~Aᴍᴏʀ Dᴜʟᴄᴇ ʏ Pɪᴄᴀɴᴛᴇ~ (PAUSADA)

01- Nuevas Emociones

Pov Katsuki:

Aún no entendía. Pasaron dos meses del Festival Deportivo y sigo sin entender por qué tengo tanta curiosidad por esa castaña.
Involuntariamente iba detrás de ella sin que lo notará, no la perseguía, claro que no... Solamente la observaba en las clases, mientras entrenaban con toda la clase, cuándo hablaba con Deku o cuando reía con sus amigas. Bueno, quizás si la espiaba, pero no sé por qué.

—Oye Bro ¿Acaso me estás escuchando?— Kirishima, que estaba al lado mío hablaldo. Obvio que no lo escuchaba, estaba viendo a la Cara de Ángel hablar y reír.

—No jodas, no estoy para tus estupideces— contesté con enfado. Tampoco entendía esa sensación de mal gusto al ver a Deku alrededor de Uraraka. Me producía enojo. Supuse que era normal, ya de por sí odio a ese idiota, pero era diferente. Le dolía ver qué ella reía con él. Era extraño, se sentía extraño.

—Hmm ¿Sabes, Bro? He notado que últimamente estás muy embobado con Uraraka ¿Pasó algo?— Kirishima puso su cara pícara con una sonrisa de victoria.

—Tsk ¿Qué dices? Claro que no, son tus putas alucinaciones— Desvíe la mirada de la castaña, y miré con molestia a Kirishima. —¿Qué mierda quieres?—

—Pueees— tomó la silla que estaba delante mío y se sentó. —Mina pensó que era una buena idea ir al centro comercial con todo el curso... Y me dijo que te invitará ¿vendrás?—

—Claro que no, tengo mejores cosas que hacer que pasar el día con unos malditos extras— aunque  realmente no tenía nada mejor que hacer.

—¡Pero!— Kirishima fue interrumpido al notar que Aizawa había entrado para dar comienzo a la clase. —Solo piénsalo ¿Si?— se fue hacía su asiento sin rogar más.

Y nuevamente mi mirada se posó en Uraraka, aunque ahora accidentalmente habíamos cruzado miradas, pero rápidamente desvíe la mía. Suspiré por lo bajo.
¿Por qué siento la cara arder?¿Por qué mierda siento que mi corazón late tanto?
—tsk, esto es toda tu culpa, Cara de Ángel... ¿Qué mierda me hiciste?-— susurre escondiendo mí cara en mis brazos.

Al terminar las clases me fuí junto a Kirishima y los demás al comedor, estaba muerto de hambre.

—Mierda, ya vengo— me había olvidado mí móvil en el salón.

Cuando entre al salón, me choqué con algo.
—Maldita sea, mira por donde vas—mí mirada se concentró en el pelo castaño y en unos color chocolate con lágrimas —¿Cara Redonda?—

—¡Pe-perdón Bakugou!— me esquivó con la intención de irse, pero le agarre de la muñeca y la metí en el salón cerrando las puertas. —¿Qué haces?—

—Dime que te pasa— Vaya, una oración mía sin ningún insulto.

—Yo... No es nada— su mirada observaba el piso, podía notar que su voz se entre cortaba.

—Tú no eres de las que lloran por nada— en serio ¿Por qué me comportó así con ella?.

Uraraka me miró con cara de confusión, también se hacía la misma pregunta ¿Por qué la intento ayudar?

—Mi-mira Cara Redonda, no es que me interese, pero—

¿Pero qué?...¿Por qué tartamudeo?

Mierda, como me voy a lamentar por esto luego.

Sentí el pequeño grito que emitió Uraraka al sentir mis brazos rodeándola por la espalda, aprisionando su cabeza en mi pecho. La sorprendí, igual que a mí.

—No me gusta que llores— ¿Por qué mí corazón actúa así? Joder, esto no me gusta.

Apoye mí cabeza en el pelo de Uraraka, me embriagó el olor a miel que tenía su pelo. Casi me sobresalto cuando sentí que ella correspondía el abrazo, sus pequeñas manos se cerraron apretando mí remera y acercándose más a mí. Mí cara me arde. Sentí como sus lágrimas corrían por mí remera. Y la abracé más fuerte. Espero que no escuche como late mí corazón. Espero que no levanté la mirada y vea que estoy sonrojado hasta las orejas. Solo espero... Qué lo que sienta no sea amor.