(2) Soyeon

7 1 0
                                    

Lía:

Era un día lluvioso, la brisa y las gotas de agua chocaban fuertemente en mi ventana, mientras tanto yo me encontraba mirando detenidamente el desastre que se formaba afuera desde mi ventana de cristal. Los estúpidos amigos de mi hermano habían venido a una pijamada ya que no tenían nada que hacer en sus casas además hoy era sábado y se quedarían en nuestra casa una semana completa y no teníamos clases gracias a los huracanes.

Tenía puesto mi pijama de oso panda, era un conjunto pegado de manga larga, me puse mis pantuflas, salí de mi habitación y baje lentamente las escaleras hasta poder escuchar más de cerca lo chillidos y gritos de los idiotas, tanto que me dolió un poco la cabeza, cuando acabe de bajar las escaleras ignore a todos y pase de largo ni si quiera me moleste en mirarlos, pues ellos habían echo lo contrario, desde que me vieron se callaron y dejaron de hacer lo que estaban haciendo.

Fui a la cocina y me preparé una batida de chocolate, me apetecía desde hace días, escogí uno de los sorbetes y se lo puse
Al bazo, salí de la cocina bebiendo mi querido batido y subí las escaleras nuevamente ignorando a todos que por alguna razón estaban callados.

Jk:

Estábamos jugando y gritando como locos pero nos detuvimos cuando vimos a una Lía con cara de pocos amigos bajando las escaleras, nos quedamos viéndola pues ella dijo que no bajaría hasta que llegase su madrastra que era la única en que confiaba, pero al parecer le dio hambre porque entro directo a la cocina sin importarle nada.

Se veía tan linda y tierna con ese pijama y sus mejillas estaban un poco rojas junto con la punta de su nariz, lo cual le daba mas ternura aún y me moría por dentro lo digo enserio, quería besar esos labios que se encontraban realmente rojos y esas mejillas con un color medio rojo y nariz, besar su cara, besar su cuello, besar su cuerpo, pero... no puedo.

Después de unos minutos salió con batido de chocolate y desde que lo vi me rugió el estómago la cosa era que quería un batido de chocolate, pero no sabía cómo hacerlo.

-aish! ¿chicos a alguien más le dio hambre?- preguntó Jimin con una mueca mientras acariciaba su abdomen.

-creo que a todos- dijo Jin

-pero yo quiero batido de chocolate- dije triste.

-pues no se hacerlo- dijo jin.

Todos lo miramos algo confundidos y sorprendidos ya que el era un gran cocinero.

-¿que? No me miren así, no se usar la batidora de esta casa- dijo Jin normal.

-pues yo también quiero batido de chocolate- dijo esta vez Tae quien hablaba con una mueca.

-bien pues... creo que todos quieren batido de chocolate)?- dijo Yoongi

-sip- dijo jimin

-¿pues alguien sabe... prepararlo?- dijo Yoongi y no se escuchó ni un alma en la sala -bien creo que le pediré a Lía-

-¿¡yo puedo ir!?- pregunté emocionado.

Yoongi rodeó los ojos y suspiró -si, ve-

Muy emocionado literalmente, corrí por las escaleras para ir a la habitación de Lía pues nunca había entrado y tenía curiosidad de saber cómo era.

Cuando ya estaba frente a la puerta de la habitación de Lía me quede observando el letrero que estaba colgando en la puerta el cual decía: "touch before entering", sonreí ya lo había visto pero me gusta mucho la letra de Lía, finalmente toque la puerta suavemente y un "pase" se escucho del otro lado de la puerta, abrí la puerta lentamente y la dejé a la mitad, asomé mi cabeza pude ver un poco la habitación de Lía pero no la podia ver bien.

-idiota si te digo que pases es que entres, aquí no hay bestias- respondió Lía de mal humor.

-ah... p-perdón- dije entrando completamente, estando dentro pude observar muy bien la habitación de Lía, mire cada esquina rápidamente y mi mirada se dirigió a la hermosa y preciosa Lía quien estaba acabando su batido de chocolate mientras veía por la ventana.

-¿que quieres?- dijo seca sin dejar de mirar a la ventana.

-es que... los chicos quieren un batido d-de chocolate pero... no saben cómo prepararlo y tú eres la única-

-¿y quieren que yo lo prepare?- dijo por fin mirándome y dejando el bazo en la mesa de noche.

-s-si pero...- me interrumpió

-¿acaso creen que soy su sirvienta? ¿Para que está el internet? O aún mejor ¿para que esta jin?- dijo mirando de nuevo hacia la ventana.

-jin dice que n-no s-sabe usar... la batidora de aquí-

Pude notar como Lía suspiraba e iba caminando hacia la puerta paso por mi lado y pude oler su fragancia femenina, olía tan jodidamente bien.

Baje junto a ella las escaleras, al bajar todos estaban sentados platicando normalmente.

Lía:

-¿así que quieren que les prepare batido de chocolate?-

-pues... si- dijo RM

-ajá... ¿que ganó a cambio?- dije de brazos cruzados, pues viniendo de estos idiotas no me darían algo bueno pero aún así tenía que ganarme algo.

-Un beso!- dijo Tae con su sonrisa cuadrada.

Todos se quedaron callados mirando hacia Tae y jungkook lo fulminó con la mirada.

-d-digo... beso que le dará... jungkook... si- dijo Tae y termino en un suspiro avergonzado.

-¿estas drogado?- pregunté

-un poco- rio nervioso

-lia, ¿que tal si te dejamos en paz y ya? Yo se que lo quieres- propuso Yoongi

-bueno idea- me convenció

De inmediato fui a la cocina y busqué lo ingredientes, pues era fácil de hacer, después de unos minutos, el batido ya estaba listo y salí a la sala para informales.

-ya está listo- todos me miraron sorprendidos y otros confundidos o esperando una respuesta- ¿que? Pensaban que se los traería JAJA ni que fuera su sirvienta-

(...)

8:00 PM

-yay! Ya llego Soyeon-

Baje corriendo las escaleras y la abracé, la extrañaba tanto, Soyeon es mi madrastra, la única persona en la que puedo confiar, la que si me ama de verdad, la que nunca me miente, la que confía en mi y yo en ella.

Soyeon se había casado con mi padre, al principio creí que mi padre había cambiado pero me equivoqué... y mucho, el seguía siendo el irresponsable e inmaduro huyendo de sus problemas, aún así con un nuevo amor, seguía siendo un maldito mujeriego y un despreciable hombre, un tiempo Soyeon se dio cuenta de eso, porque yo se lo decía, le decía que el no era bueno y que la engañaba, pero ella no comprendía, un día mi padre llegó a la casa con una de sus putas muy borracho y no sabía que íbamos a estar hay los tres, por eso Soyeon se divorció de ese maldigo drogadicto, pero ahora ella se culpa por no creerme pero yo le digo que no es su culpa simplemente no se quitaba la venda de los ojos, ella hizo lo que podía para tener mi amor y lo consiguió, consiguió que un alma tan negra le entregase el poco amor que tenía.

All For You (Jungkook y tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora