Cp 5: La declaración

89 3 0
                                    

La noche estaba aquí, los héroes más bárbaros de toda China utilizaban la oscuridad de la noche como velo, así poder llegar a su destino sin ser descubiertos.

La visita al pueblo les quito tiempo del que no tenían, así que decidieron trotar toda la noche.

Po: (Suspirando y exhalando aire rápidamente) Tigresa.

Tigresa: (Jadeando) Que pasa Po.

Po: ¿Podemos detenernos un momento? Hemos corrido unas 2 horas y con esto recuperamos la desventaja (Jadeando de cansancio)

Tigresa: (Ve la cara de Po un poco abatida a lo que se apiada de él y decide aceptar su trato) Está bien Po, después de todo solo desayunamos, nos hizo falta

comer.

Po: (Po empieza a voltear a sus alrededores) Mira allí. (Po le señala una colina alta) Podemos detenernos ahí, comer un refrigerio y seguir si gustas.

Tigresa: Me parece perfecto, además es un lugar muy bonito, bien hecho Po (le sonríe) Pero vamos corriendo.

Así los maestros dieron su último esfuerzo subiendo la colina más alta en ese lugar, esa colina tenía algo especial, no solo porque parecía que podías tocar la luna,

era bastante alta por lo que podías ver todo el paisaje, que era muy hermoso además.

Ambos maestros la escalaron rápidamente, para llegar a la punta más alta, donde estaba plana, y los arboles rodeaban ese círculo que se formaba.

Tigresa: Wow, sí que es bonito este lugar, me pregunto porque la gente no viene más seguido por aquí.

Po: Supongo que ese es el chiste, es hermoso por que la naturaleza crece sin gente que la corte y limpie.

Tigresa: Tienes razón, creo que nada superara la belleza natural de este mundo. (Tigresa tenia cara feliz y emocionada por ese lugar que en verdad le gusto)

Po volteo a ver a Tigresa sin que ella se percatara que era observada, era una imagen hermosa para él, la luna podía reflejarse en sus ojos carmesí,

y su pelaje brillaba con la luz de la luna, Po noto cada rasgo facial de Tigresa para llegar a la conclusión que era una obra maestra, pues tiene unos

ojos que irradian ternura y enojo, su cara con una forma hermosa, Po veía sus labios, eran tan hermosos, pequeños y bonitos, con una sonrisa encantadora.

Para luego fijarse en su físico, Po pensaba que tal vez no tuviera unos pechos tan grandes pero sin embargo tenía una figura muy hermosa además de sexy, pues

su trasero parece bastante grande y firme.

Po: Tigresa, ¿te gustaría comer algo? (Empieza a sacar unos sándwiches que compro en el pueblo.)

Tigresa: No Po, yo estoy bien, come tranquilo (Lo voltea a ver para sonreírle tiernamente, cuando vio a Po con una cara triste)

Po: Es una lástima, (empieza a guardar los sándwiches.)

Tigresa: (Tigresa recordó que a Po no le gusta la idea de comer solo) Po espera, pensándolo bien, si quiero uno de esos sándwiches.

kung fu panda  El AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora