Mentirosa Culia

TRES.

Desperté con la perra caña. Me levanté con toda la paja del mundo y fui al baño, entré y vi a mi tía cagando.

– ¡Conchetumare! ¿No sabi lo que es el pestillo?

– ¡Niño indecente! ¡Falta de respeto! ¡Váyase! – me lanzó el confort y salí huyendo de ahí.

Iu.

Volví a mi pieza y caché que el Pancho ya estaba despierto y demás que viendo memes porque estaba sonriendo mientras miraba el celular.

– ¿Que tai' viendo? – me puse a su lado tratando de ver que estaba mirando.

– ¿Qué mirai sapo culiao? – Me pegó un wate.

– Aweonao, ni ahí con mirar tus weas toas' cagás.

Me tiré en la cama de nuevo hasta que nos llamaran a almorzar, no es de flojo que no ayude en mi casa, pero no me dejan poner mano en la cocina, me llaman pa' puro poner la mesa, aunque ahora ni eso, desde que confundí los platos normales con los de sopa. Chucha perdón, errores cometemos todos. ¿O no?

Entré a instagram a buscar a la mina que me comí anoche, era terrible linda y besaba de lo más bien... ¿ven? esto pasa cuando carreteo, me engancho hasta de lo más mínimo, me odio. Yo no pedí nacer así.

No era privada así que puro que la psicopatie, su sonrisa tan linda, ay. ¿Qué huea? ¿por qué tiene foto con uno mino? ¿me comí a una mina con pololo? conchetu... es el hermano. Amén

– Oye culiao, ¿anda a buscar al pa picar?

– Yaaa, anda vo' po. Si tu eri él con hambre, aparte demás que almorzamos en un rato.

– Aweonao, son las once...

– ¡Chupalo entonce! – le grité en toda la cara.

– Culiao inmaduro. – Rodó los ojos.

– Ah, pero yo no te digo nada cuando digo trece y gritai "más me crece" – lo miré mal.

Seguí mirando las fotos de la Maya un rato y terminé viendo memes.

Jajaja, meme culiao bueno. laik y compartir.

Yo la verdad no entiendo porque me engañan, soy el pack completo, cariñoso y te envío memes, ¿qué má' querí?

– Oye perro – lo miré frunciendo el ceño, y este desde cuando se cree zorrón – ¿te gustó la gene?

– No, o sea es linda, pero ni ahí. ¿Por?

– Me dijo que teniai buen poto.

– Eh, ¿gracias? dile que tiene, mmm – pensé un rato que decirle – que tiene lindos sentimientos. – sonreí.

– Estaban despiertos los conchesumares, ya, partieron, vayan a hacer el aseo, cabros de porqueria. Creen que están en un hotel. Les gustó carretear anoche, ah. – nos mandó mi vieja.

Yay, aseo con caña.