TaeHyung se siente una mierda. Nadie le ha hecho o dicho algo malo, pero está molesto consigo mismo. Sus amigos quieren que se abra a ellos para saber el problema y tratar de solucionarlo, pero el solo respirar le duele.
Sus fosas nasales se expanden demasiado tal vez cada que obtiene aire y es que hace un intento de tranquilizarse con cada segundo que pasa. Es difícil, sus manos no dejan de moverse y apretarse a su ropa porque tiene tantas ganas de patear algo o golpear con tal de salir lastimado él.
Ese tipo de pensamientos le llenan la cabeza y parpadea varias veces para despejar sus ojos de las lágrimas que amenazan con salir cada que baja la guardia. Solo faltan unos minutos y podrá salir del carro para poder quedarse en la soledad de su habitación donde fácilmente sus pensamientos podrán devorarlo y sentirse más inútil.
La mano de JiMin está sobre la suya, temperatura tibia que da un poco de tranquilidad a su cuerpo, TaeHyung desea que esa tranquilidad se mantenga todo el tiempo pero en el momento en que el coche aparca, él mismo se aparta y sale porque piensa que no merece ese toque de ternura que le es brindado.
Decir que hace tiempo no se siente así es mentira, la presión a veces lo sofoca y quiere huir y no volver después de años o simplemente quedarse donde no sufra de nuevo. Claro que no lo hace, porque sabía a lo que se enfrentaba en el momento que decidió firmar, tendría que soportar varias cosas y salir adelante.
Una lágrima ya se ha escapado antes de siquiera tocar el piso de su habitación así que corre evitando hacer ruido porque piensa que ya ha causado demasiado daño.
Antes de notarlo, la oscuridad le rodea dando a entender que por fin puede reprocharse en voz alta todo lo que hace mal.
Oh, extraña a su mascota. Necesita de la energía, ternura y amor de su Yeontan.
Al final se queda en el sofá, piensa, se regaña, busca soluciones pero eso solo le da dolor de cabeza y quiere dormir tanto como pueda pero en unas horas tiene que presentarse en el escenario de Londres. Intenta inhalar y enseguida un sollozo suena por su parte.
No debería sentirse tan mal, claro que no. Los errores los cometen cualquiera pero a veces se acumulan tantas cosas que antes de que puedas notarlo terminas por soltar todo lo que venías guardando. En estos momentos, el Kim menor quiere un poco de consuelo.
No sabe pedirlo adecuadamente y por eso se destroza más, sus sollozos se hacen más fuertes. No sabe si pueden escucharlo, no importa de todas maneras.
Sabe que no lo merece. No en estos momentos.
Debería relajarse y pensar que próximamente podrá ver a sus fans y le llenarán de tanto amor que no sabrá dónde poner el restante. Le verán con admiración, le aventarán regalos, tal vez hasta una logré comunicarse con él a gritos y con gusto le responderá con el mismo amor o lo intentará, mostrará la máscara que ya es una parte de él y las fans quedarán complacidas porque sabe el efecto que les causa pero no está seguro de si eso es lo que quiere.
Es imposible, cualquier pensamiento positivo se vuelve negativo en el momento que se descuida y está harto de todo y tal vez, solo tal vez necesite relajarse porque lo que menos quiere es volver sus emociones agresivas.
Sus propios regaños sobre su control sobre la ira son callados por el sonido del timbre y quiere abrir y que lo abracen y llenen de cariño verdadero. Con un suspiro se levanta, la voz tan conocida y preferida de TaeHyung se hace sonar y mueve su corazón.
La preocupación de JiMin se hace notable con tan solo abrir un poco la puerta. Y lo primero que hace al estar frente a frente es que JiMin le da la vuelta para regresarlo a la oscuridad, cierra la puerta y lo regresa al sofá para darle un cálido abrazo. Joder, las lágrimas volvieron más fuertes.
Las calidez que sintió en el auto regresa haciéndolo soltar todo, completamente hasta vaciarlo. JiMin no se cansa de brindarle caricias por su espalda o enredar sus dedos en el cabello del menor, TaeHyung no sabía qué necesitaba tanto eso hasta que lo sintió y sinceramente para él es lo mejor que le pudo haber pasado desde hace mucho tiempo. Es un confort tan sincero que no cree que lo merece hasta que escucha la linda voz del mayor en un canto dirigido solo hacia él.
Decide ser egoísta y mandar el mundo a la mierda, merece ese amor y comprensión aún si es solo una vez al año. Quiere cariño, JiMin lo sabe por la forma en que se sostiene de él como si fuera a caer o como si él fuera a desaparecer para dejarlo ahogarse de nuevo.
Los sollozos se dejan de escuchar y a cambio la voz de JiMin llena el lugar dando tanta paz que no pareciera que se encuentran en un hotel. En algún momento el mayor empieza a repartir besos en la cabecera del menor que elevan la comisura de su labio, su corazón ya no late con fuerza por el odio y la tristeza y su mente se encuentra tranquila así que ya no piensa en nada problemático.
Se siente patético mejor dicho, no debió de sentirse tan mal por haber tirado el único almuerzo de un compañero del trabajo y aunque le compró uno mucho mejor y el compañero no estaba ni siquiera molesto por nada no pudo evitar sus propios sentimientos. Estaba mal desde hace unos días pero no se dio cuenta.
No, ya no piensa en eso y se concentra en los mimos recibidos porque ya está muy cansado y tiene que prepararse para una de las mejores presentaciones que darán esta noche. Levanta su cabeza lo suficiente para dejarle un beso en la nariz a JiMin porque se encuentra contento con el cuidado que recibió que no le molestaría fingir a veces malestar para recibir el cariño de JiMin de nuevo.
—Tae, vendría a darte todo el amor que tengo para ver esa sonrisa que te caracteriza siempre. —y ahora quiere llorar, pero de felicidad y no se arrepiente de decir las cosas en voz alta en cuanto recibe un abrazo mucho más fuerte que advierte a su hyung de que le sacará las tripas.
Ahora risas llenan la habitación y TaeHyung no puede sentirse más agradecido por tener no solo a JiMin a su lado, por tener tan buenas personas a su alrededor que piensa en regalarles algo mañana mismo a cada uno nada más porque sí.
No se necesita una fecha para regalar objetos o solo besos y abrazos. Así que decide devolver el amor que recibió con muchos más besos y caricias a JiMin. Aún queda un poco de tiempo para que vuelva a dar más amor a sus fans donde lo pasará bien.
Solo necesitaba desahogarse y eso no es malo, no es el único al que le pasa. El concierto fue un completo éxito y pasó la noche en compañía de su cariño donde durmió como un bebé y se encargó de no soltarlo por ningún motivo incluso cuando bajaron por su desayuno donde los demás llenaron de comentarios que ya estaban muy cursis para ser el inicio del día.
Sí, ese ambiente de alegría y bromas es adecuado para Kim TaeHyung y sus amigos.
Alv cómo chingados hice esto, salió de la nada
nO sÉ poNEr CORazonES aqUÍ :(
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Attention
Short StoryDonde TaeHyung a veces se siente mal y cuando todos esos sentimientos quieren explotar, JiMin le dará el cariño que necesite.