"Tic tac
Tic tac
Tic tac"Era el sonido de el reloj que empezaba a molestar.
Cansada la joven pelinegra se despojo de las sábanas que fueron su refugio de calor durante las pasadas ocho y pico de horas.
Puso los pies en el suelo para luego levantarse y meterse en el baño.
Con un poco más de velocidad se puso el uniforme de el instituto en el que hoy comenzaría a asistir.- Buenos días cielo!- saludo con alegría y cariño,como siempre, la madre de la chica - ¿Cómo dormiste? -
- Bien mamá,buenos días papá -Le dió un beso en la mejilla a el hombre sentado en a la mesa que leía el periódico de el día.
- Buenas cariño, mírate,te ves tan madura con el uniforme - orgulloso pronunció.
- Papá...- para disimular la vergüenza sacudió levemente la cabeza - Tengo que irme,se me hace tarde,adiós,los quiero -
- Cuídate cielo!- fue lo último que escucho antes de salir corriendo.-...-
- Amor,va a estar bien~-
-...Si tú lo dices Ryoba-La chica empezó a correr para poder llegar a una hora decente mientras repasaba mentalmente los horarios.
Después de correr una distancia considerable pudo llegar a el frente de la grandiosa e imponente Akademi Highschool.
Solo los alumnos con un C.I. muy alto podían entrar, o con una influencia política o económica considerada.
Claro, no podíamos esperar algo inocente detrás de una mente cruel y despiadada.Ayano soltó un suspiro y con un paso más lento se dirigio a la entrada sin prestar atención a sus exuberantes compañeros.
Todos diferentes y con algo especial, pero a nuestra pelinegra no le importaba en lo más mínimo.Pasó a los lockers donde los alumnos se cambian los zapatos o rara vez dejan algo que ocuparán después.
Acto seguido decidió ir a recorrer la escuela para familiarizarse con el nuevo y llamativo entorno.>Debería...hablarle a alguien?<
Pensó.
Desde pequeña una extraña enfermedad se hizo presente. No podría identificar sus emociones y sus padres estaban tan devastados que no le quedó de otra más que fingir que podía ser normal para así ya no ver esas lamentables lágrimas que solo le daban pena.>Presentarme a los profesores?...No, de todas formas me reconocerán en el aula...<
Las personas a su alrededor pasaban, unos más apresurados que otros. Todos con cosas que hacer.
La chica iba tan distraída en su mundo que solo sintió el impacto y el suelo frío al caer.- Oh dios mío! Estás bien?! -
Exaltada solo pudo levantar la vista y toparse con una cara que reflejaba una preocupación sincera, uno de los sentimientos que hace tiempo ella anhelaba tener.
El chico frente a ella estaba extendiendo su mano, invitándola a tomarla para levantarse.
No dijo nada y tomó su mano.
El contacto cálido con esa piel lleno su interior con una sensación extraña.- Disculpa, estaba sumido en mi mundo y no vi por donde iba -
El joven sonrió apenado por su comportamiento.
Las palabras no podían salir. Sus manos temblaban al igual que sus piernas y su corazón no paraba de sonar en su cabeza.- E-Estoy...bien, gra...ci...as -
Apenas pudo pronunciar, pero lo dijo tan bajo que el chico enfrente de ella tuvo que acercarse a escuchar, lo que incómodo a Ayano.
- Me alegra! Entonces nos vemos luego -
Se despidió con la mano y siguió con su camino.
Cuando por fin pudo reaccionar se dio la vuelta rápidamente para verlo, pero ya se había ido.De repente ya no supo que hacer.
Solo se quedó en medio de el pasillo sin percatarse de la mirada de aquella persona que la observaba con una intensidad que no era normal.
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Hasta Que Sea Necesario...
Fiksi Penggemar"Soy el único que sabe la verdad...pero¿porque no regresas y me amas a mi? Porque el?! Ayano,mi dulce y tierna Ayano,y nuestra promesa? Ya sabes el castigo. No importa cuántas veces tenga que hacerlo. Esperaré a que reinicies y lo haré de nuevo. Te...