•My Daegu Boy• ||KookTae||

Maricón.

HUBO DOBLE ACTUALIZACIÓN NO SE SALTEN LA QUE ESTA ANTES QUE ESTA.❤️

||JUNGKOOK||

El que mi padre me necesitara para hablar no me gusto del todo, me parecía sumamente extraño; llama, hace medio escándalo por teléfono, e grita y casi me exige ir a la casa a hablar según dice "pacíficamente". ¿Te lo creo? Tuve que decirle a Taehyung que me acompañara, siendo sincero, Tae ha sido el único en ver a mi familia, y el único que quiero a mi lado si algo malo ocurre, por mucho tiempo el chico ha sido mi hogar, mi reconfortante hogar, donde puedo estar con tranquilidad, en cualquier lugar puedo sentirme como en casa si estoy con el. Muchos no lo entienden, no han pasado las cosas con nosotros, no están en nuestros lugares, jamás sabrán los sentimientos encontrados, jamás podrán saberlo a exactitud, solo nosotros dos; siempre hemos sido solo dos.

Al llegar a casa, toque el timbre dos veces y vi a mi madre y solo dire; se ve cansada. Devastada, las ojeras que tiene son muy notorias, algo esta mal. Ella siempre ha sido muy alegre a contrario de mi padre que hasta aveces me preguntaba cómo terminaron por enamorarse y luego casarse, tenían actitudes completamente diferentes, peleaban mucho cuando era pequeño, pero mamá siempre lucia bien frente a mi, siempre me daba esa sonrisa cálida que me daba una sensación de paz, es mi madre, me alegraba verla "feliz", era su pequeño, siempre me lo decía, y aun estando creciendo lo hacía.

Pero ahora esa sonrisa no me recibió, solo recibí un asentimiento de cabeza invitándome a pasar. Dolería menos una cachetada madre. Su indiferencia, la mirada perdida. Dios me pone con la piel de gallina.

-Kookie, has crecido bebe. Hace tiempo no te veía, ni te has acordado por llamarme, he visto que sigues sin despegarte de Taehyung, déjalo respirar, acaba de llegar de Daegu y tú asfixiándolo.

Su misma manera de hablar, enérgica, pero sin siquiera mirarlo a los ojos. Ambos chicos voltearon a verse, hasta el menor sabía que esa actitud de la señora Jeon era extremadamente extraña. Ella no era así.

-Taehyung ¿Cómo te fue en tu viaje? ¿Han comido? Seguramente no, les haré algo rápido.

-Mamá, trajimos el desayuno o almuerzo para ustedes, no sé cómo lo tomen. -Volteó hacia mi y miro la bolsa, al entender ahora que había extendió la mano para agarrarla, y poder sacar el contenido.

-No me di cuenta, siéntense, les serviré un jugo que prepare en la mañana... -Antes que contará lo sucedido un grito desde el pasillo la hizo callar.

-¿¡Ha llegado ya Jungkook!?

Se encontraba en su salón al parecer.

-¡Voy padre! Ma, Taehyung estará aquí en la sala, nos iremos luego. Ah y ¿podríamos quedar para hablar un día de estos mamá? Necesitamos hablar. -Supuse refleje preocupación, porque ella me reflejó lo mismo.

-S-si Kookie, ve con tu padre. -Sonrío lo mejor que pudo para mi. Suspire y la abrace, haciendo que ella haga lo mismo. Mi guerrera.

Nos separamos y fui directo al pasillo para encaminarme a las escaleras e ir al salón con mi padre. Llegando toque y su tono duro tras la puerta dándole a decir que pasará no tardo en aparecer, al solo entrar pude percibir que olía mucho a cigarro. Odiaba ese olor. Malos recuerdos azotan mi mente.

-¿Por qué la urgencia de verme? ¿es importante?

Levantó las cejas apenas terminó las preguntas, sigue sin verme a los ojos, así que no ve mi gesto.

-Jungkook. -Siempre trate de pequeño que su tono jamás me intimidara, luego de grande podría ser presa fácil para los bravucones del colegio, pero me fue imposible. Y ahora aun lograba intimidarme.- Tuve una visita a tu colegio de hace tiempo, y me he enterado de mucho ¿sabes? No creí que hasta los mismos maestros fueran a preguntar si yo eduque a un hijo marica.