Por tí || Albulia

Capítulo 14: sólo tú y yo

Narra Alba:

Me sentía fatal en mi relación con Julia. Había estado pensando y ya sabía que hacer, Julia y yo estámos destinadas a estar juntas siempre.
Por lo que cogí y fui al supermercado a comprar algo para cenar, adorné toda la casa para dar un ambiente tranquilo y esperé a que llegase Julia para poder hablar y arreglar las cosas.

Narra Julia:

Mi turno acababa de terminar así que cogí el bus para llegar a casa. Había recibido un mensaje de Alba que decía lo siguiente:
Ya sé que va a pasar con lo nuestro, te espero en casa.
Lo único que hizo ese mensaje fue acelerar mi corazón, qué iba a pasar, Alba me dejaría o por el contrario arreglaríamos las cosas. Fuese lo que fuese yo siempre voy a querer a Alba más que nada en el mundo.
Cuando me bajé del bus en la parada más cercana al apartamento me iba poniendo cada vez más nerviosa. Subí las escaleras abrí la puerta y ahí estaba Alba.

Narra Alba:

Julia acaba de llegar a casa, era el momento.

- Hola.
- Buenas.
- ¿Qué tal el trabajo?
- B-bien.

A Julia se le notaba un montón los nervios, era normal ya que no sabía si le iba a dejar o no.

- Ven.
- A dónde.
- A darme un abrazo.

Julia se acercó a mi y nos dimos un abrazo.

- Vamos a hablar.
- V-vale, v-vamos al salón.
- No, al salón no.
- ¿Entonces a dónde?
- A la habitación.

Cogí a Julia del brazo y le llevé hasta la habitación, le senté en la cama y yo me senté a su lado.

- A-Alba.
- Dime.
- Te quiero.
- Y yo.
- Te prometo que yo no le besé, que fue él a mi.
- Lo sé Julia, pero...
- ¿Pero?
- A pesar de todo soy yo quien debe pedir perdón.
- ¿Tú?
- No he debido comportarme de esta forma, lo siento.
- No, lo siento yo.
- Julia...
- Dime.
- Una cosa más.

Alba se levantó, abrió un cajón y sacó algo.

- ¿Qué es eso?

Alba se puso de rodillas, miró a Julia, sacó un anillo y dijo.

- Julia.
- Ay Alba.
- ¿Q-quieres casarte conmigo?
- Sí.

Alba se levantó del suelo y le puso el anillo a Julia.

- Oye, ¿pero para qué hemos venido a la habitación?
- Para...
- Para qué.

Alba se sentó encima de Julia y le dió un pico en los labios.

- Aaaah, ya veo.
- Hace tiempo desde la última vez.

Julia cogió a Alba y se acomodaron en la cama.
Empezaron con un beso tranquilo que poco a poco fue subiendo de tono.
Julia metió sus manos por dentro de la camiseta de Alba y se la quitó, Alba hizo igual con Julia. Cuando ambas estaban ya en ropa interior Julia le dijo a Alba:

- Alba.
- ¿Qué?
- Te echaba de menos?
- Y yo a ti.
- Por cierto...
- Dime.
- En unos días iremos al hospital, ¿no?
- ¿Al hospital?
-  Sí.
- ¿Para qué?
- Cómo que para qué, ¿te recuerdo que estoy embarazada de casi 9 meses y estoy que no me puedo ni mover?
- 1- Es verdad y 2- Sí te puedes mover, sino no estaríamos así, aunque te dolerá, ¿paramos?
- ¡No!
- Vale, vale.
- Además no me duele.
- ¿Qué no?

Alba elevó una ceja.

- No, porque como es contigo y tú lo haces con cuidado de no hacerme daño.
- Hombre, quiero que el bebé salgo tan sano y perfecto como su madre.
- Que tonta eres.

Julia besó a Alba y lo hicieron toda la noche.

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Aquí acaba la maratón, tengo que decir que no le quedan muchos capítulos a la novela, calculo que entre 2 y 4 más el epílogo.
Pero para que no os quedéis sin Abulia por mi parte he creado otra novela Abulia, se llama: No es casualidad.  En esta novela habrán más personajes y va a ser distinta a esta, espero que os paséis y que os guste.
Espero que os haya gustado la maratón 💝