7 Moments (7 Días De OTP) (Marc X Nathaniel)

Capítulo Alternativo 1

Lo dicho, haré capítulos alternativos, y quizá luego un epílogo, pero de momento solo los capítulos alternativos.

Narrador. -

Ha pasado un tiempo, un día, dos, una semana, dos semanas, un mes, tres meses, más y más días se van acumulado, él tan solo le dijo que estaba enamorado de la heroína de París y eso le golpeó en el corazón, ese día tan solo se despidió, con un excusa, ni siquiera es necesario decirla, porque ni él recuerda cual excusa era. En cuanto llegó a su casa un solo pensamiento rondaba su mente, las palabras se repetían en su cabeza, una y otra vez, ese día lo iba a decir en realidad, pero tras eso simplemente no pudo, no podía y mucho menos sería capaz ahora.

Densas lágrimas recorrían sus mejillas, sollozos salían de sus labios, su corazón se estrujaba, como él estrujaba una una bola de papel cuando lo que había escrito no le gustaba, el pecho le dolía y era incapaz de parar.

…

Pasaron días y se sentía incapaz de volver a la escuela, cada intento hacia que su pecho volviera a doler, era incapaz de volver allí y tener que reencontrarse con él, aquel con quien tenía un no correspondido amor, siempre que despertaba por la mañana, con la determinación de volver, las palabras volvían a su cabeza y de un solo momento a otro esa determinación desaparecía y volvía a sentirse incapaz de cualquier cosa.

Apenas si era capaz de ordenar comida y otras pocas veces salir a comprarla él mismo. Poco a poco estas últimas comenzaron a cesar, cada vez se comenzaba a sentir más débil, fue una de esas mañanas de determinación que tuvo un mareo apenas se levantó, se sentó al borde de la cama y comenzó a toser, toser repetida y dolorosamente.

Vio un par de pétalos salir de su boca.

🌹… 🌹

Por otro lado, Nathaniel estaba algo preocupado, hacía tiempo que no veía a Marc y nadie sabía nada de él, algunos decían haberlo visto, pero nadie sabía de él hacía ya unos meses, eso le tenía preocupado, eran cercanos, bastante cercanos, bueno, eso quería pensar.

Por la cabeza de Nathaniel rondaba siempre la idea de decirle la verdad, aquella última vez que lo vio, en realidad quería decir otra cosa, sin embargo, el miedo y la vergüenza pudieron con él y al final acabó diciendo algo bastante diferente.

Sentía como la preocupación se cernía sobre sus hombros, no estaba para nada concentrado, incluso si intentaba dibujar, siempre que lo hacía de una u otra forma, terminaba dibujándolo a él, pero siempre que lo hacía, la expresión de Marc al final era triste, o su mirada siempre estaba hacia abajo, nunca podía terminarlo con una sonrisa que no fuera una sonrisa falsa o triste.

Intentaba alguna forma de poder comunicarse con él, pero era imposible, nadie sabía nada, ni dónde vivía, ni alguna zona que frecuentara, mucho menos su número de teléfono.

Un día estando frente a su ventana, observo, como las flores comenzaban a crecer, iniciaba la primavera, pero los primeros pétalos comenzaban a abrirse, entonces, quiso dibujar aquellas flores y, como si fuera costumbre, dibujo a Marc de nuevo, pero esta vez era diferente, terminó el dibujo y el chico finalmente sonreía, pero soltaba lágrimas desde sus ojos, lágrimas que se sentían agrias, en la palma de las manos, se veían flores, flores que parecían crecer, otras cubrían ya uno de sus ojos y algunas enredaderas, portadoras de espinas, parecían incrustarse en su cuerpo, finas líneas de sangre las recorrían, y aún así en el rostro del chico, había una sonrisa. Nathaniel se asusto de su propia creación, él conocía, desgraciadamente, de forma cercana la enfermedad, una venida desde el oriente y, aunque había tratamientos, seguía siendo mortal, sintió su corazón apretarse y una pequeña punzada en él.