SACRIFICIO, ESFUERZO, METAS; en esas tres palabras se resumen los primeros años de vida de una persona, para lograr sobrevivir en ese escenario brutal llamado "Vida" en el cual, día a día se lucha por resaltar por encima de los demás. Esa lucha co...
"No importa el sacrificio o las cosas que tengas que hacer, lo más importante es sobresalir"
Esas palabras han estado presentes en la mente de Kamila desde que era una pequeña niña, fueron repetidas constantemente por su madre, que durante toda su niñez y adolescencia rigieron su vida convirtiéndose en su lema, y aún así, después de 20 años siguen plasmadas en su memoria.
Debido a esa egoísta forma de pensar, le fue imposible relacionarse con las personas que la rodeaban, y siendo sinceros durante muchos años, eso le importó muy poco, pues nunca dudó al momento de pisotear o engañar a los demás por conseguir lo que ella quería.
Pero no se confundan, Kamila ciertamente fue una chica manipuladora y ambiciosa, sin embargo, en cuanto a su vida escolar se refería, nunca uso ningún truco para sobresalir; sus excelentes notas, perfecta conducta y premios, los obtuvo con su esfuerzo, fue durante sus años de escuela una verdad absoluta entre sus profesores que ella tendría un futuro brillante y por su puesto que ella sabía que eso era cierto, a diferencia de los demás "inteligentes" y "mataditos" de la escuela, que se imaginaban teniendo sus negocios y siendo millonarios, (pobres ingenuos la mayoria de ellos terminaría trabajando Mac Donald's) a lo que ella la motivaba para lograr ese "futuro brillante" era abandonar esa porquería de vida que le había proporcionado su madre.
Dado ese motivo, no vaciló en aceptar, cuando al terminar la Universidad, le ofrecieron un puesto de "asistente del gerente" en una compañía Canadiense. Era un nuevo comienzo para ella, se alejaría de su madre, se olvidaría de su ridículo lema y empezaría a relacionarse con los demás sin pretender ser mejor que ellos.
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Narrador: Protagonista.
08-Junio-2024
Los rayos del sol se filtraban por la ventana iluminando la pequeña habitación y a la persona que dormía sobre la cama.
- Mierda, ya amaneció - exclame mientras abría los ojos lentamente, aún tenía mucho sueño; había llegado a mi apartamento en la madrugada y no me dormí hasta después de enviar un documento que necesitaría el jefe en la junta de hoy con los nuevos inversionistas. Al recordar la junta, inmediatamente volteé a ver el reloj, las 8:00 am y la junta ES a las 9:00 am.
- Demonios, ya se me hizo tarde, tengo que apurarme o el jefe me va a matar - Me levanté lo más rápido que pude de la cama y me dirigí al baño, regularmente tardó media hora en la regadera, pues me gusta quedar bien limpia pero ahora no tenía tiempo, o me daba un baño de pájaro o me convertiría en la siguiente persona que pide limosnas en las esquinas.
- Espero que al jefe Kim se le atraviese un gato, los ama tanto, que no se resistiría a perder unos 15 minutos de su valioso tiempo, para solo abrazarlo y hacerle cariñitos - Murmuré mientras espera el taxi que me llevaría a "Hwan- Yong" el gran complejo empresarial del que mi jefe era el gerente general. Mi jefe el gran lm Kim- Jung es del tipo de persona "Seria" tanto en su trabajo como en su vida personal, la primera vez que lo ví, me sentí intimidada, toda su persona se podía resumir en una sola palabra; "PERFECCIÓN", el hombre era Guapo, Inteligente, Soltero y Exitoso, solo con un pequeño problema; es un maniático del trabajo, sobre todo en la madrugada, y un tirano manipulador (Claro yo también fui una persona manipuladora, pero es muy diferente cuando tu eres el manipulado), ahora después de 6 meses de conocerlo y trabajar 24/7 con él, sabía que se volvía una "florecita" cuando le ponían un gato en frente.
A parte de todas sus bastas cualidades de hombre perfecto "Aja claro como no", lo que que me llevó a aceptar el puesto y ser su secretaría, digo asistente, fue su apellido, el que me hacía recordar mis tiempos de adolescente cuando a los únicos chicos que les presté atención y no los "Friendzone", fueron a los de un grupo de Kpop, fue un milagro que yo le diera importancia a algo, en esos momentos en que solo estaba enfocada en pisotear a los demás. MONSTA X ese era el nombre del grupo, mi interés y gusto por su trabajo fue lo más parecido que he experimentado al amor a lo largo de mi vida, y juntamente el apellido de uno de sus integrantes, es igual al de mi jefe, que coincidencias de la vida.
Iba tan enfrascada en mis recuerdos de amor adolescente por 7 hombres asiáticos que no me di cuenta que faltaban 5 minutos para las nueve y yo aún seguía parada en la entrada del edificio de convenciones.
- No es momento para pensar en hombres, Kamila - Me reprendí a mi misma, - Tengo que subir 12 pisos en 4 minutos o estoy muerta - Rápidamente me dirigí al elevador y apreté los botones correspondientes, iba tan nerviosa por la junta, por el tiempo y por el inminente regaño del Jefe Kim que no me di cuenta que había apretando mal el número de piso, llegando al último piso del edificio.
- No puede ser!! - Exclame frustrada, podría bajar en el mismo elevador, pero se tardaría 2 minutos en volver a funcionar, - ya no hay tiempo, esto necesita medidas desesperadas - rápidamente me quite las zapatillas y arranque a correr por las escaleras para llegar al piso 12, llegue exactamente a las 9 am., un poco sudada y respirando agitadamente, pero la mejor parte es que la junta aún no había empezado, me puse las zapatillas y me acerque a la puerta de la sala de conferencias, me quede parada en frente de la puerta en lo que mi respiración se tranquilizaba y me arreglaba el peinado, estaba tan concentrada en la tarea que no sentí la presencia de la persona que se posaba detrás de mí, hasta el momento en que me hablo, una voz profunda y gruesa, llena de frialdad llegó a mi.
- Las puertas están hechas para que la gente entre y salga, si no piensas hacer ninguna de las dos, quítate y deja de estorbar -
Di un respingo, dejando de un lado el susto, esa voz se me hizo conocida a pesar, de no haber volteado a ver al sujeto en cuestión, no me moví mientras trataba de recordar en donde había escuchado esa voz.
- Estas sorda o que, he dicho que te muevas estorbo - la voz interrumpió mis pensamientos y esta vez sus palabras me hicieron enojar, nadie me había llamado estorbo nunca en mi vida y no dejaría que ese sujeto se convirtiera en el primero.
Me di la vuelta con la intención de encararlo - ¿Quien dem... - Mis palabras se me atoraron en la garganta y mis pies retrocedieron automáticamente al ver a la persona a la que segundos antes tenía ganas de decirle las palabras mas selectas de mi vocabulario, no podía creer lo que mis ojos estaban viendo, uno de los hombres que me había hecho conocer el sentimiento del amor años atrás, estaba parado en frente de mí, diciéndome "estorbo", algo se rompió dentro de mí. Mi voz salió quebrada cuando sin pensarlo murmuré:
- I.M? -
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Continuará.. 🍁
Hola lindos lectores, por fin pude publicar el primer capítulo, llevo escribiendo esta historia hace como 1 mes, y aunque ya tengo varios capítulos, los leo y les cambió cosas jaja dios que indecisa, espero que le den una oportunidad pues aunque no se enfoca en los shipps de Monsta X, está historia tendrá sus propios triángulos amorosos. Acepto cualquier crítica constructiva que puedan hacerme.
