Tenia 6 años, cuando murió mi abuela, era mi segunda madre, la que me hacia de desayunar, la que me llevaba a la escuela, la que me defendía de todo aquel que quisiera hacerme daño.
Recuerdo que sentía esa soledad, ese vacío en mi, tenia 6 años, yo no lo sabia, de hecho nadie, pero mi madre estaba embarazada, me entere horas antes de conocerlo. me dijeron que dios me había mandado un hermano para que me cuidara y nunca mas estuviera sola. yo creía que por tener un hermano todo se mejoraría, que ya no estaría sola.
Recuerdo cuando lo tome en mis brazos, tenia unos ojitos tan pequeños, una nariz tan pequeña, todo en el era tan pequeño, mi madre me dijo que tenia que ser fuerte, que ya no tendría esos lujos de antes, que ahora tenia un hermano, y que también el merecía roja, comida y juguetes.
Y así fue, de un día a otro mi madre ya no tenia ni para comprarme un chicle, ella ya no trabajaba por tener que cuidarme mi hermanito y a mi, antes de que mi abuela muriera, mi madre trabajaba, descansaba un día a la semana, amaba que descansara un domingo un miércoles, porque era el da en que me podía llevar al tianguis, para después ir al mercado a comprar ollitas de barro de esas que se pueden comer y una nieve de limón, para sentarnos en la banqueta a comerlo, y de camino a mi casa pasar a la tienda a comprar bubulubu de esos que tenían la promoción de que te podias ganar un bubulubu si el empaque venia marcado, y curiosamente siempre se ganaba como 5 o 6 el mismo día, hasta que llego el día en que la señora de la tienda no quería cambiar las envolturas.
Un día tenia una presentación, iba a bailar en el kínder, mi abuela era costurera, y ella siempre me hacia mis vestuarios, pero ese año ya no estuvo ella,mi madre seguía si tener dinero, y tuvo que hacer mi falda de una tela fea, opaca y sin vuelo, no era como la des otras niñas, tampoco llevaba el peliacate que me pidieron, porque ni para eso hubo dinero, todos se burlaron de mi que dia. Pero ey! no todo estuvo mal ese dia, fue la primera vez que mi mamá iba a verme bailar.
Mi mamá entro a trabajar como sirvienta a la casa de uno de los primos de mi abuelita, ellos tenían mucho dinero, y amaban a mi hermano, le hacían regalos muy caros, pero yo por la escuela no podía irme con ella, mi mamá le pidió a una de mis tías que me recogiera en el kínder y me dejara en mi casa, tenia 6 años y no sabia cocinar, pero siempre había pan bimbo y chocolate liquido, y eso era lo que comía mientras mi mamá llegaba.
Y asi era mi vida, dia tras dia, hasta que mi mamá llegaba, sentada en el piso de la sala, viend 12 corazones jugando con mis muñecas esperando a que ni mamá llegara.
Los sabados podía ir con ella, a su trabajo, o me pasaba a dejar a la casa de la mamá de "mi tía Dulce", ella en realidad no era mi tia, solo era una de sus amigas que había conocido en un trabajo que mi mamá había tenido alguna vez en una gasolinera, en algún momento de su vida.