Capítulo Único

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Cuando se dio cuenta de la fecha que marcaba su celular, lo único que atino a hacer, fue suspirar.

San Valentín, ¿Eh? Tan pronto. No era una de sus fechas favoritas, quizás por el hecho de que todo a su alrededor se volvía rosa; los tontos enamorados se encontraban en cada esquina. No había un lugar libre de ellos.

Enji Todoroki no era conocido por ser una persona amorosa, por lo que este tipo de fechas no le iban muy bien.

Aún así, sin ser una persona que le encante demostrar cariño, bien tenía planes ese día. ¡Sí!

No solía tomarse el día, pero ese día fue una excepción; se preparó. Tomando primeramente una ducha, cepillando sus dientes y buscando el atuendo adecuado, no había prisa, tenía hasta la tarde para salir de su casa pero bien prefería irse antes a estar encerrado ahí. Buscó uno de sus trajes negros, colocándose el pantalón, calcetines, camisa, zapatos y echando el saco sobre uno de sus hombros. Pensó muy bien si ponerse corbata, al fin de cuentas lo hizo.

Salió de su habitación, caminando por la casa como todas las mañanas; justo antes de salir pasó por la cocina, topándose con Fuyumi que parecía recién levantada y a punto de preparar el desayuno.

Natsuo también estaba presente, y se veía bastante confundido por la apariencia que tenía su padre ese día.

—¿Ah? ¿Qué haces vestido así?

—Saldré todo el día —aclaró—. Quizás vuelva en la noche, o mañana. Aún no lo sé —estaba de paso en la cocina, siguió con su camino, mostrándose tan estoico como siempre.

Como si nada salió de ahí.

Ambos hermanos intercambiaron miradas, totalmente confundidos por eso. No era normal, su padre no avisaba si volvería o no, solamente se iba y regresaba cuando le daba gana. Era sospechoso, sobretodo porque ambos sabían perfectamente la fecha.

—¿Crees que tendrá una cita? —preguntó Fuyumi.

—¿Con quién?

—Pues… aún le manda flores a mamá.

No sabían que decir, la curiosidad los mataba pero no querían preguntar, ni siquiera indagar respecto a lo que hacía Enji. Era mejor quedarse con la duda.

~

Lo primero que hizo fue parar en una florería; a la que siempre recurría.

El dueño lo conocía, por todo el tiempo que tenía llegando y comprando la misma flor. Era un anciano bastante amistoso, saludó a Enji con una sonrisa e inmediatamente fue por las flores: un precioso ramo. Aunque siempre compraba sólo una flor, ese día especial prefería comprar un ramo entero.

Agradeció por el ramo, sin quitarle más tiempo al anciano, debido a que los clientes le llovían en esos momentos. Salió de ahí, con su primer destino.

Hospital.

[. . .]

Jamás iba personalmente a entregar las flores, siempre las mandaba a la recepción del hospital y ya ellos sabían a la perfección que hacer. Esta vez, las enfermeras lo miraron sorprendidas, susurrando cosas respecto al héroe número uno, y este las ignoraba olímpicamente. Pasaba junto a ellas, llegando con una de las personas encargadas del área de psiquiatría.

La mujer saludo a Enji de forma nerviosa, tomando el ramo rápidamente; inmediatamente iba a irse a dejar aquel obsequio por el día de los enamorados, pero se vio interrumpida por Enji.

—¿Tiene donde anotar? Quiero dejar una nota junto con las flores.

La mujer tardó un poco en reaccionar, asintió repetidas veces, buscando aún nerviosa un bolígrafo y entregando una hoja a Todoroki. Él escribió algo, y aunque la mujer no sabía que decía, estaba segura que no era nada extenso. Quizás una frase. El héroe le dio de vuelta el bolígrafo y la hoja ahora doblada para que no se pudiera ver el contenido.

Adulterio 🔥 EndeavorHawks ; BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora