Horizontal o Vertical

HORIZONTAL O VERTICAL

Autora: Clumsykitty

Fandom: Marvel, Tsum Tsum/AA

Parejas: Stony

Derechos: Marvel es el amo.

Advertencias: azúcar, humor romántico, no busquen sensatez.

NOTA: Esta historia pertenece al Special Stony Valentine's Week de WooHo Shin.

Gracias por leerme.

***

Amar es este tímido silencio

cerca de ti, sin que lo sepas,

y recordar tu voz cuando te marchas

y sentir el calor de tu saludo.

Amar es aguardarte

como si fueras parte del ocaso,

ni antes ni después, para que estemos solos

entre los juegos y los cuentos

sobre la tierra seca.

Amar es percibir, cuando te ausentas,

tu perfume en el aire que respiro,

y contemplar la estrella en que te alejas

cuando cierro la puerta de la noche.

Amor, Salvador Novo.

Érase una vez, en una tierra donde las cosas eran horizontales... sí, horizontales porque todos tenían cuerpos horizontales y veían todo de manera horizontal, había un Tsum Tsum de color rojo y dorado que se encontraba melancólico porque se había dado cuenta que estaba celoso y el problema no eran los celos que le carcomían su esponjoso relleno. No, no. El problema era que esos celos eran la consecuencia de algo más, llamado por los expertos como amor. Tsum Ironman estaba perdidamente enamorado de otro Tsum Tsum de color azul con alitas en su cabeza redonda y un escudo en su fuerte espalda. Tsum Cap.

Tsum Ironman sufría en silencio porque Tsum Cap no conocía otro amor que el de proteger el mundo a sus indefensos dentro de él y hacer valer la justicia. Si no estaba peleando en alguna peligrosa misión, estaba limpiando su escudo con una estrella en el centro muy concentrado sin saber de nada ni de nadie. No que eso fuese del todo malo porque esas características fueron las que precisamente llamaron la atención de Tsum Ironman en primer lugar. Pero las cosas nunca habían sido fáciles y además pensaba si acaso alguien como Cap podría fijarse en un Tsum Tsum como él, sin tantos detalles tan geniales como él.

Y no se podía afirmar que Tsum Ironman fuese un cobarde, porque, al contrario, había intentado toda táctica sutil para atraer la atención de Tsum Cap, pero sus intentos resultaron vanos. Aquel idiota patriótico simplemente tenía los ojos en la libertad, el honor y las galletas de jengibre. San Valentín se aproximaba peligrosamente sin que Ironman hubiera conquistado el corazón de Cap mientras que otros tontos muy tontos como Tsum Hulk ya tenía a su lado a Tsum Hawkeye. Pero él no, nada para él y todo indicaba que ese día de los enamorados iba a pasarla de nuevo solo en su taller comiendo una dona con una taza caliente de café.

Adolorido por su desgracia, Ironman voló lejos sin darse cuenta del terreno al que entró. Y es que en este tipo de cuentos nunca falta un algo que hace las cosas interesantes. Tsum Strange estaba practicando su magia ancestral, entrenando en la apertura de portales dimensionales. Uno de esos aros brillantes apareció frente al cabizbajo Tsum que no se percató del percance sino hasta que de pronto chocó con una pared que no debía estar ahí. Ironman cayó rebotando un poco antes de recobrarse y mirar alrededor. Ya no estaba volando sobre un campo verde, estaba en una ciudad. Una ciudad demasiado vertical.