La rosa de South Park

Tyde

Token corría lo mas rápido que podía, le habían llamado del hospital avisándole que su novio ya estaba a punto de tener a su bendición.

Al llegar al hospital pregunto en donde se encontraba su novio, cuando le dijeron volvió a correr para llegar al cuarto.

Después de casi 10 minutos de correr por todo el hospital, porque si, se había perdido el muy pendejo, al fin llego al cuarto donde estaba su familia.

Entro con calma y vio a su hermoso y regordete novio acostado en la camilla, en sus brazos cargaba un pequeño bultito envuelto en una cobija de ositos.

Se acerco hasta ellos y su novio le sonrió.

-Disculpa por llegar tarde.

-Esta bien, ¿Quieres ver al bebé?

Token asintió con emoción, vio como Clyde destapada al pequeño bebé, este rápidamente se sorprendió y gritó.

-¿¡NEGRO!?, ¿¡MI HIJO ES NEGRO!?

-¡TU ERES NEGRO, IDIOTA, BABOSO!.- Grito un Clyde todo histérico

-Perdón amor, me altere, a ver pásame a la bendición.

Token estiró los brazos y Clyde de mala gana le dio al bebé.

-Hola amor mío, ¿Cómo andas?, ya desde chiquito andas valiendo verga ¿verdad?.- Token le sonreía al bebé e imitaba una voz infantil.

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Todos sus amigos se habían reunido para conocer al bebe de Clyde y Token.

Craig se acerco y miro al bebé.

-Se parece al Chapo. – Dijo con su típica voz monótona.

-¿Al Chapo?.- Pregunto con inocencia Butters.

-Al chapopote.

Clyde al escuchar ese insulto racista hacia su bendición, se ofendió y pues como acaba de tener al bebé y pues las hormonas, ya saben, se puso a llorar.

Token al escuchar a su vieja llorar se enojo con su amigo, tomo al negro de su hijo, a la gorda llorona de su mujer y mando a chingar a su madre a todos. 

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