Draco despertó sin saber donde estaba, se creyó alcoholizado por no hallar a nadie a su lado... Luego notó su desnudez.
-¿Que hice?- Se pregunto mientras rascaba su cabeza...
Se sentó en la cama & se vistió, recordaba poco a poco donde estaba & con quien había estado... La mesa sin recoger respondió su duda, en una servilleta de tela habían marcados unos labios rojos, delgados & bien definidos.
Draco tomo sus cosas & salió de la habitación en busca del hombre anciano de la noche anterior, el señor estaba saliendo de unas cuantas habitaciones después de la de él...
-Buenos días Sr. Malfoy... ¿Disfruto su noche?- Preguntó el hombre, enfatizando la pregunta.
Draco camino rápidamente hacia el señor & lo acorralo en la pared, estaba enojado & no iba a medirse, quería golpearlo, o incluso, usar alguna maldición imperdonable.
-¿Donde esta? ¿Que le hiciste...?- Pregunto Draco, su sangre hervía, empuño su varita & apunto la frente del anciano haciendo presión.
-Yo que sé, encontré un frasco de la Amortentia en su habitación & pensé en utilizarla- Explicaba nervioso el hombre arrinconado sin quitar la vista de la varita.
-¿Tu que sabes de pociones?, asqueroso muggle.... Desmaius- Grito Draco, mientras el hombre volaba por el pasillo & golpeo la puerta de la habitación del fondo.
-¿Tu... Crees... Que Soy... Un muggle?- Apenas dijo decir el anciano resistiendo el dolor del golpe....
-No puedo matarte, no pretendo ir a Azkaban por tus estupideces...- Decía Draco aun enojado... -Esto no se quedará así...-
El chico dio la vuelta & camino hacia la salida... No sabia donde estaba ella, Draco respiro profundamente & partió... Regresaría a la mansión de sus padres & desde ahí intentaría enviar una carta.... Había viajado un par de horas para llegar al sur de Inglaterra... Fue recibido por Narcissa, la mujer de pálido rostro & mirada amorosa, ya que Lucius no estaba en el país...
Sin hablar, entendió a la perfección que su hijo necesitaba estar solo, lo acompaño hasta su habitación & antes de salir acaricio su pelo & susurró:
-Te Quiero-
El chico entró como si su cuerpo se moviera por inercia, estaba muy cansado, pero no dormiría tranquilo sin antes saber que esa carta estaba en manos de la persona debida. Comenzó a escribir cosas que realmente nunca imagino:
<<Supongo que no esperabas esta carta, es mas, ni yo me imaginé alguna vez escribirte una... Seamos sinceros & realistas, te diré que paso ayer... No quiero que pienses lo peor de mi, no quiero desenterrar el pasado... Sé lo lista que eres, & en estos momentos ya debes saber que tomamos una pocion inconsientemente, ese anciano uso esa pocion con otros fines. Yo no quiera inducirte a que estuvieras conmigo, nunca lo hice, esta no fue la primera vez... Quizas no recordemos nada, pero podemos volverlo a vivir...>>
Esa carta iba sin firmar, el pergamino iba enredado & atado con un listón rojo... La lechuza se paró en la ventana & Draco puso el pergamino en el pico del ave & dijo:
-Entrégasela- con los ojos llenos de lágrimas...
La lechuza abrió sus alas & se dispuso a volar como si supiera que aquella carta sin firmar era para Hermione...
