Mis Cuentos para Crecer

Parte 4 - Cuento Juanita y El Girasol

"La infancia es el tiempo en el que la vida se dibuja de múltiple colores y las cosas difíciles tienen matiz de sencillez"

El Autor

Juanita era una niña muy linda que feliz en el campo con su abuelita vivía, porque de muy pequeñita al cielo sus padres se habían marchado. Juanita podía muy libre correr por el campo, ya que además de su linda abuelita, también una tortuguita que era su mascotica a la que cariñosamente llamaba la pequeña cascarita. Cascarita, no solo era su mascota, era su mejor compañía, ya que había estado con ella desde muy temprana edad. Un día salió muy temprano con su mascota a pasear por el campo que rebosaba de una agradable paz, había animalitos, flores y pajaritos que al volar con sus trinos deleitaban a quien los quisiera escuchar.

Pero en el corazón de Juanita un sentir ella tenía, era cierta tristeza que de vez en vez la invadía, le hacía mucha falta sus padres, aunque su abuelita mucho la amaba. Su única y gran amiga era la pequeña Cascarita, que por ser una tortuguita solo escucharla podía. Así transcurría la vida de la pequeña Juanita

Un día durante un lindo paseo, en el monte se tropieza con una flor muy hermosa, que cautivo su atención, era un hermoso Girasol que de sus pétalos amarillos destellos de radiante luz desprendía, desde ese momento al salir por el campo de paseo Juanita no podía evitar por donde aquella flor estaba rondar, Juanita gustosa siempre aquella flor visitaba, para hablarle y contarle de sus cosas, como si aquella flor fuese alguien que la escuchaba cuidadosa.