Visto ✓✓ || Jachary

II.

Zach no supo como llego a su casa. No supo como pudo abrir la puerta y entrar.

Él solo sabía que estaba en su cuarto, más específicamente en el baño, bajo la regadera mojándose todo. Miro sus pantalones y allí había sangre, desesperado comenzó a fregarse con un jabón y se quitó toda la ropa quedando desnudo. Tirado en el frío piso mojado.

Su mente estaba muy alterada. Pequeños flashbacks venían a su mente. Haciendo que se agarrara el cabello y lo jalara desde la raíz, gritando de dolor

-Eso es lo que eres-dijo burlón-. Una puta.

El cuerpo de Jack temblaba gracias a los sollozos que salían de sus labios.

-Zach, bebé, por favor ayúdame- sentía que estaba muriendo, y no le importaba rogarle a su novio con tal de no morir. Él no quería morir.

-No, no, no, no.

Su cuerpo seguía temblando. Y no solo por el frío. El efecto de la droga habia pasado, haciéndole recordar todo lo que le hizo a su hermoso novio.

El había jurado cuidarlo, y no lo había cumplido.

-¡Yo no quería, yo no quería!

Se quedo mirando las caderas del chico. Con cuidado paso sus dedos rosando la piel.

Subió la mirada hasta el rostro de Jack y este los tenía cerrados. Lagrimas caían a sus costados y Zach en ese momento juro cuidarlo toda la vida.

-Soy un asco- Jack hablo con la voz rota

El menor solo se agacho un poco y dejo un suave beso en la zona.

-Aun sigues siendo perfecto.

Y como si fuera a propósito, su mente recordaba todos los momento que paso con Jack.
Torturandolo más.

Cinco meses, habia arruinado cinco malditos hermosos meses. Todo por culpa de Frank. Y si, él quiso echarle la culpa a ese chico. Porque él era el que lo habia drogado.

-Él no te obligo a que dañaras a tú bebé.

Zach miro para todos lados. Él estaba solo, nadie estaba en su casa. Y oía voces, que le decían a cada momento lo jodido que estaba y que ya no había vuelta atrás.

Y gracias al alcohol, se quedo dormido allí. Bajo el agua, acostado en el piso del baño.

(...)

-¡Mi amigo no es ningún suicida!- Stan grito furioso.

El doctor solo se le quedo mirando, se ajustó las gafas agarrando más fuertes los papeles que tenía en las manos.

-Lo lamento pero los cortes que tiene en los muslos son indicios de una persona suicida.

La sangre de Stan hirvió al oír aquello. Su mejor amigo no era ningún suicida.

-¡Le dije que no lo es!- Volvió a gritar batiendo las manos y tirando los papeles del doctor al piso.

El señor suspiro profundo, ajustandose de nuevo las gafas.

Tuvimos que agarrar puntis en las heridas. Está muy grave, esta noche es de vital importancia, si le da la gana de ir a verlo está en la jodida habitación 510. Y usted váyase al infierno- el doctor pateo los papeles del suelo y se fue.

Stan se le quedo mirando con los ojos abiertos. Bueno, sí. Tal vez se había pasado un poco y tenía merecido que el hombre le hablaran así.

Su corazón comenzó a doler al ver a Jack acostado en una camilla con su cara pálida, su cabello revuelto y muchoa cables conectados a su cuerpo. Se acercó hasta él sentándose en una silla a su lado.