Speak Yourself

"Tal vez yo nunca podré volar como esos pétalos de flores de ahí"

Llegue al aeropuerto de la ciudad de México por la mañana, nos bajamos del avión, ya extrañaba mi México querido, pero... No sentía lo mismo.
Desde la partida de patricia y la noticia de Fernando no era lo mismo, todo dentro de mi eran pedazos, pedazos que no se podrían armar. No podían hacer nada...
Llegando al hotel más cercano al aeropuerto porque estaba cansado del vuelo, nos fuimos a dormir, mis papas estaban super cansados del vuelo, yo salí por un rato a conocer más, no sabía que hacer así que visite el monumento a la revolución, el ángel de la independencia, el castillo de chapultepec, pero no era lo mismo, mis primos estaban ahí conmigo pero me hacían falta mis amigos.
Al llegar al hotel en la noche tendría que descansar porque en la mañana partiríamos a la morelos para ir a la casa de Fernando.
-ya llegue mamá- le decía mientras me despedía de mis primos
-ten hijo, ponte la chamarra y vámonos- me decía mientras mi papá se terminaba de alistar y me daba mi chamarra
-a donde vamos. Acabo de llegar- tome la chamarra y me la puse
-en el camino te explico- me dijo mientras salíamos de la habitación
Durante el recorrido en la radio sonaba una canción muy peculiar, me llamó la atención
"La oscuridad está apagando la luz de mi futuro.
Mi sueño perdido por culpa de un amor inmaduro.
Mi hacha es la ambición
que afilo cada día.
Pero mi orgullo incontrolable,
convirte al filo en un cuerpo romo.
Lo sé."
-quitemos esas canciones y pongamos algo de música clásica- apago el radio mi mamá y puso su auxiliar
-no mamá espera, deja la canción, quiero terminar de escucharla- le dije mientras me secaba un poco las lágrimas
Al poner la radio de nuevo ya no estaba la canción, no sabía como se llamaba, ni quien la cantaba, pero tenía algo en particular que me gustaba.
Nos dirigíamos a una montaña, creo que era en parque los dinamos en la ciudad de México, todo era hermoso.
Lo que más me gusto de ahí es que se podía ver toda la ciudad, era hermoso ver la ciudad de noche, escuchar el sonido de los grillos y la luz de la ciudad.
Me senté en una banca frente a la vista, comenzó a recordar aquella vez que fuimos a la casa de patricia, comence a llorar y lamente el no haber sido lo suficientemente fuerte como para enfrentar las cosas, por no darle lo mejor a mis amigos, a mi familia, por no ser yo mismo, por aparentar algo que no soy.
-otra vez aquí Ricardo- escuche aquella voz mientras me tomaba de la espalda
Me pare demasiado asustado, pensé que me harían algo
-ya te dijimos Patricia y yo que no debes de estar aquí, debes de estar con tus papas cuidandolos- me dijo Fernando mientras me abrazaba
-que bueno que te vemos de nuevo Ricardo- me decía patricia mientras me tomaba de la mano
-no puedo estar pasando , no puedo estar pasando , no puedo estar pasando- me decía mientras me ponía pálido y me asustaba
-amigo, tranquilo, estamos aquí contigo, somos nosotros- me dijeron mientras se tomaron de las manos, traían ropas blancas, y parecían que no sufren
-pero... Pero como esta pasando esto- decía mientras trataba de secar mis lagrimas
-sabes Ricardo, es difícil desde que nos fuimos, lo vemos todo y venimos a decirte que gracias, gracias por el tiempo que hiciste todo por nosotros, gracias por aquellos días donde diste todo sin esperara recibir nada a cambio, gracias por arriesgarte por patricia y por mi, gracias por ser un amigo perfecto- me decían mientras veíamos aquella vista
-pero... No se quien soy- mencione con la cabeza baja
-confía en ti y podrás hablar por ti mismo, confiamos en ti, habla por ti- me dijeron mientras me abrazaban
Lo mire y me miro con una sonrisa, una sonrisa sincera y pura
-ven acércate- me decía patricia mientras me daba una chocolatina
-gracias- me dijo y soltó un grito de alegría
Después lo hizo Fernando
-Adelante, habla por ti- me dijo mientras me miraba con esa sonrisa tan pura que solo patricia lo logra
Por un momento mire la chocolatina y los miraba a ellos
-JÓVENES POR SIEMPRE- grite y después gritaron ellos
Nos reímos y con una sonrisa y lágrimas en los ojos los mire
-se tu mismo- me miro patricia y me dio un beso en la mejilla
-Ammm... Patricia tenemos que irnos- decía Fernando mientras interrumpía el beso
-cierto, lo siento Ricardo, promete que te cuidaras- me decía mientras corría a aquel bosque espeso
-cuando volverán- les grite tratando de alcanzarlos
-nos veremos pronto Ricardo, cuidate- me dijo mientras reían en el camino y no soltaba la mano de Ricardo
Mi mamá me despertó diciéndome que tenía pesadilla
-Ricardo despierta, estas bien?- me sacudía demasiado tratando de que me levantará
-fue un sueño todo este tiempo?- le decía confundido
-hijo, tenemos que irnos- grito mi papá que ya estaba listo
-vámonos Ricardo- mi mamá me abrazo y me puso mi chamarra
Durante todo el camino mi mamá me contaba que mientras dormía decía cosas
-decías cosas como jovenes por siempre, y mencionaste 2 veces a patricia y a Fernando- decía mi mamá toda confundida
-lo se mamá, fue un sueño tonto- observaba la ventanilla del auto mientras estaba triste
Pero, lo sentí demasiado real, el abrazo, el beso, el ultimo grito, todo era tan real, o al menos eso parecía
Cuando me acosté en el carro sentí algo que me incomodaba en el bolsillo de la chamarra, abrí el bolsillo y saque una chocolatina, la misma chocolatina que me dio patricia
-que es eso hijo- me decía mientras giraba a verme
-es un chocolate mamá, nada importate- le decía confundido
-si te la vas a comer no tires nada- me dio una bolsa para la basura de aquel dulce
-si mamá- le decía mientras veía que tenia una nota que decía
"se tu mismo Ricardo, pronto nos veremos"
Guarde aquella chocolatina y sonreí, jamas me volvería a sentir solo, sabía que ellos estaría conmigo
No es que te crea solo estoy tratando de soportar porque lo que puedo hacer... Es solo esto