Would You Die For Me? [ChanYeol Y Tú]

Capítulo 3 {Su delicada voz}

Narra EunHee.

Salí de la habitación en donde se encontraba YooRa y su hermano, yo solo tenía una felicidad que casi no se sabría explicar, sin duda en este día había habido mucha emoción y más recordado el solo hecho que ChanYeol solía ponerme incómoda con su mirada puesta en mí, tuve que salir rápidamente de ese ambiente antes de mi personalidad fuertemente vergonzosa saltará.

- EunHee ¿Cómo fue todo? -Una voz me hizo salir de mis pensamientos.

- Oh, hola de nuevo -le sonreí. Mmmh aunque no estaba lista para una operación de emergencia todo salió a la perfección -abracé al que es mi novio con una sonrisa grabada en mi rostro.

- Sabía que lo harías bien pequeña
-Acarició mi cabello. Cada día que pasa me siento orgulloso de ti, ser como eres es tan difícil.

- Lo sé, pero tú eres mi fuerza -Lo miro. JongDae... Te quedó una pregunta pendiente -me separe para ver a sus ojos.
El se quedó pensando unos segundos al entender de qué le estaba hablando pero cuando supo de la pregunta pendiente sonrió.

- Ooh si -ríe- Sí, te amo EunHee. -Me abraza un poco más fuerte.

- Es todo lo que necesito escuchar -me aferre aún más.

- Como me gustaría quedarme más tiempo así, pero debo ir al consultorio ¿Me dejas?

- Claro, puedes ir. -le sonreí.

- Adiós -besó mi frente. Te paso a buscar al final de la jornada.

JongDae se fue y yo seguí con mis tareas en el hospital, revisé algunos informes de otros pacientes, visité a todos los otros cuarto en donde había pacientes que esperaban operación, otros que se recuperaban, algunos en estado de coma y finalmente volví a pasar a la habitación de Yoora al cumplirse la hora.

- ¿Estás lista para el alta?

- Y no se imagina cuánto doctora, creo que más me lo pide el estómago -respondío la chica haciendo que ría.

- Entonces puedes irte, pero mañana regresas a primera hora ¿si?

- Si, no creo que mi hermano me dejé pasar ésta.

- Me alegra eso, trata de no hacer demaciada fuerza, no agitarte o dormir por al menos unas seis horas más.

- No se preocupe, yo la cuidaré muy bien Doctora. -Chanyeol dijo mirandome, por un momento sentí que lo dijo por mi y no por su hermana y mis mejillas se vistieron de un leve sonrojo no muy notable.

- Se que lo harás ChanYeol -sonreí nerviosa. Ahora solo deben firmar estos papeles y se podrán ir.

Y así lo hicieron, firmaron toda la documentación y abandonaron el hospital con un último "Gracias". El día continuó de la misma manera, el hospital se llenaba de nuevas personas que necesitaban atención, familiares visitando a aquellos que se encontraban inconscientes o simplemente superando alguna enfermedad crónica, a veces simplemente me preguntaba acerca del sentimento de aquellas personas que tienen que ver a quienes aman postrados en una camilla de hospital, débiles luchando contra una enfermedad. Tener la fuerza suficiente como para no llorar ante ellos era todo lo que debían tener al llegar al hospital. Cuando empezé a estudiar esta carrera, fue por que me gustaba poder hacer algo por los demás, sin embargo el estar trabajando en el hospital te hace ver que como así salva vidas, el hospital también las pierde, y no era un lugar que todas las personas quisieran visitar, es decir, la mayoría de las personas piensan que este lugar es solo para enfermos ¿Y quién quisiera estar enfermo? ¿Quién quisiera ver a tu ser querido en circunstancias extremas? Ese era un dolor que nadie debería pasar, pero lamentablemente pasa.