PRÓLOGO

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Notaba cómo unos dedos frios me acariciaba el pelo. Me encantaba que me tocaran el cabello, pero esos dedos... esos dedos me daban mala espina. Eran familiares y a la vez desconocidos.
Quería que parara pero yo no podía  moverme. No me podía levantar , no podía siquiera abrir los ojos y observar la persona que me daba esas caricias.
Escuchaba como suavemente susurraba en mi oido 'Ssshh ', para que estuviera tranquila. Pero era imposible que estuviera tranquila.
Y de repente, me desperté.

Hazme Una Señal { SIN EDITAR}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora