Ellas mismas.|| Costa Rica X Nicaragua

ʚ🍓ɞ

— ¡Haceme un hijo pues! —
Se escucho de ultimo en la discusión de las naciones hermanadas , la frase fue dicha por Nicaragua, ya muy molesta con todo, había estado escuchando las quejas de la costarricense desde el comienzo del día. Pero esto no acabo ahí, harta de tanto blablabla atrapó a su vecina contra la pared callandola con un intenso beso.

- ¡Ngh! ¡Dejame! ¿¡Q-que haces!? - grito en cuanto pudo, intentando irse de su "prisión". Su rostro se mostraba completamente rojo a causa de la vergüenza y enojo que sentía.

La nicaragüense no dijo nada, su rostro aun se mostraba serio, pareciera aun enojada, pero con un toque aliviado. Cargo a la tica como "princesa" hasta tirarla a la cama sin cuidado. Ahí fue donde respondió su pregunta. — Es que, te veo algo estresada y voy a hacer que tengas un pequeño descanso, y te diviertas a la vez. Quizá así se te quita lo quejona. —Dijo con una sonrisa la cual Costa Rica no pudo distinguir si era de burla o  perversidad. La bicolor abrió las piernas de la centroamericana, poniéndose en medio de ellas, comenzando a subir su camisa dejando el estómago descubierto.

—!Ah, N-nicaragua esto no es divertido! —Dijo mas avergonzada que antes, intentando ocultar su piel mientras se revolcaba como gusano en la cama, pero fue interrumpida por una de las manos de la nicaragüense que en un movimiento rápido y astuto la tomo por las muñecas poniendo sus manos por encima de su cabeza, dejandola incapaz de hacer algo.

— Lo dices porque aun no he comenzado. — Soltó una risa traviesa, dejo unos cuantos besos en sus mejillas y con su otra mano libre comenzó a hacerle cosquillas. — ¡Ríndete ante tu amada Nicaragua! —Rió viendo a la chica debajo suyo reaccionar ante sus despiadados toques.

—¡Jahahjah! Y-yo no t-tengo ¡Jaja! Cosquillas! Dé...jame! — Dijo comenzando a reír como si no hubiera un mañana, haciendo cualquier tipo de movimiento, como arquear su espalda para liberarse de las manos de la nicaragüense.

— ¡Entonces por que te ríes! — La risa de la chica se contagio a la otra, soltando carcajadas junto a ella.

— ¡N-no sé! Idiota! —Contestó entre risas y carcajadas mientras sus ojos se humedecían por tantas carcajadas. Giro sobre si misma bruscamente consiguiendo soltarse de ella, pero en ese mismo segundo la nicaragüense la abrazo de la cintura dejandola sin escape.

—¿Donde ibas? Tonta. — Dijo cariñosamente y se abrazaba mas fuerte de ella. En un momento, la soltó pero rápidamente comenzó a hacerle cosquillas con sus dos manos mientras se ponía encima de esta con una gran sonrisa.

-—¡JAJAJAJSHSJHAJAJA! ¡A-a-aire! — Rogó, comenzando a respirar rápido por el cansancio, pero aun así la Nica siguió sin piedad. — JAJAHAHA ¡N-NIca- JAJSHA ragua! m-miershhhaa!

-—¡jajaja! Ni lo pienses! Te soltaré hasta que admitas que me amas! — Necia, no cedía ni se apenaba por su víctima.

—S-si! JAJAJA ¡T-te amo! Pero solt- ¡JAJAHAJAH! —

— Hmm..¿Cuanto me amas? — Preguntó "inocentemente" aun con las cosquillas.

—¡jue-puta! JAJAJAJAASJ  ¡Te amo m-muchísimo! — Sus ojos se veían criatalizados por la risa.

— ¡Awww! Esta bien, esta bien. — Dejó a la otra en paz, quitándose de encima de ella, soltando una risitas.

La costarricense dio sus ultimas risas para tomar aire, algo desesperada. Cuando se sintió menos agitada, miró con el ceño fruncido a la nicaragüense, acercándose a ella, tomandola de sus cachetes para besarla. — Sádica. — Susurró para volver a unir sus labios en un tranquilo beso.
Nicaragua sonrió abrazando de las caderas a la contraria y correspondió el beso, el cual se sintió tan especial, calmado y reconfortante, que hasta sintió un calor agradable llenar la habitación, cerrando sus ojos para poder disfrutarlo mejor.
Abrió sus ojos al notar que la tica había roto el beso, miro con extrañés a la chica, inclinando un poco su cabeza en forma de confusión.

Costa Rica puso una mano en la mejilla de Nicaragua frotando apenas. —Te amo. — Salió de sus labios en un susurro que solo las dos pudieran escuchar, porque ese momento era de ellas y de nadie mas. Sonrió calmadamente a la nica.

—Yo también te amo. -—Respondió abrazando a su pareja cayendo las dos suavemente en la cama mientras se abrazaban.

Toda la tarde se la pasaron dandose mimitos, abrazos y besos. Olvidando por horas los problemas que las rodeaban, siendo ellas mismas, amandose una a la otra.

Que lindo.

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Editado del original que escribí en 2020.
Urgencias de media noche JJAJ