ÚNICA PARTE

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Les vengo a contar una hermosa historia llena de amor sincero y real, que muy pocas veces se encuentran actualmente.

🌻🌕✨

Park Jimin un joven chico de tan solo 28 años se encontraba postrado en la cama de un hospital mirando un drama junto a al lado de su amado novio, Jeon Jungkook.

¿Se preguntarán qué tiene Jimin? Pues, tiene cancer...

Jeon acariciaba la mano de su amado novio dándole calor ya que los últimos días andaba helado y más cansado que ya no podían salir a dar ese pequeño paseo por el hospital, hasta llegar al patio y sentarse en unas bancas a ver el atardecer mientras una brisa golpeaba sus rostros relajandolos.

Aún ven el atardecer juntos pero en la habitación del rubio, este se sentía mal por no estar poder pasear con su novio de 15 años, si Jeon se le declaró a Jimin siendo muy jóvenes pero es que para el amor no hay edad ni límites para amar.

Kook literalmente vivía en el hospital, no dejaba a su pequeño Mochi solo ni un solo momento, si algo quería él iba por ello, si necesitaba ir al baño lo ayudaba a levantarse y Jimin era muy agradecido de tener un hombre a su lado que a pesar de todo, está ahí dándole su amor y brindándole alegrías.

El rubio soltó un suspiro largo llamando la atención de pareja.

— ¿Estas bien, amor?—

Jimin giró levemente su cabeza mirando a su peli negro con una dulce sonrisa y llena de amor, como también de perdón.

— Algo así... la verdad no me gustaría tener cancer y poder hacer todas las cosas que nos prometimos hace unos años atrás...—

Hablo casi en un murmuró.

— Jimin, cielo... tú te curarás y los planes que tenemos seguirán su rumbo.—

Jeon siempre fue optimista en todo pero Jimin sabía que ya no había solución, su cancer ya estaba muy adelantado que los doctores simplemente le dieron su "tiempo de vida" pero aún así recibía sus quimioterapias y tomaba sus medicinas, porque no quería romper esa pequeña esperanza que tenía su nochu.

Park sonrió y llevó la mano de su novio a sus labios besándolo con mucha ternura y tomándose su tiempo en dejar sus labios marcados en la piel de este, Jeon sonrió viéndolo, para los ojos de los demás su amado rubio podía estar muy delgado, pálido y sin cabello pero a Jeon eso no le importaba, la apariencia que podía tener su amado le daba igual, no se enamoró de Jimin por su apariencia o físico, sino, de su alma, de su forma de ser, de lo amable y dulce que es con todos.

— ¿En que piensas,Kook?—

Hablo el rubio mirando a su novio un poco ido.

— En lo hermoso que eres, amor mío.—

Provoco que las mejillas pálidas de su amado tomaran un color levemente rojo, sonrió y se levantó de la pequeña silla para besar la frente de su amado.

Se alejó para ver a los ojos a Jimin y volvieron esas mariposas en su estómago que nunca se iban estando a su lado.

Park llevó su mano a la mejilla del peli negro acariciandola lentamente queriéndola mantener en su menoría para siempre, Jeon se recostó levemente sin poner todo su peso en la mano de este.

— Te amo, Park Jimin.—

Dijo con los ojos cerrados disfrutando de las caricias de su amado.

— Te amo aún más, Jeon Jungkook.—

Y con un poco de esfuerzo el rubio se sentó en la camilla para besar los labios de su amado, el beso era suave y sin apuros, querían mantener ese beso en sus recuerdos pero para Jimin sería su último beso.

Desde la mañana se había sentido peor no le quiso decir nada a su amado, ya muchas preocupaciones le había dado, él solamente quería que su amado chico sea feliz y tenga una familia, tal vez no con él pero aún así deseaba toda su felicidad a lado de una persona sana.

Al separarse del beso, Jimin rozó levemente su nariz contra la de su menor sonriendo.

— Amor, iré a la tienda a comprar un helado, ¿deseas algo?—

Jimin negó con una sonrisa, sabia que este sería su último verano al lado de su conejito. Jeon se alejó del rubio y tomó su billetera como también su celular, le dio un último beso a su amado para luego irse a la tienda más cercana que estaba a 3 cuadras del hospital.

Park miró irse a su amado para luego mirar al techo, soltó un suspiro pesado, cerró sus ojos tratando de olvidarse del dolor que estaba sintiendo.

De pronto los signos vitales del rubio se comenzaron a alterar provocando sonidos fuertes que llamó la atención de una enfermera que pasaba por el pasillo, entró y vio al paciente removerse un poco, corrió por el pasillo llamando al doctor a cargo de Jimin.

Los minutos iban corriendo y cuando llegaron a la habitación de Jimin fue muy tarde, el cuerpo del pequeño estaba quieto y completamente helado, una pequeña lágrima seca estaba por su mejilla.

El doctor estaba apuntando la hora y el nombre del difunto paciente y todo eso estaba siendo visto por un alto chico peli negro que dejó caer la bolsa donde había comprado los dulces favoritos de ambos, se adentró lentamente a la habitación temblando, se sentó en su silla y tomó la mano de su mochi.

La llevó a sus labios dándole un pequeño beso y acariciandola dándole de su calor.

— Lamento llegar tarde amor... no me pude despedir de ti... soy muy malo,¿no?—

Iba a decir unas cuantas palabras más pero el nudo que tenía en su garganta no le dejó y sin importarle quien estuviera en la habitación se puso a llorar como un pequeño Niño sosteniendo aquella mano por 15 hermosos años.

🌻🌕✨

Pasaron 2 años después del fallecimiento de Park Jimin, un hermoso y alto peli castaño ahora, estaba parado al frente de una lápida llena de muchos girasoles que eran los favoritos de su amado.

Dejó una pequeña cajita roja y la abrió, en el contendido había un anillo de bodas, la puso en medio de las flores.

— Mi amor por ti siempre será eterno, Park Jimin.—

Acaricio su mano donde tenía un anillo igual al que había en la cajita, una suave brisa acariciaba el rostro de Jeon, provocando que este sonriera levemente siempre que el aire golpeaba con su rostro pensaba en que eran las manos de su amado acariandolo.

— Papá~ yo también quiero hablar con papi.—

Una pequeña niña jalaba del pantalón de Jeon, este acarició la cabeza de su hija, ya se la había presentado a Jimin unos meses atrás.

Jeon no pudo amar a otra persona como para tener una familia, pero si adoptó a una pequeña niña que le hacía recordar a su amado mochi.

Lisa estaba al frente de la lápida de su papi hablándole de las cosas que hacía con su papá Jeon y de los momentos en su escuela.

🌻🌕✨

Cuiden a la persona o personas que más amemos, nunca sabemos si mañana no estarán con nosotros, valoren a las personas...

ETERNAMENTE JUNTOS|| ONE SHOT || KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora