Amor de Internet

Capítulo uno

Hola, mi nombre es Alex Johnson. Como han descubierto,tengo quince años. Lindos y querido quince, que para una chica es lo más hermoso en esta vida. Yo no pienso en eso, es una simple edad que cualquiera pasó a tener o la está viviendo.

A medida que pasa el tiempo, me he enamorado más de una chica. No sé su nombre, no sé que edad tiene, no sé dónde vive, sólo sé que puedo confiar en ella y ella en mí.

No puedo mentir, ustedes creerán que soy un idiota por enamorarme de una chica que ni he visto. Pero la verdad, ella es especial; le puedo contar todo lo que quiera, porque me responde a cada circunstancia. La amo completamente, la amo de verdad.

Como verán, bueno ustedes no me pueden ver. Pero les puedo comentar, que estoy sentado en mi escrito a punto de escribir un poema. La verdad, he descubierto varias cosas sobre mí, que yo nunca he imaginado. Como dibujar, nunca pensé en eso, pero la verdad me encanta. Dibujo animes, caricaturas, cómic, todo ese "todo", se puede transformar en muchas cosas.

Mis poemas son del amor, de la tristeza, de diversos temas. Tengo un blog que yo cree hace 1 mes, se llama "Blog de Poni" Si sí, muy maduro la verdad. No tengo otro medio para poder decir que me encantan los ponis, son mi debilidad, con tan solo escuchar "Mira un poni", y yo quedo como "Ah que lindo". Pero la verdad, no existen los ponis, solo en vida ficticia.

Me he dado cuenta, que desde que me compraron esta hermosa computadora. No he socializado con nadie en especial, solo con mi linda chica de la web. Sin ella, no sé que haría, pensaría, sentiría.

Todos en la escuela, me dicen que ella debe ser una hacker. Ya que, tiene puras fotos de animes, pero la verdad yo no lo creo. Ustedes deben creer que sí, pero yo no pienso en lo peor de ella.

Si algún día la veo, moriría completamente. A decir verdad, yo me desmayaría, suena loco en realidad. Pero sé como es en sentimientos, pero no sé como es físicamente; no me importaría si ella fuera gorda, flaca, vicebersa. La amaría de cualquier forma, el amor no se va de un día para el otro.

-Alex, tu almuerzo está listo-decía mi mamá mientras tocó la puerta de mi habitación-

-Ya voy-dije mientras en mi computadora, apagué la pantalla y salí del escritorio-

Vi por la ventana de mi habitación. Está daba a la calle, visualicé a mis familiares en la entrada de la puerta principal. Es raro, nunca vienen por algo en especial, esto me asustaba.

Decidí salir de mi habitación, bajé las escaleras. Al llegar a la primera planta, vi todos dentro. Mi abuela paterna María, mi abuelo materno Óscar, mi prima Stacy, mi primo Joe, mi tío Jeremy y mi tía Taylor.

-Hola-dijeron en murmullos-mientras todos me veían con una pequeña sonrisa entre dientes-

No hice ningún comentario. La verdad, no sé que tramaban. Pero la verdad, esto me daba miedo desde aún comienzo. Me senté en la punta del sillón, al lado de mi prima Stacy.

-Hijo, por favor. Di algo, comparte con tu familia-me dijo mi madre- mientras me miraba en pequeños percances ya que, miraba a los demás de reojo-

-Mamá, ¿Puedo ir a mi habitación?-pregunté mientras todos quedaron mirándome con enojo-

-No, hijo. Debes sociabilizar-me dijo mi madre-mientras hizo una sonrisa torcida que la verdad, le salió muy natural-

-Okey-dije mientras miré hacía la ventana que daba a la calle-

-Bien, preparé un rico puré de papás y un exquisito pollo-al escuchar a mi mamá diciendo "puré de papás", quedé pensativo. Mi mamá nunca pero nunca, ha cocinado desde que invitó a mis mismos familiares a una noticia. Estaba embarazada de mi hermano, él tiene 14 años; es menor yo. Bueno a lo que les decía, desde hace 4 años que no ha preparado puré de papás-

-Que delicioso. Me acaba de dar hambre-comentó mi abuela María-

-Pero bueno, Alex ayúdame a preparar la mesa-me ordenó mientras yo me levanté del asiento en que estaba. Fui a la cocina junto con mi mamá; saqué de los muebles, ocho platos, ocho vasos y 16 servicios.

Al tener lista la mesa, puse el detalle especial. Las servilletas en cada servicio y el toque que les debo contar. Las servilletas son de unos ponis, a mi mamá no le agrada que me gusten los ponis. Dice que es muy de gay, pero la verdad no lo soy. Aunque respeto a la gente homosexual.

-Está todo listo. Ya pueden venir a probar este delicioso almuerzo-dijo mi madre mientras abrió la puerta de la cocina. Mis familiares entraron y quedaron sorprendidos. Nuestra mesa era gigante, pueden alcanzar 16 personas-

Todos nos sentamos alrededor de la mesa. Ustedes pensarán donde está mi hermano, bueno son las 5 de la tarde y él llega a las 5:30. Bueno les comentaré algo de mi hermano, es bastante popular y llegado a la gente. En cambio, yo no soy nada de popular y llegado a la gente. Soy como muy al contrario a él, esa es la verdad concreta.

-Mmm... Delicioso-comentó mientras se echó a su boca una pizca de pollo, mi prima Stacy amaba cuando mi madre cocina-

-Muchas gracias, Stacy. Un gusto de que te haya gustado. Lo hice con mucho amor-le dijo mi madre mientras le sonreía oreja a oreja. Les debo decir, que a mi mamá ama que la feliciten por cualquier cosa que haga-

-¿Y cómo has estado Alex?-me preguntó mi abuelo Óscar, él estaba a un puesto de donde estaba yo; al lado mío estaba mi prima Stacy-

-Pues bien, abuelo. Muy bien-le dije mientras me limpié mi boca ya que, por costumbre tenía de mancharme cada vez que comía algo-

-Mmm... ¿Y qué hay con esa chica de internet?-me preguntó mi tía Taylor, ella quedaba al frente de mi puesto-

-Em...-no sabía qué decirle, la verdad no sé por qué sabe de mi chica-

-Dilo, hijo-me dijo mi madre-mientras abrió los ojos como medio de "Dilo o te vas"-

-No lo diré, estás otorgando mi privacidad-le dije mientras me paré de mi puesto y caminé hasta irme de la cocina-

-Tranquilos, él no es así-decía mi madre mientras que la escuchaba ya que, estaba fuera de la cocina-

Subí a mi habitación, al llegar cerré la puerta a golpe. Cerré con seguro, me tiré boca abajo a mi cama y traté de desahogarme-

Lo único que pensé fue hablar con ella, si ella. El amor de mi vida, el amor de internet que todos llamaban. Pero creo que ella, es la única que me entiende. Y es con la única que me siento seguro en esta vida.