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El a lo primero visualizo lo blanco.

Era tan cegador como doloroso, se sentía levitar en esa luz, al instante sintió como una marea de voces lo atormentaba. Era inentendible lo que decían, sólo pudo entender a una de ellas diciendo alguna palabra extraña o algún nombre por lo que relaciona con los dichos de las otras voces.

Después de éso sintió que ésas voces se resbalan al tal punto de oírlas lejanas, y luego...... Nada.

Una inmensa oscuridad sustituye la luz y cuando intenta abrir sus ojos se ve cayendo en un extraño mar negro, ve como las burbujas de aire salen de sus fosas nasales a igual que de su pico, pero no se sentía ahogado ni siquiera sentía que le faltara el aire. Extraño.

Abajo de él se escuchó un "click" y un sonido de algo abriéndose se escuchó, su campo visual era inútil; no podía voltear a ver, sus ojos pesaban a igual que todo su cuerpo. Traspaso aquello de color blanco con una perilla y lo último que vió antes de sucumbir a la inconsciencia fue que en ése objeto blanco tenía dibujado un pequeño sol.

En medio de ésa oscuridad una luz se ilumina, era demasiado molesta por lo que siguió en su misma posición cuando de repente algo lo sacudía, quería que parará pero al parecer no estaba dispuesta a detenerse.

Él lentamente abrió sus ojos y visualizo un cielo azulado que lo adornaba los algodones blancos como la nieve; a su vez que una pequeña patita le sonríe y posa su cara cerca de él dando una perspectiva de cabeza.

– ¡Ya despertaste! — la pequeña daba brincos de alegría a su vez que daba la vuelta para ayudarlo a levantarse — tenemos muchas cosas que hacer hermano.

La patita tomó de sus manitas y lo jaló en aquel campo de verdes pastos; mientras caminaban rápido él no podía evitar preguntarse cuál era su nombre e incluso de su persona.

Y más preguntas hacían alarmas en su cabeza, ¿Por qué no recordaba nada? ¿Donde estaba? ¿Y cómo llegué aquí?

– ...Oye! — volvió a poner los pies en tierra al recibir el llamado de la patita — ¿Estas bien Donald?.

¿Donald? ¿Ese es su nombre?. Él asintío y la patita prosiguió — Oh bueno, porque tenemos muchas aventuras por recorrer — sonreía con mayor intensidad a la vez que corrían rápido.

El pequeño no la conocía pero algo cálido en su pecho floreció, lentamente comenzó a sonreír hasta que se nivelo al mismo humor que la pequeña.

Ambos corrían alegres por el pasto, en un momento se vieron en un lago que había en ése lugar; la pequeña lucía un vestido color azulado con un pañuelo de color rojo amarrado en el cuello de su ropa y tenía cabellos largos de color blanco (como sus plumas). Mientras que el estaba vestido de camisa, parecido a los que usan los marineros, de color azul y botones amarillo-dorado, y su sombrero era de color azul. Se veía tan pequeño, como si todo lo que habrá vivido fue un simple sueño.

– ¡Vamos Donnie! — volvían a jugar con sus juguetes, ella con su avión de madera y él con su barquito de madera; ambos imaginaban conducir en cada uno de los artefactos que usaban los juguetes, la niña anhelaba andar por los cielos con su avión mientras que el pequeño patito soñaba con ir a navegar con su barquito por los grandes mares.

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⏰ Last updated: Mar 29, 2019 ⏰

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Brothers- DucktalesWhere stories live. Discover now