Tu Y Yo En La Oscuridad

Te amo, por favor no lo olvides...

En el aire está presente una mezcla de fuertes olores; tres de ellos los mas dominantes.

El primero, y el mas resaltante, es la fuerte esencia de uvas fermentadas, entre dulce y amargo era el vino tinto, aquel de donde proviene el penetrante olor a etanol que terminaba de borrar el rastro de queso del aire.

El segundo es una aroma relajante, espeso, entre una matiz dulce y acida que hipnotizaba, perfume de mujer... perfume de fresas que opacaba el olor a sudor que brotaba de ella.

El ultimo aroma cruzaba el ambiente con disimulo, como si no quisiera que lo percibieran, es sutil y opaco, con algo de dulce y finísima matiz acida que quiere pasar por en medio de el... Talco desodorante para hombre, ese es el origen del tercer olor.

Todo está sumergido en la sombra nocturnal, todo había desaparecido, el universo entero simplemente se esfumo y no existía nada excepto ellos. La única manera en la que Who sabe que Jenny está sentada sobre él era mediante el tacto de sus cuerpos.

Están tan cerca uno del otro que Who puede sentir cada respiración de Jenny en su cuello, por de bajo y hacia atrás de su oreja, él puede sentir sus pechos apretándose a él en un fuerte abrazo, siente el corazón de ella latir con fuerza, siente su lenta y suspirante respiración que comprime y amplia su torso superior.

Ambos están ebrios, con las mejillas enrojecidas. Por suerte todo está oscuro –Pensó Who –De seguro se reiría de mi si me ve todo rojo. En aquella habitación, que parecía infinitamente grande por la negrura, había empezado a bajar la temperatura, pero los dos cuerpos se daban calor mutuamente juntándose más y más, alejando el frio de la noche y dejando un calorcito agradable para sí.

– ¿Sabes? –Dijo Jenny en un susurro, su voz es dulce y casi infantil, de alguna manera esa vocecilla siempre estaba llena de una energía que sorprendía a Who todo el tiempo, no importaba cuantas veces la escuchara –Siempre quise hacer esto... sentir esto. –Cada palabra que ella pronunciaba era significaba un escalofrió que bajaba por la espalda de él. Se movió rápidamente y apretó aun mas a Who en un abrazo, como si intentara adherirse a el por completo.

Humn... -Fue el sonido que hizo Who mientras pensaba que decir, no tenia palabras, no era bueno para hablar. Eso es mentira. En realidad el olor de Jenny (fresas y sudor) y el escalofrió que le provocaba cada respiración que ella daba en su cuello lo tenía adormecido (por no decir idiotizado), una rara sensación de placer se creó tras su nuca y se empezó a expandir, tardo un rato hasta que pudo formar palabras en su mente y poder hacer que su boca las pronunciara –Si... Supongo que se siente bien beber como si no existiera un mañana.

-Primero que nada –Jenny se levanto del hombro de Who, coloco su mejilla con la de el y desde ahí le hablo en susurros al oído –: Sabes que no existe un mañana para nosotros -Esas palabras fueron como una puñalada para él, y para ella no fue diferente pero tenía que mantener su fama de Chica-Indiferente –.Segundo: Yo no hablaba de lo bien que se siente el vino, idiota... yo me refería a... –Dejo la oración en el aire.

– ¿Te referías a qué? -Pregunto él al fin.

–Me refería a... –Esta vez Who sabía que tenía que esperar a que ella usara si fuerza de voluntad para completar esa frase, segundos interminables pasaron y después Jenny desmayo su cabeza en el hombro de Who. Esta dormida... ¿¡De Verdad se quedo dormida en este preciso momento!?Pensó él. Aclaro su garganta de manera exagerada y ella se estremeció del susto, furiosa empezó a golpearlo sin parar, no es que le doliera eso porque sus golpes eran más suaves que los de un gato.

– ¿¡Que te pasa!? –Vocifero ella al tiempo que se cubría la boca con sus manos por darse cuenta de que uno de Ellos podía escucharlos. En un tono más bajo, pero sin quitarle un poco de la irritación que tenía y añadiendo un aire de miedo dijo –No vuelvas a asustarme así. Con tu vocesota creí que eras un carro arrancando.