El Circo de media luna.

El Circo de la media luna.

"- ¡Vengan amigos! ¡Acerquense sin temor! ¡El circo del señor Montecristo esta aqui! - gritaba energeticamente en cada parada en la que haciamos nuestro show. 

Es verdad, puede ser que el espectaculo de los circos este algo descontinuado. Entre la baja audiencia que tenemos con el pasar del tiempo y los escandalos que tienen que ver con el maltrato de animales exoticos. El peligro de esta profesión es continuo, uno puede caer del trapecio como los padres de Dick Grayson, beber gasolina e inmolarse internamente al escupir fuego, presenciar como una torre de elefantes vivientes es arruinado por el elefante mas chico y orejon de ellos, causando una estampida de seres vivos corriendo por sus vidas, aumentando los riesgos de mortalidad debido al miedo de ambos, tanto los animales como las personas. Esta bien, esto ultimo lo he visto en Dumbo, pero creo que entiendes mi punto. 

La vida de un cirquero es comunmente una historia triste que ha llegado a nuestras carpas en la busqueda de que alguien pinte una sonrisa en su rostro y le motive a hacer lo mismo por otras personas. Las vidas de quienes conforman este acto de hora y media aproximadamente han mejorado, no desde el punto de vista de los lujos y la fama; no somos mas que desconocidos, gente con nombres, de los cuales nunca se hablara en el mundo. Posiblemente, nadie conozca jamas la fuerza de Otero, la habilidad de Yoanna para malabarear distintos objetos. Nadie conocera el carisma de Teobaldo, el payaso mas agradable de la compañia. La habilidad de Nikola para lanzar cuchilos a ciegas y los nervios de acero de Natasha para ofrecerse a pararse en el paredon. La voz de Andrea, un hombre mayor ciego, el cual cantaba en las atracciones afuera del circo.

Olvide mencionartelo, nunca has visto un espectaculo como el nuestro. Somos mas que telas gigantes y actos ya conocidos. Somos un festival que recorre los kilometros en busca de quienes nunca nos hayan escuchado. Vivimos del aplauso, de las muestras de cariño y de los tatuajes mentales que dejamos en las memorias de quienes se animan a vernos. 

-¡Maravillense señores, entren a un lugar en donde reina la irreverencia y la festividad!

Mi nombre es Magnus, y es un placer darte la bienvenida al Circo de la media luna. No, no tienes que temer, mi niña. Una vez que hayas pisado nuestra tierra, probado nuestros dulces y sentido la comodidad que ofrecemos, sera un buen momento para que lo observes todo. Siendo que el dia de hoy eres nuestra unica asistente, yo mismo te dare el tour que le reservo a la gente importante. No, no importa que tus bolsillos esten vacios. Si tu alma esta deseosa de regocijarse, entonces has venido al lugar correcto.

Miralo ahi. Se llama Eustaquio. Es parte de nuestra caravana del horror. Mira su rostro, sus ojos obscuros, su piel palida; su barba cerrada y su menton afilado. Si bajamos las luces, si dejamos que apenas entre un poco de luz por el resquicio de la puerta, podras obserlarlo. Ahi moviendo sus brazos en la oscuridad, haciendo bailar a sus titeres, contandole tragicomedias a quienes le ponen atención. Eustaquio, un estudiante de literatura, llego a nosotros a la edad de veinticinco.

Sigamos caminando, todavia hay muchas cosas mas que ver. 

¡Pero mirala ahi! Es Cirse, practicando para llamar a los espiritus y adivinar el futuro. ¿Te atreverias a acercarte? Es una ironia increible, pero no deberias confiar en su palabra. Los lectores del tarot, la hechiceria, las visiones que prometen ser verdaderas, para mi son fantocherias. Como lo ha señalado el Doc Brown, el futuro no esta escrito ni existe la predestinación. Nadie deberia querer que adivinen su suerte y vean su futuro, si la posibilidad de cambiarlo reside en la mano de cada uno.

Caminemos, dulce niña, por este basto mar de ilusiones. Mira a tu derecha. Los juegos mecanicos estan encendiendo sus luces, la noche esta por alcanzarnos, y el cielo se prepara para ser usado como un enorme lienzo en donde pintar. Los caballitos, la rueda de la fortuna, aquella montaña rusa que dicen esta maldita. ¿Puedes ver sus luces? Cierra tus ojos y presta atención ¿Puedes escuchar sus risas y sus gritos? ¿Lo oyes? ¡El carnaval ha empezado! 

Observa como pasan por la calle central, Eustaquio maneja sus enormes calaveras que imitan sus movimientos. Latonia realiza piruetas en el aire mientras la fuerza de Otero la sostiene por los aires. Los tambores suenan, las trompetas tambien. Las filas de payasos se amontonan entre si causando situaciones jocosas para los espectadores. Teobaldo prioriza estar cerca de Natasha, desea enteramente ser el dueño de su corazón. Lamentablemente, no hay persona en la Tierra que pueda brindarle a ella lo que Nikola le ha dado durante tantos años. Los cohetes iluminan el cielo con colores vivos; luces amarillas, chispas rojas, circulos anaranjados y bengalas blancas. ¡Esto es un festival, mi niña!

Hemos venido el dia de hoy buscando brindarte una experiencia inolvidable. Querida Ximena, tu has venido a nosotros. Asi como los mas veteranos y los mas jovenes que se han unido, todos aqui han llegado buscando la paz. No sientas temor, no sientas desconfianza. Todos aqui somos una familia. Aunque no llevamos la misma sangre, la comunión que hemos formado ha estrechado nuestras almas, la cuales estan en una cruzada buscando una mejor vida; una sin dolor.

No hay nada que perder, podemos construir puentes magicos a otro lugar. Soy el miedo que tienes, la fragilidad de tu voz. Deseo que te entregues a mi, que sueltes tus miedos y te aferres a este lugar magico. No temas, pequeña, todos estamos de acuerdo. Aqui encontraras que las lagrimas son prisioneras y los dias de fiesta son el pan de cada dia. Aqui no existe el dolor, ni  terapias intensivas. Aqui no existen las angustias, brindamos con alcohol y cantamos canciones frente al fuego. 

El Circo de la media luna ha llegado hasta esta ventana, en tu habitacion del hospital, buscando transplantar la flor de tu alma a la eternidad. Puedo prestarte mi sombrero si asi lo deseas, puedes liderar nuestros desfiles. Queremos que seas la nueva perla del collar de nuestro cuello. Que el perfume de tu voz nos empape a todos, en este lugar donde nada duele, nada tememos y nada debemos. Queremos que cantes con Andrea, que seas mas fuerte que Otero, que animes el corazón de Teobaldo y seas ferrea como Natasha.

Podriamos abrir un espacio para un nuevo acto. Se que amas la danza, el ballet; que deseas ser el cisne mas bello de todos. Te mueves con gracia, lo disfrutas, te apasiona seguir las notas del piano y los susurros de la multitud. Que el dolor se apague dentro en tu pecho, que la amargura eche a volar. Abre tus alas, dulce cisne. Vuela alto, hoy las estrellas estan a tus pies.  

Querida Ximena, todo aquel que ha venido en busca del Circo de la media luna esta buscando quien le pinte una sonrisa en su rostro. Somos eternos, bailaremos hasta el final de los tiempos; nustro gozo se escuchara en cuanto dos labios se besen entre si. Las flores seguiran creciendo fuertes. Dejate ir, deja de luchar, pierde el miedo a ahogarte. Escucha los tenues latidos de tu pecho, como van apagandose, como pierdes el sentido del oido, la vista, pero no el tacto. Las manos de tu madre sostienen la tuya, ha estado aqui desde el principio del mal y te ha acompañado hasta el ultimo momento de tu vida. Sus lagrimas denotan cansancio, tristeza, agobio. Por fin vas a descansar, pequeño cisne. El lobo se ha ido. 

Han pasado varios minutos de calma... ¿Escuchas eso?

Un tenue golpeteo, los pasos que se acercan freneticamente, un tambor de guerra anunciando su llegada. Tu piel ha recobrado el color que tenia, tienes nuevamente la fuerza para levantarte por tu propia voluntad. Ya no estas conectada a maquinas complejas, no esperas el turno para entrar a la sala de terapia. Respiras con normalidad, vuelves a sentir esperanza. Bailas en el escenario, las notas vuelan llenando la carpa con deseos de mirar tu belleza. Personas de todo el mundo han venido a ver tu acto. Sientes el aplauso, la caricia de la gente. Dominas el momento. Eres lo mas bello.

Bienvenida al Circo de la media luna, cisne mío."

Relato en memoria de Ximena, mi pequeña hija. Se que te encuentras bailando, la leucemia se ha ido.

Te quiere, tu padre.