El Idiota del Bad Boy #2 [SI#1]

CAPITULO NUEVE

La Tía Marta

Estaba teniendo un hermoso sueño con Justin Bieber y con Grant Gustin. Cuando estaba a punto de besar a Justin, mi alarma suena.

Me despierto de mala gana, pero luego sonrío, por lo menos no besé a Justin, te imaginas rechazar a Grant Gustin por Justin Bieber? La Hayley del sueño iba a hacer algo tan estúpido, pero la alarma me salvó.

Miré la alarma y eran las siete y cincuenta y cinco, faltaban cinco minutos para que empiecen las clases. 

Me levanté deprisa y empecé a arreglarme a modo flash. Bajé las escaleras y cuando iba a entrar en la cocina, golpeé mi dedo meñique con un mueble. Agarré mi pie y atajé las ganas de llorar. Intenté correr para entrar a la cocina, pero el dolor de mi dedo aumentó. Hoy no es mi día.

Llegué a la cocina y estaban Justin, Sophia, mis padres, Matteo y Cassie, y todos me miraban extrañados.

- porque nadie me despertó mas temprano? voy a llegar tarde - reclamé y todos me miraban como si hubiese salido del hospicio.

- donde llegarás tarde? - pregunta extrañada mi madre - no sabía que tendrías un compromiso justo en una mañana de un sábado - ella agarra un plato con panqueques y lo pone en mi frente - aquí esta tu desayuno, y buenos días.

- buenos días? - respondí algo extrañada, me senté en la mesa y me dí un golpe mental. Hoy es sábado y no viernes, que tonta soy.

- es extraño verte despertar en los fines de semanas - dice Justin con la boca llena.

- pensé que era viernes 

Empecé a comer mi desayuno y cuando terminé me fui al living y empecé a ver una película.

5 horas después

Ya no aguanto más, estoy super aburrida. Suspiré y me acosté con la cabeza hacia abajo en el sillón. Agarré mi teléfono y me recordé que tenía que hablar con Aaron.

Fui algo torpe en salir del sillón que acabé cayéndome al suelo, golpeando mi cabeza.

Agarré mis cosas y me fui de ahí, por el camino iba pensando en lo que diría a Aaron, ya que sé que en el momento no tendré la mas mínima idea de lo que le diré, digamos que no soy muy buena con las palabras.

En unos dos minutos llegué en frente de su casa, suspiré y toqué el timbre, no tardó mucho en que una mujer me atendiera.

- hola, no quiero comprar galletas, tengo muchas, gracias - me dice con una sonrisa algo falsa.

- galletas? - pregunto frunciendo el ceño.

- no hacer parte de las girls scout? - yo niego con la cabeza -  lo siento, pensé que lo eras, porque eres enana como ellas - sonreí falsamente, debo tomarlo como un alago o como una ofensa? - bien, que necesitas?

- Aaron está?

- tu eres su noviecita? sabía que ya lo tenía, pero nunca pensé que sería una chica tan linda como tu 

- yo no soy su no...

- entra bonita - ella me estira para adentro - quieres un pastelillo? o prefieres algo salado? te gusta el agua? - ella empieza a preguntarme cosas sin sentidos y yo solo me limito a sonreír - para que viniste mismo?

- para hablar co...

- me recordé, viniste a ver a tu novio

- no es mi n...

- mira, sube las escaleras y su habitación es la que esta al lado del baño, ahora voy a preparar algo para comer, nos vemos pronto - ella se va, sin decirme donde se queda el baño, genial!

Subí las escaleras y abrí todas las puertas, hasta que finalmente pude encontrar a la habitación de Carpenter.

- hola, puedo pasar? - pregunté amablemente, él se volteó a mirarme y asintió - bien - cerré la puerta de su habitación y me senté a su lado en la cama.

  - hablaste con mi tía Marta? - preguntó frunciendo el ceño con una expresión algo seria.

- intenté hacerlo, pero ella no me dejaba - me burlé y él sonrío.

- puede ser molesta aveces, pero es una buena persona

- debe ser - se quedó un silencio algunos segundos - y como estas?

Él suspiró y me sonrió - estoy bien

- pero porque tu y Justin se pelearon? - pregunté alzando una ceja.

- no escuchaste ni una palabra que decimos ayer, verdad? - yo niego con la cabeza - pues, ayer necesitaba su ayuda y él me falló - dice algo decepcionado y con rabia. Puse mi mano en su hombro y le sonreí amablemente.

- sepas estaré contigo siempre que necesites algo, podrías haberme llamado 

- es que son cosas de chicos, tu no vas a entender 

Yo asiento y luego nos quedamos en silencio.

- gracias por haber venido Hayley, eres una verdadera amiga 

- lo sé - tiro mi pelo hacia atrás con una sonrisa burlona y nos reímos.

Alguien abre la puerta de golpe y nos volteamos a mirar por el susto y era nadie mas y nadie menos que la tía Marta.

- traje pizza de pollo, galletas de miel que son muy buenas para la salud, también jugo de zanahoria que hace bien para los ojos, también para la piel y también traje agua, te gusta verdad novia de mi sobrino?