Me encontraba armando mis maletas para emprender un viaje lejano de donde estaba mi hogar, me ofrecieron una buena suma de dinero para ir al lugar a hacer un trabajo de niñera por unas semanas, les conté de esto a mis padres y con todo el apoyo del universo me alentaron a participar de esto mientras ellos cuidaban de mi mascota, un perro beagle pequeño que me dieron unos días atrás para mí cumpleaños.
Comencé a llenar de ropa y utensilios mi maleta esperando para el siguiente día donde mis padres me llevarían al tren de camino a mi destino.
por lo que luego de arreglar mis cosas me fui a la cama para descansar, ya que el viaje sería largo y empezaría desde temprano.Ya llegando la mañana partimos desde muy temprano hacia el terminal de buses, mi madre se despidió de mí con un beso cálido en la mejilla y mi padre con un abrazo cariñoso como en mis días de escuela, al comenzar a moverse el tren les agité la mano por sobre la ventana para una ultima despedida....
ya transcurriendo los minutos dentro del vagón se me acerca un por botones joven, este se acercó con la intención de atenderte por lo que podía notar, y luego comenzó a hablarme:-hola señorita, ¿de casualidad querrá que le sirva algo? ¿ un té o un café?.
-si si, un té estaría bien para mí- le respondí no tomando mucha atención a este, puesto que estaba observando los paisajes desde fuera de la ventana.
-¿quiere que le ofrezca azúcar?.
-no gracias, el té solo estará bien.
- muy bien, pasaré para atenderla más tarde.- me dice para luego marcharse a atender a los demás pasajeros.
Después de eso comencé a leer para pasar el rato, al transcurrir una media hora este botones vuelve para recoger la taza y me deja unos pequeños pastelillos, dijo que vendrían bien para acompañar la lectura que estaba tomando tras el transcurso del viaje....
Al pasar las horas habría oscurecido afuera, guardé el libro y empecé a ceder ante el sueño quedándome dormida mientras miraba por la ventana el porvenir de los paisajes que estaban por el recorrido de la locomotora......
Me desperté repentinamente de un sueño profundo que estaba teniendo por la turbulencia del tren, aún era de noche y estaba totalmente vacío el vagón donde estaba, me levanté para ver que sucedía pero no lograba ver nada por las oscuridad, por lo que debía avanzar por el vagón sujetandome de los pasamanos de los asientos.
Un poco más adelante ya casi en el siguiente vagón, se lograba entrever por la puerta al siguiente vagón en el suelo un cuerpo tirado, a lo que comencé a sentir extrañeza por que parecía bastante real para ser un maniquí.
Fui al siguiente vagón para acercarme a ver el cuerpo y al tocarle el hombro para ver respuestas de vida este se me abalanza encima intentando morderme el cuello, lograba sentir como me empezaba a desgarrar la piel con sus uñas, y por más forcejeo que estaba dando para quitarmelo no lograba safarlo de encima, salpicaba la sangre por todo el vagón mientras intentaba quitármelo, este terminó por desgarrarme la garganta con sus dientes y como loca gritando terminé por despertar de ese horrible sueño, ya habían rayos de sol que me hacían ver que ya era de día al levantarme de golpe.
El botones se me acercaba preguntándo...
-¿estás bien, te dañaste o algo?
-no, estoy bien, sólo fue un sueño....gracias por la preocupación de tu parte.
- muy bien señorita, no dude en consultarnos por sí llega a necesitar algún tipo de ayuda.
-muchas gracias, enserio....
el botones fue por un té para mí junto con un bagget, al entregarme el desayuno me dice:
-un té sin azúcar y un acompañamiento para calmar el hambre, espero que esté bien señorita.
le respondí "gracias por todo" con una sonrisa, me quedé mirando el paisaje mientras me servía de todo lo recién entregado.
El botones volvió para recoger la taza y se marcha sin más con una sonrisa, yo seguí mirando por la ventana mientras esperaba llegar a mi destino.
Pasaron unas horas y ya estaba llegando a mi parada, otro botones se sobrepone en la puerta de la salida gritando que ya estábamos por llegar, por lo que recogí mi maleta y bajé con ayuda del botones de las puertas del tren.
El botones que me estuvo atendiendo durante todo el trayecto también descendió del tren, yo seguí caminando hasta toparme con el volkzwagen tipo escarabajo que me estaba esperando.
Unos niños estaban jugando sobre el camino con aviones de papel lanzándolos de un extremo a otro, uno de estos avioncitos por casualidad salió disparado hacia la calle y el niño salió detrás de este, traté de gritarle que era peligroso pero un auto a gran velocidad iba circulando.
El sujeto atropelló al niño sin más lanzando el cuerpo varios metros más adelante, no supe como reaccionar al suceso, pues ya había tenido un sueño de muerte un poco antes de todo lo ocurrido
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castillo de rosas
Horrorla anfitriona de nuestra historia se adentra en las profundidades de las macabras matanzas realizadas por los niños del castillo quienes predominan las paredes de este sitio, nadie sabe que tantas atrocidades pasarán dentro de estos muros