Si estas leyendo esto, seguramente es por dos motivos, uno, te gusta el morbo y quieres saber que me pasó, o mejor dicho que se me pasó por la cabeza para acabar así, y dos, eres el culpable de mi muerte. Sí, parece duro, pero es la cruda realidad. Seguramente negaras los dos motivos, pero sigues aquí leyendo, por lo tanto, confirmas el primero, el segundo, tranquilo, te lo confirmaré a su debido tiempo.
Para situarte en la historia, primero tengo que hablar de mí, parece un poco egocéntrico, lo sé, pero no lo es, todos formamos parte de la historia de otro y para situarte en la mía, que mejor forma que hablando de mí.
Para ubicarnos, comenzaré desde el principio, una vez acabada la enseñanza básica y después de un extraño verano con cambio de domicilio incluido, comencé el instituto, yo sabia que iba a perder muchas de mis amistades con las que llevaba ya muchos años compartiendo clase, pero sinceramente, no me esperaba lo que encontré. El primer día de instituto fue, literalmente, un cara a cara con la realidad y es que, al entrar a clase y mirar uno a uno a mis compañeros, vi que no conocía absolutamente a nadie, así que como puedes imaginar se me cayó el mundo encima, lo que no sabia es cuanto daño me llegaría ha hacer.
Por otro lado, estaba mi personalidad, que no ayudaba, soy, quiero decir era, un chico introvertido, al que le costaba relacionarse, no solía juntarme con gente de mi edad, normalmente prefería gente mayor que yo o incluso adultos, de hecho cuando era un niño no soportaba a los otros niños y ni siquiera jugaba con ellos, recuerdo una vez que la profesora llamó a mi madre para explicarle que prefería jugar solo antes que con los niños de mi clase, era un bicho raro supongo. Así que como veis, no podía estar en un lugar más equivocado. Mi sitio en clase tampoco era el más apropiado, al final del todo con los chicos más complicados, por llamarlos de alguna manera, y es que llegue el último y no quedaba más sitio, así que era normal que pensara que pinto aquí, y la realidad era que nada, no pintaba absolutamente nada, o sí, porque se me daba muy bien dibujar, pero es parte de otro capítulo.
Por otro lado, estaban mis padres, trabajaban de sol a sol, no nos veíamos apenas entre semana, eso me obligaba a comer en el comedor del instituto, cosa que tampoco me gustaba mucho y más adelante entenderéis por qué.
Por lo demás, era un chico como otro, me gustaba leer, jugar a los videojuegos, ver series y estar solo, vaya, lo que viene siendo un friki, vamos.
Y entonces, tu que estas leyendo esto pensarás, normal que acabase como acabó, si era un bicho raro, y yo, si estuviera vivo te contestaría, no, los bichos raros no merecemos sufrir, y sí, merecemos vivir como el resto y ser felices.
En este mi diario he descrito a los diez sospechos@s de mi muerte, que por una u otra razón yo los considero como tal. ¿Entonces, no conozco a quien me mató? Seguramente sí, y tu también lo sabrás cuando acabes de leer mí diario.
Así que ponte cómod@, coge algo de comer, un refresco y prepárate...

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10 Sospechos@s
Ficção AdolescenteUn chico muere a causa del acoso sufrido en el instituto, ¿pero quien es el culpable? Alex nos narra mediante su diario, lo que para él son los sospechosos de su muerte, ¿descubrirás tu entre ellos al culpable?