Ballenita ·JooHyuk·

Ballenita

El pequeño Minhyuk estaba muy feliz, su hermana Dodo le había regalado una ballena de peluche por ser un buen niño.

Cabe mencionar que el animal favorito del menor son las ballenas, por lo cual Dodo al ver ese peluche en una tienda de juguetes no dudó en comprárselo a su pequeño hermano.

Minhyuk abrazaba con todas sus fuerzas aquel peluche azulado mientras su hermana solo se dedicaba a ver los hermosos gestos de su hermanito.

—¡Gracias por el peluche!—Hablo el niño mientras dejaba un delicado beso en la cabecita de la ballena.

—Me alegra que te haya gustado Min, es un regalo para tí, por ser un niño muy bueno.—La mayor sonrió ampliamente mientras Minhyuk hacia lo mismo.

Después de un lago rato en la sala Minhyuk se fue corriendo hacia las escaleras para subir a su habitación y encontrar el lugar perfecto para su nueva adquisición.

Minhyuk tenía apenas siete años y desde muy pequeño le han llamado la atención las ballenas por lo cual su habitación está llena de ellas, peluches, cuadros, sus lapiceros, cuadernos, incluso su lámpara tenía forma de ballena.

Al entrar a su habitación dio pasos lentos mientras miraba detalladamente su cuarto, buscando un lugar vació y lindo donde pueda poner a su peluche y seguir admirandolo por el resto del día. Puso al peluche en su escritorio, en una repisa, en su pequeña mesa de juguetes y ningún lugar lo convencía; suspiro, aún con el peluche entre sus brazos se sentó en su cama y miro el rostro de la ballena.

—¿Ballenita, te gustaría vivir en mi cama?—Tomo el silencio del lugar como un si. Chillo de la alegría y se revolvió en su cama mientras abrazaba a su peluche con más fuerza, y sin darse cuenta había caído dormido con su peluche entre sus bracitos.

Al día siguiente Minhyuk estaba despierto desde muy temprano porque dentro de un rato tenía que ir a la escuela. Normalmente Dodo lo tenía que sacar de la cama a arrastras pero está vez fue diferente, el menor había despertado con mucha energía y estaba emocionado por llevar a su peluche a la escuela y poder mostrárselo a su mejor amigo.

Jooheon siempre llevaba un peluche de abeja con gorrito, y Minhyuk nunca había llevado ninguno de sus peluches por el miedo de perderlos, pero está vez se prometió cuidar muy bien a su querida ballenita.

Con su mochila puesta y su uniforme bien arreglado tomo a su nuevo peluche en brazos como si de un bebé se tratase, Salió de casa junto con su hermana.

—Minhyuk, ¿Estás seguro de llevar al peluche a la escuela?—Pregunto la mayor sin descontinuar sus pasos.

—Sip.—Contesto con voz segura.—Quiero que JooHeon la vea.

—¿Y si se té pierde? Es mejor que no la lleves...

—No se perderá porque estará conmigo, no la voy a dejar en cualquier lugar. Claro que no, estará conmigo todo el día, me acompañará al baño si es necesario.—Miro a su hermana con ojitos de súplica para que Dodo cayera en sus encantos y le permitiera llevar su peluche a la escuela.

—Muy bien, solo no la ensucies.—la mayor se detuvo cuando estuvo enfrente del gran portón de la escuela de Minhyuk.—Pórtate bien, no seas grosero con tu profesora y pon atención.—Se agachó a la altura de su hermanito y lo abrazó.

Minhyuk corrió a toda velocidad mientras miraba para todos lados buscando a su mejor amigo antes de que las clases empezarán. Para su desgracia no pudo encontrar a su amigo a tiempo. Se fue caminando cabizbajo a su salón.

Era lo único que no le gustaba de Jooheon, que el niño de bonitos hoyuelos era mayor que él por dos años, así que no podía compartir salón con su mayor aunque quisiera.