Pablo Sarabia y Joaquín Correa, amigos y compañeros de equipo, pero que pasaría si los dos se enamorarán de la misma chica, y si ella es la hermana del capitan
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Narra Raquel:
- No entiendo por qué llevas todavía ese reloj, él se ha ido y para cuando vuelva seguro y ya tiene a otra - habla Ana y yo la miro mal - sabes que tengo razón, Pozo nunca te ha tenido mucho respeto cuando estabais saliendo y tú venga a creerte sus mentira, puedo asegurarte que lleva poniéndote los cuernos con Pilar en todo el tiempo de vuestra relación y que está deseando venir para mandarte a la mierda - habla y mis ojos se empiezan a cristalizar - Raquel - susurra intentando abrazarme pero yo salgo corriendo antes de que lo consiga.
- Ey ¿estás bien? - escucho la voz de un chico que me coje del brazo y me para.
- Déjame por favor- surro intento no soltar ningún sollozo, y informar de mi situación.
- Solo quiero sabes si estás bien - me gira y acaricia dulcemente mi mejilla- y por tus ojos ya veo que no.
- Llego tarde al entrenamiento - susurro .
- Yo también, pero para mí es más importante entender porque una chica tan guapa como tú, ensucia su rostro - me mira apenado.
- Pablo, es mi segundo día aquí, como ya empiece a llegar tarde, no voy a durar mucho trabajando - susurro y él me suelta.
- Después quiero hablar contigo y no me valdrá ninguna escusa - habla y yo asiento - vete anda - besa mi frente - pero no vuelvas llorar, no me gusta ver a las princesas mal - susurra sonrojodandose levemente
- Gracias - susurro con voz entre cortada apartando la mirada.
- No tienes nada que agradecerme, pero recuerda tú y yo tenemos una conversación pendiente - sonrie amablemente antes de irse corriendo.
Narra Ana:
- Deja de mirarla - Jesús golpeo a Sergio, y volvemos a lo mismo, estos tíos me consumen, siempre igual.
- Es mi novia, creo que tengo derecho a mirarla - le respondió mi pareja mientras yo me levantaba de mi asiento rápidamente.
- Tucu ya - gritó caminando aceleradamente hacia a ellos.
- Chicos stop - el argentino cogió a mi hermano y lo apartó de Sergio todo lo que pude - dejen de pelearse como nenes chiquitos, porque no les sirve para nada, lo que van a conseguir es pelearse con ellas y que el club comience a tomar medidas.
- Es este imbecil que quiere robarme a mis hermanas, haciendo el papel de chico perfecto, pero sé que les vas a pegar la puñalada por la espalda cuando menos se lo espere, te conozco Sergio, he visto como has jugado con cada una de las chicas con las que has estado y me niego a que le hagas lo mismo a mi hermana - grita Jesús tratando de deshacerse del agarre de Joaquín, sabíamos que esto podía volver a pasar y él se ofreció a ayudarme.
- Amo a tu hermana te guste o no, y si alguna le hago algo malo, no te preocupes yo mismo me mataré- habla serio Rico, tanto que yo misma lo mire sorprendida - pero déjame ser feliz con ella, déjame demostrarte que puedo cuidarla, que puedo ser el hombre más maravilloso, y eso solo me lo saca tu hermana.
