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Kim Hyunjin

Mañana, día y noche eran los mismos. No sabía para que seguía viendo un rayo de luz pretendiendo que ellos volverían temprano. Se sentía un idiota por seguir confiando en sus palabras, dolía como no podía imaginar.

Es así como Kim Hyunjin pensaba en ese momento al darse cuenta de la hora que era, dos treinta de la mañana y ningún rastro de ambos adultos por el departamento lujoso de la ciudad de Seúl. No sabía por que seguía dándoles esperanzas.

Triste de ver pero era cierto, ellos ya no tenían tiempo para él. Los feliz cumpleaños se habían acabado desde hace cinco años, aún recordaba como SeokJin lo despertaba cantándole feliz cumpleaños mientras que Namjoon entraba con un delicioso pastel de zarzamora.

Solo era un recuerdo que quedará en un simple deseo infantil

La puerta de la entrada principal se oyó, escuchando los quejidos de cansancio de ambos adultos supo que no debía molestar así que solo subió a su habitación a amargarse la vida. Por que era lo único que le sabía a esa edad.

Ambos adultos entraron a la habitación de su único hijo, observando de reojo que estaba "dormido" —Está dormido —reconoció aquella delicada voz, SeokJin respondió con un tono de voz cansado

La puerta de su habitación fue cerrada y con esta un chasquido de su lengua fue lo único que pudo hacer. Volvió a recostarse, tenía clases temprano así que no quería lidiar con la voz de su padre, Namjoon teniendo que lidiar con el para que se levantara

—Papá Nam, papá Jin. Vamos, vamos, vamos

Aquél niño sonriente de la edad de siete años, jalaba de los brazos de ambos adultos hacia los juegos que se encontraba en el parque.

Solían venir muy a menudo y la gente que los reconocía los saludaban por ser unos bellos y cariñosos padres y responsables personas.

—Hyunjin no te vayas tan lejos

SeokJin era muy protector con su único hijo, era su adoración al igual que su esposo Namjoon. Verlo jugar divertirse y sobre todo convivir tan pacíficamente eran los principios con los que lo había educado hasta el momento.

El pequeño niño siempre presumía que su papá Jin era el mejor, cantaba para él y que cocinaba las mejores galletas del mundo.

Cuando eres niño ves todo el mundo de una manera tan buena, sin mentiras, dolor, felicidad, sobre todo: inocencia

—Papá Nam, papá Nam más alto

El pequeño infante se agarraba de las cadenas del columpio donde estaba. Su padre le había hecho caso al tener que impulsarlo más arriba, mientras que SeokJin estaba tan angustiado temiendo que el menor cayera de ahí

Exaltado se despertó de aquel sueño, era recuerdos. Una punzada en el pecho se hizo presente y las ganas de llorar también. ¿Por qué todo tenía que cambiar? Maldita codicia, pero de que se quejaba seamos honestos, Hyunjin era igual o peor que sus "amigos" en ese aspecto

Se desahogó llorando en su cama tratando de reprimir sus quejidos. Odiaba que lo vieran llorar, llorar era para débiles.

—NamJoon... SeokJin... jódanse

Como la vida puede cambiar en menos de lo que te esperas. Hyunjin no era feliz, vivía en un mundo en donde no podía confíar en nadie.

En su círculo de amigos pretendía ser algo que no era, ¿popular? Si, lo era. Las chicas lo buscaban por su bello rostro, al menos eso le agradecía a Jin por haberlo sacado de él. Amigos quienes presumían todo lo que tenían y podían conseguir con un solo chasquido de dedos.

Par de hipócritas

Había una chica en especial que le encantaba, sobre todo por su gran cuerpo. No podía decir que estaba enamorado, sino que le atraía en todos los aspectos que podía imaginar

Una vida divertida en la escuela ¿No lo creen? Donde solamente se dedicaba a burlarse de sus compañeros y alumnos de la escuela ¿para qué? Desahogarse era la palabra, pero no la opción ni acción correcta

Llegaba de la escuela y ninguno de los dos adultos se encontraba en casa, típico. Solo la ama de llaves se encontraba en esta para hacer los quehaceres del cual había sido contratada. Un delicioso plato de comida se posó a la vista, la mujer mayor le tenía afecto y el se lo agradecía. Solo con ella podía ser quién realmente era

Aquella señora de mayor edad solo se limitaba a verlo mientras limpiaba la cocina, tan solo con verlo podía observar podía notar el mal día que tuvo sin necesidad de preguntarle

La noche caía y con eso la mayor tenía que partir a su hogar, Hyunjin no le gustaba quedarse solo por las noche, mucha soledad para alguien quien había vivido rodeado de amor y de compañía por un largo tiempo.

—Debor irme Hyunjin, cuídate mucho niño

A veces se arrepentía por tratarla indiferente en algunas ocasiones. La puerta de la casa se escucho dejando así un completo vació, subió a su habitación donde tan solo se colocó sus audífonos mientras escuchaba su música en un ¡Pad que había sido regalado en su cumpleaños.

La misma rutina volvía a repetirse


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Hey ¿qué tal gente? ya sé que no debería estar haciendo más historias cuando tengo otras pendientes, pero es que me es inevitable, se los juro.

Tenía ganas de hacer una historia como esta, con drama, desamor y dolor, todo lo contrario con Is girl or boy? y pues solo pediré un poco de compasión, esta historia ya la tenia hace tiempo en borradores, para ser específica hace año y medio. Necesitaba escribir una historia HyunIn con este tipo de drama.

Así que si te gusta el HyunIn y el drama estas más que bienvenido a leer esta historia, agradezco los votos y comentarios que cada uno hace. Sin más los dejo disfrutar de esta historia

°•°•°Sonrisas y caricias🍃🍁•°•°•  «•°HyunIn•°»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora