Vivir en un pueblo parece algo sesillo y sin ningún peligro, pero nada es lo que parece, las apariencias engañan más de lo que piensas. Un niño de buena familia y sin faltarle nada, puede llegar hacer daño a otros y marcarlos para el resto de su vida. Sin que nadie sea consiente de ellos. Ni sus propios padres.
Yo soy Abril y esta es mi historia. Tengo 17 años y vivo en un pueblo pequeño de Sevilla. Vivo con mis padres y mi hermano que tiene 7 años. Mi madre siempre dice que hay que aprovechar cada día como el último y eso intento, aunque estando en el instituto es algo complicado, siempre lo es, aunque intento que no lo sea. A veces resulta difícil, pero siempre intento no pensar en los problemas.
Solo pensar que ya me quedan solo dos meses de curso es un alivio, estoy en segundo de bachillerato y en esta época del año estamos algo agobiados ya que se va acercando el final del curso. Esta mañana ha sonado el despertador como todos los lunes, si, hoy es lunes. Me he levantado, me he vestido, cepillado los dientes y peinado, y ya me voy para clases. Llegó a clases y la mañana trascurre como siempre, primero clases de historia, luego seguimos con las clases de mates y antes del recreo clase de francés. El recreo pasa como siempre con mis amigas hablando entre risas de nuestras tonterías.
-Abril, ¿vas a venir a la fiesta de esta noche?- Me pregunta mi amiga Delia. Ella es mi mejor amiga, aunque con Nora y Elia tengo confianza, no es como la que tengo con Delia. Ella lo ha pasado muy mal, su infancia no ha sido la mejor que se diga. Su padre le pegaba a su madre, y discutían mucho. Cada vez que había algún problema en su casa Delia se venía a mi casa. Lo pasó muy mal hasta que su madre tomo la decisión de separarse de su padre, él se fue de Sevilla y no ha sabido de él desde entonces. Pero para Delia la marcha de su padre fue una liberación y el fin de esa pesadilla.
La pregunta de mi amiga no para de sonar en mi cabeza y me lleno de recuerdos que me gustaría borrar.
-Abril, ¿me estas escuchando?
-Sí, pero creo que hoy paso. No me apetece ir a ninguna fiesta, lo siento.
-Abril, tienes que superarlo ya, no vamos a dejar que te vuelva a pasar lo mismo. Además no creo que Violeta y Rubén vayan.
Violeta es la persona más cruel que conozco. Su familia es la más rica de la zona. Ella y yo no nos llevamos muy bien aunque un tiempo intentamos ser amigas, pero por algo que paso, de lo que no me gustaría acordarme, esa remota posibilidad se fue. Y Rubén es, bueno para explicarlo bien, es como el capitán del equipo en una película americana. Y como no podía ser de otra forma el novio de Violeta. Pero él es diferente, él se preocupa por los demás. Por el contrario Violeta es la persona por la que hay que preocuparse para que no les haga nada a los demás. Me lo demostró en lo que ocurrió en la fiesta. Era un día de instituto normal, el año pasado.
"Estoy metida en mis pensamientos y cuando menos me lo espero mi amiga Delia, me despierta.
-Abril, ¿tú que dices?
-¿Qué digo, sobre qué?
-¿No te has enterado?- me dice Nora, mientras se sienta en la mesa, a mi lado y todas me rodean.
-Pues que nos vamos a ir al festival que hay en el pueblo de al lado, y tú vas a venir con nosotras.-dice Elia.
Antes de que pueda contestar algo veo a Violeta, apartada de todo el mundo y está llorando. Nuestra relación no ha sido la mejor. Lleva en mi clase desde primaria pero éramos y somos muy diferentes, quizás por eso nuestra relación sea como es. Hasta el momento no hemos discutido ni nada por el estilo, pero eso no significa que nos llevemos bien. No me gusta verla mal, nadie se merece pasarlo mal. Entonces decido acercarme a ella. Mis amigas se quedan mirándome con cara rara.
ESTÁS LEYENDO
Yo Soy Abril
RomanceAbril es una chica de instituto, que cree estar enamorada, pero descubrirá que el verdadero amor la esta esperando y no es quién ella piensa. Además se tiene que enfrentar a problemas en su familia y en el instituto. Atrévete a sentir.