que se comportaba con él, no podía imaginarse los niveles a los que esos adjetivos llegarían si se tratara de su pareja.

Taehyung no quería arruinar esa oportunidad para Jungkook. Era un chico genial que merecía enamorarse de alguien y que ese alguien reciprocara sus sentimientos. Experimentar el amor y todas esas basuras cursis que planteaban las películas Disney, Jungkook se lo merecía.

Quizá lo que en verdad le correspondía hacer, era dejarlo ir. Despedirse de su cuerpo desnudo y de sus bonitos labios, y eliminar cualquier posibilidad de un futuro distinto con un simple "Esto fue un error". Una frase clásica pero que nunca fallaba. Así, su primera vez se convertiría en su última vez, y serían capaces de volver a ser los mejores amigos que solían ser antes de que el incidente ocurriera.

Desgraciadamente, el sexo que experimentó con Jungkook fue espectacular y su diablillo hormonal que controlaba sus decisiones, no estaba de acuerdo con dejarlo ir. Se esforzó en hacerlo. Era consciente de que necesitaba alejarse y regresar a la amistad original. Pero las yemas de los dedos de Jungkook exploraban y tocaban su piel con tal insana suavidad que lo estaba volviendo loco. Y cuando llegó el momento de darle una respuesta, optó por la más riesgosa.

4 THE LIKES •• KOOKTAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora