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Prólogo

Jung HoSeok y sus amigos siempre se meten en líos, el día en que el padre de su mejor amigo se compró un pequeño, pero alucinante, barco deciden hacer alguna travesura y pasar un buen rato algo alejados de la costa. No contaban con que la marea estuviese demasiado irregular y cayeron del barco, por fortuna una tripulación que andaba por la zona los recojen, pero al estar mucho tiempo inconscientes el capitán de aquella goleta decidió marcharse con ellos rumbo a América.

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Se lo pasaban bien, reían. YoonGi descuidó el barco y una gran ola los tumbó cayendo al frío mar, pero, un bote de pesca pasaba por la zona, dos hombres dentro de el hablaban mientras esperaban a que algún pez cojiera el anzuelo, cuando el más bajo de los dos pescadores notó como algo tiraba de su caña, rápidamente tiró de ella hasta que del agua solo salió un trozo de tela, al mirar hacia abajo en el agua se encontraron tres chicos flotando agarrados a un trozo de madera, solo unos metros más lejos se pudieron ver un barquito hundiéndose poco a poco.

Recogieron a los chicos y los llevaron a la goleta donde les esperaba el capitán y su joven hijo, el cual no dudó en ayudar a los demás tripulantes a subir a los chicos al barco.

Kim TaeHyung siempre bueno y humilde a pesar de ser el futuro capitán de aquella goleta, ayudaba a los demás en lo que pudiera y amaba tanto a los animales que de pequeño hizo una pequeña tumba en su jardín donde según el yacían todos los pececitos que su papá pescaba.

Entre los tres pescadores desnudaron a los jóvenes y los dejaron descansar en los catres, mientras TaeHyung se quedaba a vigilarlos.

Uno era pálido, parecía que nunca había rozado la luz del sol, sus labios eran suaves y finos. Nada que ver con TaeHyung el cual era moreno y tenía unos labios maltratados por morderlos y lamerlos todo el tiempo

El que estaba a su lado parecía mucho más grande que el anterior, bastante musculoso, pero con cara de niño. Dormía con la boca algo abierta, parecía un angelito. Este era algo más similar a él ya que estaba algo bronceado y parecía trabajar su cuerpo.

El tercero era más pequeño que el bebé musculoso pero sin llegar a verse tan débil, a pesar de tener brazos finos y estar bastante delgado, su rostro era algo curioso, su nariz fina y adorable y sus labios en forma de corazón eran de un rosa palido, pero sus ojos cerrados eran los que más le atraían, estaba seguro de que se verian preciosos si estuvieran abiertos.

Un ruido le sorprendió, el chico con cara de niño se había sentado mirandolo condundido, ahora que lo veía bien no tenía un rostro tan infantil, sus rasgos eran más duros que los de la mayoría de sus compañeros, sin embargo tenía un aura de niño como si fuese más joven de lo que aparentaba.

—¿Quién eres?—susurró el "niño".

—Soy Kim TaeHyung, mis compañeros os encontraron a ti y a tus amigos flotando en un trozo de madera.—Sonrió.

—¡Oh, gracias, gracias!—dijo, una y otra vez. Finalmente miró a sus amigos preocupado.—¿Crees que despierten...?