Una aventura nueva comienza para la miko que a viajado por el tiempo. Ahora tendrá que cuidar por un favor de su mejor amigo de hace 500 años a sus "adorables" Hijos.
• Los personajes de Inuyasha y Diabolik lover no son de mi pertencia.
•Historia...
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Todo lo que necesitaba era tiempo para pensar y analizar los sentimientos que sentía en ese tiempo por él. Aunque dolió reconocer todo aquello que sentía no era más que amor entre amigos o hasta el punto de hermanandad seguía teniendo un punto de ingenuidad en mi persona.
Mis días de viajera en el tiempo terminaron días después de destruir aquella Perla que causó dolor no sólo a mis amigos también a muchas personas con las cuales comunicamos y entablamos una relación entre estos.
Cada uno de mis antiguos compañeros de aventuras comenzaron una nueva vida por delante. Mientras tanto en mi época actual visitaba lo que una vez fue la tumba de Kikyo, no sólo la reconozco como una maestra también como una amiga, me enseño todo lo necesario para ser una sacerdotiza digna de tener el título de la Guardiana o Ex guardiana de la Shikon no Tama.
Mis deseos para mis compañeros siempre serán los mejores entre estos una vida fructífera y llena de amor.
— Tengo que regresar — susurre mirando por última vez aquella simple lápida adornada con recientes flores de color violeta — El atardecer desde este punto es sumamente precioso Kikyo.
En la colina donde descansaba la mitad del alma de ella era sumamente hermoso, una sonrisa adorno mi rostro al sentir la calidez del aire que rodeaba esta parte importante de nuestro templo. Acomode con delicadeza un mechón de mi cabello detrás de mi oreja para escuchar el suave sonido de las flores de campanilla.
Con todo el pesar me levante sacudiendo todo rastro de polvo impregnado en mi nuevo uniforme que lo utilizaba personalizado ante mi propia vista. Mire por última vez el ambiente calmante que brindaba este lugar encojiendome de hombros al visualizar el espíritu de mi maestra que me sonreía con ternura.
— ¿puedes irte con cuidado? El ambiente en donde te ubicaras es completamente diferente a lo que esperaba.
Asenti levemente extendiendo mi mano mostrando una leve esfera que brillaba con poca intensidad. Comprendía a la perfección lo que ella me decía, el Instituto al cual ingresare muy conocido por la existencia de todo tipo de demonios del mankai.
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La noche por fin había caído en la ciudad de Tokio en una lujosa limusina iban 6 vampiros nobles cada uno más callado de lo normal.
— Este nuevo semestre, espero que tengan mejores calificaciones — apartando por unos milisegundos la vista de su libro para centrarla en sus "hermanos"
— teddy dice que tratara de que salgamos bien - mirando a su peluche un chico de cabello violetas con una sonrisa maliciosa.
— Ore-sama no recibe órdenes de nadie, y peor de ti súbdito - dice con su tono orgulloso el menor de entre los trillizos.
