Contrato Espiritual (Spirit Pact)

Contrato espiritual

La familia Duanmu estaba reunida nuevamente en la sala, el amo Duanmu xi estaba ya molesto, todos los presentes estaban callados mientras le escuchaban.

−dije un millón de veces que no, ¿Acaso no ha quedado claro?, si quieren un heredero pueden obligar a Siyun a complacer sus caprichos, si es que ella está de acuerdo−

Ella estaba de pie unos pasos lejos de Duanmu xi cruzada de brazos, también en su rostro se podía reflejar su molestia.

−Duanmu xi, ¿Te das cuenta de lo que estás diciendo? – preguntaba uno de los ancianos, uno ya viejo.

− ¿Qué es lo que buscan de mí?, ¿creen que ella es una herramienta para fabricar hijos? – señalaba al lugar donde se encontraba Qin Siyao con la mirada al suelo.

−Necesitamos al próximo Yang ming porque cuando.... – el anciano no termino de hablar cuando fue interrumpido por el joven.

−cuando muera.... Exacto, cuando eso pase entonces tendrán un heredero, hasta entonces, las cosas serán como yo diga, yo soy el amo aquí en esta familia, yo pongo las reglas, no ustedes.

Diciendo aquellas palabras Duanmu xi salió de la habitación, se sentía frustrado y fastidiado por aquella situación , ya estaba cansado de lo mismo, pero solo le quedaba esperar, esperar a que todo terminara, como había prometido.

−Duanmu... − decía Qin justo detrás de él mientras este detenía el paso, Duanmu xi siempre había sido un caballero en todo momento con ella, se detuvo sin decir nada.

−Duanmu, lamento todo lo que está sucediendo... yo... − decía la chica con la mirada al suelo, se podía ver algo de tristeza en su mirada.

− ¿Por qué?, ¿Por qué lo lamentas tú? Siempre lamentas lo que ellos hacen, aceptas toda su voluntad – el chico de cabellos plata se mantenía con la mirada al frente, no quería descargar su enojo en ella pues la chica no tenía la culpa de todos los problemas de familia.

−no creo que sea una carga para mí, sé que tú tratas de protegerme, siempre lo haces, pero puedo sobre llevarlo, soy una persona fuerte y.... –

− ¿Por qué no te pones a pensar un momento en ti? te has dado cuenta que no quiero una esposa, que no quiero una familia, ¿Por qué insistes en que.... – interrumpió la chica.

−quiero estar cerca de ti, ¿Por qué soy la única a la que no dejas estar cerca?, te conozco desde que era pequeña, siempre eras tan cálido y amable. – Duanmu xi sereno el semblante frío que tenía y se giró para ver a chica, ella estaba llorando, Duanmu xi sabía que Qin lo seguía por años, incluso podía sentir esa obsesión que ella sentía por él, Xi la quería eso era verdad, pero solo la veía como una hermana o una amiga.

− Siyao, no siempre es bueno aferrarse a las cosas que no podemos tener, yo sé que tú quieres algo más de mí, todos esperan algo más de mí, pero, alguna vez, ¿alguien pensó en lo que yo quería? – Qin levanto la mirada al chico más alto que la miraba con ojos de preocupación hacía ella, de lastima.

−No me importa ser solo tu prometida hasta que todo acabe− dijo la chica que se secaba las lágrimas. –prometo no molestarte más− agrego la chica.

−Siyao, tú rompiste el acuerdo de un año que tenías para ser mi prometida, dijiste que te irías después de eso y aun sigues aquí, esperando algo de mí – dijo Duamu xi muy serio.

−Duanmu xi, yo también puedo estar en los malos momentos contigo, también puedes confiar en mí, también... −

−entonces, ¿Dónde estabas cuando la maldición cayó sobre mí? –esta vez Duanmu xi levanto un poco la voz.