El Blog De Susita La Pubis

El Mal De Maleta

Traté de googlear a San Itario pero es literalmente imposible, solo me aparecen imágenes de retretes y baños
¿A caso en ese pueblo hacen productos de cerámica?

Espero que sea un lugar bonito y digno de esta reina

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Todos quedamos en vernos en casa de Doña Telas porque su madre nos iba a llevar a la Central Express Camiones y Asociados, así que nos mandó la ubicación y tuve que agarrar un Uber (El cuál se llamaba Martín) y me preguntó si Susita la Pubis era mi nombre de pila, a lo que yo le respondí: "Es una historia de humor absurdo tipo blog"

Llego al enorme cancel que me señalaron

¡En la madre! yo nunca me imaginé que esta cerota viviera en una pinche mansión, es decir, es la típica chica popular, atractiva, poderosa y malvada, pero osea cualquiera puede ser villano sin tener mucha plata. Eso me parece un poco clasista por parte del autor

Su casa tal vez sea muy vomita, que diga, muy bonita, pero en serio, ¿Era necesario poner angelitos con la pilinga por fuera? ¿Un pasillo hasta la entrada de mármol rosa, pilares con diamantes de suarosqui y una fuente de oro fundido?

Supongo que su padre trafica mazapánes

En la entrada con cancel, hay un timbre y una cámara

Toco el timbre, esperando que me abran y una voz femenina sale de éste

- Muy buenas tardes, ¿Su nombre por favor?

- ¡Ah chingue a su madre! ¿Desde cuando los timbres hablan? Me llamo Susita, Susita la Pubis

- Em... por favor presione el timbre para contestar

Jamás había hablado con un timbre, creí que estas cosas solo pasaban en Alicia en el país de las marihuanas. Vuelvo a precionar pero no pasa nada, así que lo presiono varias veces hasta que escucho la misma voz entrecortada

- ...nche ...up...da ...dej... precio... b...ton

Dejo de precionar el botón y escucho a la voz decir

- ¡Debes mantener el botón presionado y hablar al mismo tiempo!

- Perdón -digo sin precionar, así que preciono el botón y vuelvo a decir - ¡Perdón! ¡Mi nombre es Susita la Pubis! ¡Vengo a ver a Donatella!

- No es necesario gritar... Pase por favor

- ¡Gracias!

Se habré el enorme cancel y me adentro al cantón.
Me siento bien rara caminando por el adoquin de mármol, esto no se parece nada a las calles de mi barrio

Me pregunto si la señora de la casa tiene un tigre de mascota

Apuesto a que tiene un piano en la sala y un par de escaleras que conducen al mismo lugar

Ya puedo oler la mescla de Vino tinto y Prozac

¡Dios!, sólo espero que no tenga otro de esos timbres satánicos en la puerta principal

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-Susita ¡Bienvenida! Eres compañera de Donatella ¿cierto? - Dice dulcemente una Doña cuarentona, pero bien fina

-Sí

-Yo soy su madre, casi estamos por irnos, los muchachos te están esperando arriba, pasa por favor

-¡Gracias!.. ¡Qué bonita está su casa señora!

La casa está adornada con todo tipo de chucherías, pero unas chucherías finísimas
Hay cuadros de gente encuerada pero no veo ningún piano, sólo más estatuas, también sin ropa, y un gran arreglo de flores

La doña ríe un poco, cómo si yo hubiera dicho alguna pendejada
- ¡Lo es! Era de mi tercer marido -dice mirando hacia una imagen donde se aprecia a ella con su... ¿su papá? Pues si es su esposo, está muy viejo -Mi querido Bob Dégoûtant Riche

- Lo siento mucho, se ve que lo amaba

- ¡Cuantiosamente querida! Lo único que me queda de él... Son unos millones

Me quedo un poco shockqueada por su respuesta

- ¡Valla! lo siento por usted, debe ser muy duro perder a alguien tan importante para usted... Que bueno que mi mamá no se casó con un anciano, aunque igual casi no veo a mi padre él suele trabajar muy duro...

- No interesa -interrumpe Doña Telas, aprieto las nalgas indignada - Te estamos esperando Susita

- Cariño no seas grosera -Dice su madre

- Pues es que llega retrasada y encima de eso se pone a conversar contigo mamá, ¡y tenemos que irnos ya!

- Puedes dejar tu maleta en el perchero, linda

- Gracias, es muy amable, no cómo la cerota de su hija

- ¡Hosh! Lo sé, es igual que su padre

- ¡Cállense las dos! - grita Doña Telas

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En mi marginal existencia había visto una central de autobuses tan grande y hermosa como ésta

Tiene centro de atención a clientes, cafetería, una tiendita y baños

La madre de Donatella nos trajo y ya se había ido

- ¿A que hora dices que sale el camión? -pregunta Rodolfo

- A las 8:15 -responde Donatella -Así que estén listos

Rodolfo llevaba una maleta de Star versus las fuerzas del mal, jeje pero que ridicu...

- ¡Mi maleta! -no podía estarme pasando esto - ¡Mi maleta se me olvidó en tu casa! -me dirijo a Donatella -¿Que horas son?

- Ya no hay tiempo, eso debiste haberlo notado en casa

- No mames ¿Que vas a hacer? -cuestiona Sarahí

- ¡Pendejas como no nos dimos cuenta! -le digo

- ¡Pues nos sacaron a las carreras!

- Falta menos de media hora para que parta nuestro autobús - informa la estúpida y culpable de todo esto -así que ya no hay nada que podamos hacer

- ¿Estas segura de que no la dejaste en el auto? - pregunta Paco

- No, no, es que no la traía, estaba tan distraída que... ¡Hay que pendeja!

- Descuida tal ves ni la necesites - dice Rodolfo

- ¿Qué y qué cosas llevabas allí? - pregunta Paco

- ¡Pues todo! - empezaba a sentir rabia y ganas de llorar, como esas veces que hacen un acto tan pequeño y dispara tanto pinche desastre - Mi maquillaje, dinero, el celular, dejé todo por que en estos pinches pantalones enjarrados no me puedo guardar nada ¡hay no! Quisiera regresar en el tiempo para agarrar mi pinche maleta ¿qué voy a hacer ahora?

- Susita ¡nada! el ánimo - dice Paco con fuerza

¡Maldita sea! ¿Porque todo me sale mal a mí?

¡Dios mío no sé qué voy a hacer sin mi maleta!