Comenzó la temporada de Invierno en la Prefectura de Miyagi. La nieve caía lentamente desde el cielo hasta las calles dejándola totalmente blanca; habían algunos niños y niñas jugando en ésta, sus padres los vigilaban por si acaso; otros pasaban ese día en sus cálidos hogares. Sin embargo, un chico rubio con sus anteojos en esa vieja biblioteca. Él revisaba sin interés algunos aquellos libros de la sección de historia, pero encontró un libro de los fósiles y la pre historia. Lo tomó sin dudar y se sentó en una de las grandes mesas que estaban en aquel lugar.
Leía y leía, tal vez memorizaba algunos datos interesantes y a veces se saltaban las hojas, extrañamente ese día era muy normal. Su rutina era la misma, levantarse con la música Rock And Roll que su padre ponía en las mañanas en esa radio; aunque era normal en el 1963 éste tipo de música, prefería la clásica. Desayunar con su familia conversando de cosas banales, pero como siempre casi nunca compartía unos diálogos. Algunas veces ponía música clásica cuando sus padres se iban al mercado a comprar algunas cosas y luego cuando volvían, él se ponía su abrigo y salía a la biblioteca. Cada día era lo mismo, conocía hasta a la bibliotecaria, una chica de cabello azabache muy simpática y su nueva ayudante que era bajita y de cabello rubio.
Al leer algunas páginas de ese libro grande, le empezaron a doler los ojos por enfocar algunas palabras más pequeñas. Así lo alejó se recargó en la silla, no supo que hora era hasta que vió por la ventana. Estaba oscureciendo y seguía nevando. Frunció el ceño y decidió mirar lo había a su alrededor para luego irse.
Observó a un par de personas caminando con muchos libros en sus manos desde la sección de naturaleza, ese deben ser unos científicos tratando de saber el por qué neva tanto. Luego a la ayudante que hacía su trabajo al poner unos cuantos libros en la sección de literatura. Y después se dió cuenta que un chico de cabello... ¿Verde? ¿Muy oscuro? Estaba al otro lado de la mesa a unos cuantos centímentros suyos. Leyó la portada del libro que leía: "Las estrellas lo dicen".
》Patético...《 Pensó, cree que es un libro para niños con cuentos de hadas.
Entonces el chico deja el libro sobre la mesa y lo cierra, suspira y sonríe. Al verlo de esa manera tan detenidamente, descubre que en su rostro hay pequeñas manchas que lo cubren, su cabello es un verde muy oscuro, una tez bronceada y una sonrisa muy hermosa... Esperen, ¿qué acaba de pensar?. Se quitó sus pensamientos miró hacía otro lado, él no lo sentía pero sus mejillas estaban con un ligero color rosado.
Nota que la presencia del chico se aleja hacía el mesón con la chica azabache. Observa que ambos sonríen y se despiden con ésta. Él tenía puesto un abrigo color marrón claro y una bufanda del color de su cabello con pequeñas líneas color rojo.
Se le quedó unos minutos más mirándolo hasta la salida, no sabía por qué. Pero quería seguirlo.
Tomó su abrigo y salió rápidamente del lugar. Salió tan de repente que hasta se le olvidó dejar el libro en su lugar, algo muy raro en él.
Corrió hasta la salida para ver a través de la nieve que caía, habían muchas personas caminando de aquí para allá. ¿Desde cuando había tanta gente? Frunció el ceño y soltó un bufido de frustación. No sabía lo que hacía hasta que hizo aquello, ahora venían las preguntas.
¿Por qué lo habrá seguido? ¿Qué fue ese latido tan fuerte en su pecho? ¿Lo encontrará otra vez? ¿Tenía que visitar a un doctor?
Fue hasta casa caminando por la calles llenas de gente por el horario de salida de sus trabajos, menos mal que es sólo un estudiante de secundaria. El frío se hacía presente con el pasar de los minutos, su nariz ya estaba roja y pronto sus mejillas lo estarían. Pero cuando llegará a casa sería mucho mejor.
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𝘚𝘰𝘶𝘭𝘮𝘢𝘵𝘦𝘴 [𝘖𝘕𝘌 𝘚𝘏𝘖𝘛 || 𝘛𝘚𝘜𝘒𝘒𝘐𝘠𝘈𝘔𝘈]
FanfictionA veces las estrellas unen dos almas; éstas se encontrarán y se amarán. Los unirá por siempre, incluso en su otra vida. Y el ciclo se repite una y otra vez. TsukkiYama AU Soulmates