Apenas empezaba Septiembre y ya hacía frío, me puse el pijama y coloqué mi móvil encima de la mesita, cogí la sabana y la estiré hasta que me tapó el cuello, pero por más que lo intentaba no podía lograr dormirme, estaba nerviosa por todo lo de mañana, me dormí muy tarde pero me dormí. Eran las 8:00. La voz de mamá se oía desde mi habitación, 'Paula, el desayuno esta listo' decía. Aparté la sábana a un lado y arrastrando los pies me disponía a entrar en el baño, me lavé la cara y bajé a la cocina.
Le di un beso a mamá. 'Buenos días mamá' le dije. Terminé de desayunar y subí a mi habitación me tiré en la cama y me quedé mirando al techo un rato, no podía creer que me iba. 'Voy a echar de menos a mucha gente' pensaba. Por fin me levanté echando todos esos pensamientos a un lado. Hice la cama y saqué la maleta de abajo. La abrí y metí las últimas cosas. Sonaba el móvil. Era Vic, mi mejor amiga.
Vic: Tia no me creo que te vayas
Yo: Es culpa de mi padre, nunca le ha importado mi opinión
Vic: Te echaré mucho de menos tonta
Yo: Vendré a visitarte, ¿crees que te iba a dejar sola?
Vic: Eres idiota Jajajajaj
Yo: Sisi
Vic: Bueno nos vemos esta tarde te he preparado algo
Yo: No hacía falta, lo sabes
Vic: Si que hace, adiós tonta jajaja
Colgué. 'Ya estoy aquí Paula' se oía desde abajo.