Castígame~yoonmin~ (OneShot) [EDITADO]

one

Era la última clase del día. Jimin se encontraba en su asiento habitual al lado de su mejor amigo taehyng. Jimin miraba fijamente al profesor y no presisamente porque le interesaba la clase. Historia del arte no era precisamente su asignatura favorita. Todo lo contrario, la odiaba.

La mirada del pelirrojo estaba concentrada en la camisa cuello de v que portaba su profesor que dejaba ver su clavícula. Jimin pensaba lo bonito que se verían unos chupones hechos por el en la pálida piel del profesor Min.

Hace un mes la habitual profesora se fue de licencia de maternidad siendo sustituida por Min Yoongi. Desde el primer día logró captar la atención de jimin. Y no era para menos. Yoongi reunía todas las cualidades físicas que cualquiera desearía en un hombre. A pesar de no ser muy alto tiene una buena constitución física y un rostro endemoniadamente hermoso. Esto unido a su carácter serio y autoritario hacia que el pálido anduviera constantemente por la cabeza del menor.

-alumno Park, alumno Park-

Taehyng le dió un sape a jimin para que reaccionara. Este salió de sus pensamientos frotándose el lugar golpeado. Toda la clase rió.

-si profesor-

-Park podría repetirle a sus compañeros lo que acabo de explicar- dijo el profesor cruzándose de brazos

-yy...ooo-

-Park Jimin, no estaba atendiendo a mi clase y sabe las consecuencias que tiene esto. Después de clases se quedará a modo de castigo- sentenció volviendo a su clase.

Jimin no protesto y solo asintió. La verdad es que el castigo no le molestaba para nada. Al fin lograría quedarse a solas con Min Yoongi.

Las horas pasaron mientras que Jimin no  podía atender a clases, solo pensaba en el  momento que se quedaría en esa misma habitación con el pálido, solo ellos dos. Miles de fantasías rondaron por su mente. El mayor besándolo, tocando cada parte de suministro cuerpo y follandolo en cada esquina del salón como poseídos. Él solo pensarlo hizo que la sonrisa se mantuviera en su rostro el resto del día.

El timbre sonó y las clases concluyeron. Tae se despidió de jimin y salió del aula con el resto dejando en la habitación solo al pelirrojo y al rubio.

-Bien alumno Park. No es la primera vez que no presta atención a mi clases y sus notas son bastante bajas....-

Jimin dejo de escuchar lo que le decía su profesor y se concentró en mirar sus labios. Inconscientemente mordió su labio inferior. Es que como concentrarse cuando tú profesor es un puto dios griego más caliente que el sol de verano.

- ¿Park me estás escuchando?-su tono sonó algo irritado- ¿se puede saber en qué piensas?-

Jimin dió un respingo ante  la voz del mayir que no sonaba muy contenta. Sonrió y alzó la mirada viendolo a los ojos, esos ojos gatunos que esconden las oscuras orbes negras que te invitaban a perderte en ellas.

-¿quiere la verdad, o la excusa profesor?- Dijo algo pícaro y sonrió ladinamente. Su voz salió baja como un susurro.

-no entiendo- la voz de yoongi era igual de baja y mostraba confusión en ella. Mentira. Si estaba entendiendo a donde quería llegar al menor pero no sé Hiba a permitir provocar por un niño.

-Profesor- jimin se levanto de su asiento con sutileza. Se acercó a yoongi meneando su exuberante trasero, se acercó a yoongi como León acechando a su presa y coloco su boca cerca de su oído- pensaba en sus labios y lo bonitos que se verían rodeando mi polla-

Jimin lambio el lóbulo de la oreja de su profesor provocando pequeñas descargas eléctricas en este que apretó las manos al sentir su cuerpo tensaron.  Rápidamente apartó a jimin de él. Su cara era un poema. Jimin solo pido reír al ver a yoongi tan descolocado y sin poder responder.