Una vida pasada [ShakaxMu]

9.

── ¡Ya hasta aquí!.-Comencé a toser sintiendo algo extraño, un sabor metálico, odio esto, ¡en verdad lo odio!. Limpie mi boca viendo sangre y luego al horizonte; -Ya no me falta mucho debo seguir.- Aunque, no puedo más, miré aquellas personas que caminaban por aquel pueblito. Era demasiado tranquilo el lugar digno para aquellas personas que quieran una vida tranquila. Me levanté del piso pero me temblaban la piernas. ── Ahh...dudo que haya sido el agua.~ Me apoye de un árbol pero volví a caer, mi cuerpo estaba cediendo.

── ¿Señor se encuentra bien?.— Sono la repentina voz de una niña preocupada.

── No muy bien, pero gracias.— Claro los niños no saben distinguir todavía por eso no se asustó de verme, para ellos no hay realidad, no hay planos ni nada más.

── Señor.~ Jadeo con insistencia, hice el gesto de silencio con la mano y entendió rápido, volví a ponerme a pie escuchando la plática de una señoras un poco lejos de donde estaba, ambas señoras sentadas en sus sillas mesedoras dejando caer sus bordados.

── Seguro era un joven muy guapo. Era algo alto y rubio, pobre chico se veía asustado.~

── Pero ¿cómo se pudo perder su hermanito?.-

── Ya sabes como son los niños, pero me dio lástima, espero y encuentre al pequeño sino lo encontrará muerto.- Dudo que sea él aunque en Japón no suelen haber "rubios y menos por estas fechas". Me aleje de la niña y corrí, o mas bien huí, pensando solamente en aquella persona. ¿Habrá hecho lo que prometió?. No lo creó.

Al salir del pequeño pueblo vi otra maldita carretera. Pero me detuve hasta que vi el carro de alguien ya conocido. Me giré a todos lados confundido ¿cómo llegó más rápido qué yo?. No, no me interesa sólo seguí hacia la carretera.

── Muchas gracias señor.-Esa voz venía de un pequeño restaurante.

── De nada joven.-Se dio media vuelta y se regreso fue lo poco que vi. Luego seguí mi caminó hasta que escuche el motor de un carro. Solte un suspiro decidiendo correr por debajo de la carretera.

"-Por favor piernas, avancen rápido!.-"

── ¡Mu!.—Grito, a lo lejos. ~¡Espera!.-Detuvo el carro y se bajo una persona, completamente diferente a la de ayer, por un momento, una parte de mi pecho se comprimió, me dolió... Por alguna razón yo... Quería que fuera él y otra quería que no pero al final sí. Él corrió hacia mí pero yo no me detuve. —¡Lo siento!.-Su grito me hizo detenerme y unos brazos rodearme completamente. ── Lo siento. Perdón.~

── Que tontería claro que no te perdonó, adiós.~ Intenté seguir avanzando pero sus brazos hacían mucha presión.

── Lo siento por lo dicho. Pero recordé que tú necesitas ayuda más que nadie en este momento, por eso perdona. Lo pensé bien y sí quiero ayudarte, pero si te niegas más no tendré más que hacer.-

── ¿Lo dices en serio?.

── ¡Completamente!.

── Está bien.- Sus manos tomaron las mías pero yo las aparte. Él irritado cerró los ojos y caminó hacia su carro y abrió mi puerta luego la cerro y entró del lado del conductor. ── Ayer al ir camino a casa sentí algo extraño.- Confesó.

── ¿Cómo qué?.-Intenté no sonar muy entrometido, aunque sentía mas curiosidad.

── Sentí un extraño sentimiento de culpa. Y no sólo eso como un sentimiento estúpido me invadió mi mente.-Bufo con una risilla. ── Pero eso... Es un secreto.~

── Que bien.-Dije lo más cortante girando los ojos. Es imposible que sienta algo, posiblemente en la noche fue alguien completamente distinto. Seguro él de anoche pensaba lo mismo.