Rompiendo el Hielo (Serena y Darién)

11. Una noche mágica...

Capítulo 11

Contiene 👩‍🚒Lemon💥
(alto contenido. Sexual)

Serena: este lugar es hermoso, es un sueño hecho realidad, lo más hermoso de todo es que estemos juntos al fin.

Darién: por favor Serena, solamente podré preguntarte esto una vez más, estás segura de lo que quieres hacer, si doy un paso más cerca de ti, no creo poder contenerme.

Serena: no quiero que te contengas, Dariém, quiero que me ames, quiero ser tuya. Hasta que te conocí, no sabía lo que era desear a alguien, tu me has despertado a estas emociones y tú vas a saciarlas...

Estas palabras fueron las que cortaron las cadenas que sujetaban a Darién del piso, ya no había más barreras, solo tenía que cumplir sus deseos y lo más maravilloso era un deseo, mutuo.

Darién permanece parado al filo de la cama, observandola no puede dejar de mirarla, este estaciado con su belleza, entonces Serena se arrodilla en la cama y se acerca él.

Serena: ¿Qué pasa? Acaso te has arrepentido, ya no quieres estar conmigo. O no te gusta lo que ves...

Darién: Cómo puedes pensar eso pequeña, sólo quería guardar ese instante en mi mente, eres perfecta, eres hermosa, eres todo lo que he soñado y más.

Serena sin saber cómo, poco a poco desabrocha los cintos que detienen la capa, las hombreras, la parte superior de la armadura, que aprisionaba el extraordinario cuerpo de su amado, mientras retira cada parte de la armadura lo llena de besos y mimos con ternura. Darién permanece rígido deleitándose con suavidad de las manos de Serena, sobre su piel.

Cuando lo termina de despojarlo de la armadura y quiere comenzar desabotonar la camisa, Darién reacciona y la toma de las muñecas y se lanza sobre ella en la cama soportando su propio peso sobre sus brazos. La besa, con ternura, le besa el rostro, besos repartidos por todos lados luego baja por su cuello, el vestido tiene un escote muy tentador le besa su clavículas y Serena siente estremecer su cuerpo.

Cómo por instinto sus cuerpo se acoplan, el pequeño cuerpo de Serena se ajusta al cuerpo de Darién, parece que están hechos el uno para el otro a pesar de la diferencia de tamaños.
los besos de Darién continúa por todo su cuerpo sobre la tela del vestido coloca sus manos debajo de su falda y comienza caricias entrepierna Serena, no soporta más y se monta sobre el. Darién la ve con la una cara de deseo y fasinacinación, pareciese que estuviese contemplando una diosa, Serena disfruta tanto su mirada que de una manera natural se comienza a desprender del vestido lo baja por sus hombros dejando al descubierto sus pechos, no siente pena alguna, Darién es el hombre que ama y mostranle su cuerpo es tan natural, como respirar frente a él.

Darién la ve sin aliento, siente que esta en el paraíso, la observa es una Diosa y sera suya, cuando Serena toma una de sus manos y no lleva a su pecho, Darién sale del trance en el que parecía sumergido, el sentir la piel se Serena enciende la llama de la pasión, que había estado reprimiendo durante todo ese tiempo. Darién se endereza para tomar su pecho en la boca, lo lame y es tan delicioso como lo recordara, Serena siente tanto placer que deja escapar un gemido, que trataba de reprimir.

Darién: no amor, no te guardes nada, quiero sentirte, saborearte y escuchar todo lo que mi tacto te provoca...

Serena: Darién, no sé cómo describir lo que siento.

Darién: solo dime si te gusta...

Serena : me gusta, me gusta, me gusta... Tanto...

Darién talla la entrepierna de Serena contra el y ella siente su exitacion, y lo recuerda, su textura, su sabor, su calidez. Lleva su mano al encuentro de su miembro, y lo acaricia sobre el pantalón.