Empezando otra vez. Capitulo: 1.

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Mi vida ha tenido altas y bajas, pero esto es ridículo; de tantos lugares a que mis padres me han llevado, ¿por qué tenía que ser forks Washington un lugar tan lluvioso? Pues desde que tengo memoria nos hemos mudado tantas veces que ya ni me acuerdo de donde hemos estado, ya tengo 16 años, y nunca nos hemos quedamos en un solo lugar, cada vez que era mi cumpleaños en ese mismo día teníamos que irnos, decían que era peligroso quedarnos en un solo lugar pero me han dicho que esta vez será diferente, que por fin nos vamos a quedar, ya que mi padre tiene conocidos allí. Te digo algo de mis padres y yo, mi padre se llama Jhaen Wolf es un hombre lobo y mi madre Taylor rous es un vampiro y yo soy Zaruy Wolf rous, jejej ya te imaginaras que soy verdad, soy un lobovampiro dicen que es imposible y esta prohibido, bueno a mis padres no les importaba eso, y me tuvieron a mí, un híbrido de un hombre lobo y un vampiro, tengo las ventajas y desventajas de los dos y pronto llegaremos a forks. Mientras que estábamos aun en la camioneta ciento todos los olores que están cerca como a lluvia y la tierra mojada que fue relajándome hasta que me quede dormida.

- Zaruy hija despierta, mi amor ya llegamos –dice mi padre despertándome.

- Mmmg ¿en serio? –me estiré un poco tratando de quitarme la flojera.

- Si cariño tu padre va ir a hablar con su amigo y nosotras iremos a nuestra nueva casa –dice mi madre viéndome.

- Ok, está bien –miro a mi madre desde atrás de la camioneta.

- Está bien, nos veremos en la casa –le da un beso a mi madre y me acaricia la cabeza antes de bajar de la camioneta.

- Bueno, ten cuidado –le dice mi madre poniéndose en el lado del conductor.

- Ok lo tendré –empieza a caminar hacía una cabaña donde estaba un señor anciano en silla de rueda, en eso empiezan a hablar.

Mi madre encendió la camioneta y empezamos a irnos a la casa, paso un rato de camino hasta llegar a la casa, mi madre y yo ya habíamos sacado todo lo del camión de mudanza y empezamos a poner todo en sus lugares correspondientes, ya había llevado todo lo mío a mi habitación y quitándome los zapatos me tumbo en mi cama, pues al día siguiente era mi primer día en la nueva escuela.

-A la mañana siguiente-

- Zaruy es hora de que te despiertes o llegaras tarde a la escuela –dice mi madre desde la puerta de mi cuarto.

- Mmmg está bien ya voy, ya voy grrr –digo levantándome tapando un poco mis ojos por la luz del sol.

- Ok, el desayuno está listo apresúrate o se enfriara –dice mi madre y yéndose a la cocina.

Me levanto de la cama empezando a vestirme, y salí de mi cuarto y yendo al baño a cepillarme los dientes, después bajo las escaleras al comedor donde mis padres ya estaban desayunando, en eso me siento y empiezo a desayunar junto a ellos.

- Buenos días hija, ¿cómo amaneces? ¿emocionadas por hoy? –dice mi padre leyendo el diario y tomando su café.

- Si, se puede decir que así –respondo comiendo mi desayuno.

- Jejej hija tus orejas y cola están fuera –dice mi madre con una sonrisa y señalándolos.

- Mm ha no me había dado cuenta, gracias madre –guardando mis orejas y cola.

- Está bien, termina de desayunar para llevarte a la escuela, hoy tan bien empezare en el trabajo en la estación de policía –dice mi padre con una sonrisa.

- Mm listo, vamos papa, o llegaremos tarde, chao mama –termine de comer, me levante y agarre mis cosas.

- Está bien, hija nos vemos y toma tu almuerzo, es tu favorito –dice mi madre entregándome un bolso de almuerzo.

La Primera HíbridaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora